Without end [ Kagehina ]

VII - Campeonato cercano

Hinata ha dormido después de una insistencia de Kageyama en la cama y él en el suelo. Pero antes de que eso pasase, Hinata al entrar a la habitación, se ha impresionado demasiado viendo que todo está lleno de cuadros y posters, la mayoría de cuadros son de vóley y todos los posters de vóley, le ha encantado lo bien que dibuja, hasta se lo ha dicho dedicándole una sonrisa tierna.

Pero ahora Hinata está dormido con su mejilla apoyada en el colchón y su cuerpo esparcido por toda la cama, estando como siempre, ocupando toda la cama, y es que aunque esté en casa ajena, esa manía no la puede quitar tan fácilmente.

Kageyama se levanta tocando su espalada, ya que dormir en el suelo con una mera sábana en el suelo como colchón fastidia la espalda bastante. Se levanta estirando su cuerpo mientras cierra sus ojos bruscamente. Al abrirlos, ve a Hinata en la cama y solo sonríe tiernamente sin darse cuenta.

Después de darse cuenta que tiene que moverse, lo hace y sale de ahí intentando no hacer nada de ruido. En la sala se encuentra a Hana y a Haruko jugando a las cartas, más en concreto el uno.

—Buenos días chicas —el azabache adormilado va a la cocina y su hermana lo ve como abre la nevera y coge la leche para hacerse un vaso de leche con galletas frío.

—Hola, ¿cómo has dormido? —dice colocando un más dos verde en la pila de descarte haciendo un quejido por parte de Hana que se chupa dos cartas más en las diez de su mano.

—Bien, ¿y vosotras? —dice yendo aún medio dormido a la mesa donde juegan, empapando las galletas por unos segundos y luego mordiéndolo para comerlo, todo esto mientras las ve jugar.

—Ambas hemos dormido bien —entonces cae en que Shoyo está durmiendo con él—, ¿y Shoyo?

—Oh, él aun está durmiendo —cuando va a desviar la mirada ve el teléfono de Hinata en la mesita del sofá.

—Ya veo —dice Haruko poniendo una carta—, ¡Uno!

—¡Maldita sea! —se queja Hana con trece cartas en la mano pensando si hace trampas, no es normal que tenga siempre tan buena racha en todo—Haces trampas.

—Solo se jugar, no como tú —ríe por lo bajo y Hana le devuelve la risa que acaba rápido por el hecho que Haruko pone su última carta que encima es un más cuatro.

Hana pone las cartas de su mano en su frente intentando pensar cómo es posible que haya ganado tantas veces en una sola mañana—¿Quieres jugar? —mira a Kageyama que ya ha terminado su vaso con galletas y que ha dejado en el lavavajillas.

—Solo una partida —Haruko reparte a los tres.

Llevan como diez partidas en las que han despertado a Hinata que ahora camina moribundo a la sala rascándose sus ojos y sin acostumbrarse a la luz del sol que entra por la ventana llenando toda la habitación.

Kageyama es el primero en darse cuenta, ya que las chicas están a espaldas del pequeño pasillo por el cual aparece. No puede evitar sonreírle y este devolverle la sonrisa mientras se acerca y se pone en una silla.

—Mira quien aparece, el bello durmiente —comenta Haruko en risas y ganando la partida como en todas las anteriores haciendo que todos se quejen—, ¿qué tal?

—Bien, gracias —pone su frente apoyado en el borde de la mesa, aun tiene sueño asique bosteza dos veces y vuelve a levantarse dejando a la vista un Hinata medio muerto de sueño, ha dormido bastante bien, el caso es que por esa razón, quiere dormir más.

—Shoyo, que sepas que puedes venir cuando quieras —baraja las cartas Haruko mientras habla con el pelirrojo—. Me has caído bien, eres bienvenido.