Gorgeous | Max Verstappen [✓]

56. so long, london

📍Londres, Reino Unido
🗓 7 octubre de 2022

Una sensación agridulce recorrió mi cuerpo cuando me desperté. Era viernes, segundo viernes de septiembre y eso significaba una cosa; hoy finalizaba el curso. Estaba feliz por una parte porque, primero, había aprendido demasiadas cosas y, segundo, que se acabara significa la vuelta a las carreras, cosa que echaba más de menos de lo que esperaba hace un mes. Pero, por otra parte, echaría de menos Londres y no me hubiera importado un mes más de curso, podría haber aprendido muchas más cosas y mejorado aún más.

Hoy era un día libre, por ser el último día, estuvimos las cuatro horas de clase dibujando y pintando lo que quería cada uno. Yo estuve intentando hacer algo bueno, pero no estaba inspirada y nada me parecía realmente bueno. Aún así hice un cuadro del parque a donde llevé a Max hace dos semanas y pinté el lago y los patos, el castillo de fondo y las flores que decoraban todo el parque, no era lo mejor que había hecho, pero no me disgustó del todo.

Al terminar la clase, su última clase, me acerqué a Claire que recogía sus cosas. La profesora levantó la mirada cuando notó mi presencia y me sonrió amablemente.

-Norris, ¿pasa algo?- me preguntó.

-Llámame Rebecca, por favor.- la mujer asintió, accediendo a mi petición. Me llené de vergüenza antes de empezar a hablar y era algo raro en mí, mi madre, y ahora también me lo dice Max, dicen que soy un poco sinvergüenza, pero ahora mismo me encontraba sonrojada por lo que quería decirle a Claire.- Yo quería agradecerte sinceramente por todo lo que has hecho durante el curso de arte. Ha sido una experiencia increíble para mí, y quería expresar mi gratitud por tu dedicación y enseñanza. Realmente he aprendido mucho y he disfrutado cada momento. Tus consejos y tu guía han sido invaluables para mí, y estoy muy agradecida por tu paciencia y apoyo.

-Oh, Rebecca, ¡qué amable de tu parte! Ha sido un placer tenerte en clase y ver cómo has crecido como artista durante este tiempo.- la sonrisa que me enseñaba transmitía un sentimiento de calidez que me hizo tranquilizarme.- Me alegra escuchar eso, Rebecca. Siempre es gratificante ver a mis estudiantes desarrollarse y encontrar su voz artística. Estoy segura de que tienes un futuro brillante en el mundo del arte.

-Gracias, Claire. Quiero seguir practicando y mejorando, de verdad, me gustaría llegar a ser alguien en este mundo.- le dije sinceramente. Era lo que más deseaba.

Durante estos últimos meses se habían añadido un par de deseos a mi lista, como el de compartir mi vida con Max; vivir juntos, casarnos e incluso tener hijos, también estaba el deseo de que Lando ganara su primera carrera y un campeonato del mundo, pero en mi número uno siempre había estado este, desde que era una mocosa quería que a la gente le gustara mi arte y ser famosa como los pintores que veía en clase.

-Estoy segura de que llegarás lejos, Rebecca. Si alguna vez necesitas más orientación o consejos, no dudes en contactarme.- le dediqué una mirada agradecida por su ofrecimiento.

-Lo aprecio mucho, Claire. Gracias nuevamente por todo.

-No es nada, Rebecca, es mi trabajo y me encanta ver a alumnos tan determinados como tú, eso te hará llegar a donde tú quieras. ¡Mucho éxito en tus futuros proyectos artísticos!

Significaba mucho para mí sus palabras. Mi hermano y mi novio siempre me lo repetían y se lo agradecía, pero, sin ofenderlos, ¿que sabían ellos de arte? Solo decían eso porque me querían y quería que me sintiera bien, sin embargo las palabras de Claire venían de una profesional en el área.

Me despedí de ella y salí de clase, donde Daph y Aaron me esperaban para irnos a comer juntos para celebrar el final del curso. Fuimos en el coche del castaño, no solía traerlo, a veces era más fácil moverse por Londres en metro que en coche, pero el restaurante que habíamos reservado estaba alejado del centro y pensamos que ir en coche sería lo mejor.