CAP 11

27 4 1
                                    

POV SILVIA ...............

-Señorita, necesito que me acompañe- dijo un hombre en el marco de la puerta de la que era mi casa- recibió las indicaciones- se adelanto a hablar al ver mi cara de completa confusión

Silvia: si, lo olvide, a donde me llevaran?, me puedes decir quien es tu jefe- dije mientras me acomodaba un poco la ropa ya que me levante de la cama rapidamente.

-Ira de vuelta a casa, la llevaremos por aire, todo será en completa  confidencialidad, su hija y amiga la esperan- dijo este, pero estaba dudando, porque de vuelta a México, esta debe de ser una trampa, Alfonso me encontró, pensé rápidamente como me podía escapar.

-No se asuste, le enviaron esto para que confié en nosotros, yo la cuidare, tengo ordenes de dar la vida por usted si eso es lo que se debe de hacer- dijo este entregándome un sobre mas con una foto de Fabiola y una carta mas.

CARTA....

Sil, estaremos esperando aquí por ti, al volver puede que todo acabase mas pronto de lo que imaginaste, te queremos.

Silvia: esta bien, que pasara con la casa y todas las cosas?- dije mirando a mi alrededor

-Se quemara esto en mas o menos unos 10 minutos, no podemos dejar evidencia de que esto estuvo aquí y mucho menos que usted si quiera piso suelo Indio- dijo mientras me mostraba el camino a una camioneta

Silvia: déjame sacar algunas cosas, por lo menos para el viaje.

-No necesita nada, todo lo que necesita se lo envió la señora Fabiola.

Silvia: Fabiola?- pregunte asustada, no será esto mas bien una trampa.

-Antes de venir aquí ella fue quien eligió la persona que se encargaría de usted, me pidió que le trajera algunas cosas- dijo mientras volvía a mirar a todos los lados, porque estaba tan nervioso?- solo necesito que nos vamos de aquí rápido, no es seguro que estamos aquí no tuvimos permiso de aterrizar y es cuestión de minutos para que nos saquen de aquí.

Silvia: solo iré por las fotos que hay en la habitación- dije mientras entraba a la casa dudando un poco de todo pero tenia que confiar en que Fabiola fue quien escribió aquellas cartas, cuando menos lo pensé estaba ya sentada en un Jet privado, intente interrogar a aquel hombre que me trajo aquí pero al parecer estaba muy bien entrenado para no decir nada, porque simplemente me ignoraba o contestaba lo necesario, me entrego una maleta donde habían algunas prendas de vestir, entre ellas una camisa que el regale a Fabiola en su cumpleaños, así que si era ella quien había hecho tanto por mi, al quedar descubierta tuve que dar mi brazo a torcer y salir de aquí, muchas horas de vuelo después aterrizamos en un pueblo remoto de México donde me obligaron a bajar rápido de ahí, cuando estaba en una camioneta negra que iba a toda prisa por una abierta finca o hacienda, no identifico muy bien, a lo lejos logre escuchar la policía, creo que alguien tendrá problemas en aquel lugar donde quede el JET.

-estaremos unos días aquí mientras pasa el tiempo en el que pueda volver tranquila a casa, puede ponerse agusto, enviaron algunas cosas para que se sienta cómoda, no debe de salir de este lugar sin mi, no debe de asomarse a las ventanas ni prender las luces despues de las 7pm ya que debemos de hacer lucir este lugar como si estuviera abandonado para no llamar la atención de la gente del pueblo, cada lunes a las 9am le darán un toque a la puerta después de 10 minutos se abrirá sutilmente la puerta y recogeremos aquella caja que vendrá cargada de suministros, ese es el único momento donde esa puerta se abrirá, entendido?

Silvia: okey- dije sin mas, camine a un cuarto y deje la maleta, para recostarme en la cama y quedar profundamente dormida, no me había dado tiempo de pensar más en lo que estaba sucediendo, todo el vuelo de la India aquí me dejo agotada, por estar en alerta de que algo pudiera pasarme, cuando desperté al día siguiente me encontré con una caja al lado de un televisor y algunas películas, por lo menos no moriré del aburrimiento al no poder salir, gracias a Dios pensaron en mi, espere pacientemente durante algunos días noticias de Fabiola, pero nada me decía aquel chico que me cuidaba, pasaban las horas y ya me sentía desesperada aquí dentro de estas cuatro paredes, cuando por fin me llamaron a cenar respire un poco, extrañaba mucho la comida mexicana y al aparecer este chico sabia bien como prepararla, al terminar de cenar nos levantemos de la mesa y me fui a lavar los platos, debía de buscar pronto algo que hacer, mientras el leía un libro yo limpiaba cosas de la casa, acomodaba la ropa en los armarios, para final de tarde ya no tenia nada mas que hacer, así que me fui a dormir, esperando que esta pesadilla acabara pronto.

QUE SEA VERDADERODonde viven las historias. Descúbrelo ahora