Desamor En La Ciudad [BORRADOR]

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"Nunca decirlo"

Rebecca y Aldo

Rebecca era una chica inteligente y extrovertida que siempre destacaba en la escuela. Durante su segundo año de secundaria, se enamoró perdidamente de Aldo, un chico un año mayor que ella.

Rebecca estaba caminando por el pasillo abarrotado de la escuela cuando, de repente, chocó con alguien. Al levantar la vista, se encontró con Aldo, quien también parecía sorprendido por el choque.

Rebecca: (avergonzada) Lo siento mucho, no te vi.

Aldo: No te preocupes, fue mi culpa. Estaba distraído.

Rebecca: Bueno, de todas formas, lo siento. ¿Estás bien?

Aldo: Sí, estoy bien. ¿Y tú?

Rebecca: Sí, estoy bien. Bueno, nos vemos luego.

Aldo: Claro, nos vemos.

Mientras se alejaba, Rebecca no podía evitar sonreír. Aunque el choque fue un accidente, para ella fue como si el universo les estuviera dando una excusa para interactuar, y no podía dejar de pensar en ese breve encuentro durante el resto del día.

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Durante un evento escolar, Rebecca se encontró con Aldo en la entrada. Ambos estaban tratando de entrar al mismo tiempo y terminaron chocando levemente.

Rebecca: Lo siento, no te vi ahí.

Aldo: (riéndose) No te preocupes, parece que siempre terminamos chocando, ¿no?

Rebecca: Sí, parece ser una tendencia. ¿Estás aquí por el evento?

Aldo: Sí, vine a ver la presentación de mi hermana. ¿Y tú?

Rebecca: Vine a apoyar a mis amigos que están participando en el concurso de talentos. Deberías quedarte a verlo, será genial.

Aldo: Tal vez pase por ahí. Bueno, nos vemos luego.

Rebecca se alejó con una sonrisa en el rostro, sintiéndose emocionada por haber compartido ese breve momento con Aldo. Cada interacción con él la hacía sentir especial, como si realmente importara.

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En el último día de clases, Rebecca se encontró con Aldo en el pasillo. Mientras caminaban en direcciones opuestas, chocaron levemente.

Rebecca: Parece que siempre terminamos chocando, ¿verdad?

Aldo: (riéndose) Sí, parece ser una constante. ¿Cómo has estado?

Rebecca: Bien, gracias. ¿Y tú? ¿Estás emocionado por la graduación?

Aldo: Sí, un poco. Aunque también estoy un poco nervioso por lo que viene después.

Rebecca: Entiendo. Bueno, te deseo lo mejor en el futuro. ¡Y felicidades por tu graduación!

Aldo: Gracias, Rebecca. Nos vemos.

Rebecca se quedó parada en el pasillo, viendo a Aldo alejarse. A pesar de que la conversación fue corta, significó mucho para ella. Estaba emocionada de haber tenido la oportunidad de interactuar con él, aunque sabía que Aldo la veía solo como una chica más en la escuela.

A pesar de que apenas habían tenido interacciones, cada encuentro con Aldo era como un rayo de sol en su día. Sin embargo, para Aldo, Rebecca era simplemente una conocida más, y no le prestaba mucha atención.

Rebecca y Danna estaban sentadas en el parque, disfrutando de un día soleado. Rebecca parecía inquieta, como si estuviera a punto de confesar algo importante.