⭟ 《 Pink Rockstar 》⭟ KookMin

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Jungkook estuvo a punto de golpearse la cabeza contra la mesa. Pasó cinco minutos tratando de convencer a Jimin de que no morirá en la montaña rusa y que él mismo sugirió que fueran allí.

— P-p-pero estaba pensando, jugar juegos y tal vez la noria después. No atracciones que pongan en peligro mi vida—. Jimin tenía un enorme puchero en su rostro mientras se aferraba a su novio, quien contenía la risa mientras seguía comiendo de la canasta de papas fritas.

— ¡Hyung! ¡Vamos!— Jungkook gimió antes de golpearse la cabeza contra la mesa.

— Kook, tú y yo podemos subirnos. Jimin puede quedarse aquí—. Ofreció Taehyung.

— ¿Me vas a dejar?— El puchero de Jimin sólo creció.

— Cariño, vinimos aquí para celebrar. Haremos lo que él quiera, luego lo que yo quiera y luego lo que tú quieras. ¿Está bien?— Taehyung negoció hacia su novio.

Jimin resopló antes de obedecer, dejando que Taehyung y Jungkook salieran corriendo a subirse a la montaña rusa. Taehyung besó el costado de los labios de Jimin antes de irse.
La montaña rusa era enorme. Cada bucle se veía más grande que el anterior. Cada gota se volvía más y más intensa. Causando que el corazón de Jimin "cayera hasta su hermoso trasero", como dijo Taehyung. 

Jimin se quedó en el restaurante, estaba vistiendo pantalones cortos de mezclilla rotos, una camisa blanca de manga corta, que estaba metida dentro de sus jeans, y un cinturón negro en los aros de sus pantalones cortos. Llevaba unos tenis de cuadros blancos y negros. 

Su cabello era de un rosa vibrante cuando el sol de la tarde lo atravesaba. El sol lo cegaba ligeramente por un lado mientras sorbía su batido molesto.
Se desplazó por Twitter antes de enviar mensajes de texto a sus amigos, con el mismo puchero de antes. 

El restaurante en el que estaban tenía como tema un restaurante de la época de los 70. Los asientos eran de cuero y rojos. Las mesas eran de color azul claro y plateado. Un mostrador con taburetes de cuero rojo y una preciosa pelirroja tomando órdenes detrás del mostrador. Jimin miró a su alrededor y observó a todos en el restaurante. 

Había un grupo de adolescentes riendo y comiendo mientras parecían estar trabajando en un proyecto. Dos niños y tres niñas.
Luego, en la mesa directamente detrás de él había una pequeña familia. Dos madres y tres hijos. Dos hijos y una hija. 

La hija parecía tener tres años. Ella era casi más ruidosa que los adolescentes. Era adorable con su cabello negro recogido en una cola de caballo. Comida por todas partes, mientras su madre, que era exactamente igual a ella, le limpiaba la cara riendo. 

Luego había un grupo de chicos riéndose entre ellos. Parecía ser un equipo deportivo. Luego había una pareja. Una chica con cabello negro largo y rizado y piel pálida, luego otra chica con cabello negro corto, con rizos apretados como piel bronceada.
Jimin observó a todas las personas en sus propias burbujas pasando tiempo felizmente entre ellos. 

La vida se sentía tan tranquila, la vida se sentía tan maravillosa. Finalmente estaba en una banda. Iban a salir de gira pronto. Tenía novio. Simplemente sentí que nada podía salir mal. Lo que sacó a Jimin de sus pensamientos fue que el pelinegro se acercaba rápidamente y su novio de cabello azul frambuesa. 

La camisa abotonada de Taehyung con un diseño a cuadros estaba desordenada al igual que su cabello. Sus jeans azules rotos se ajustaban sexymente a su cuerpo. Sin embargo, Jimin nunca diría eso en voz alta.

Jungkook vestía una sencilla sudadera con capucha negra y jeans negros. Su cabello también estaba recogido en una cola de caballo, pero Jimin asumió que la cola de caballo se salió durante el viaje. Ya que su cabello estaba tan desordenado como el del hombre a su lado. 

La combinación de colores de Jungkook no encajaba con los colores brillantes que vestía la pareja. Taehyung también lo criticó por eso. Pero Jungkook ni se inmutó. Siguió usando la misma ropa que decidió usar. 

Ninguna súplica, puchero o presión lo haría cambiar. Jungkook y Taehyung se sentaron riendo el uno con el otro.

— ¡Eso fue jodidamente fantástico!— Jungkook vitoreó emocionado mientras se pasaba los dedos por el cabello.

— ¡Eso es seguro!— Jimin les sonríe antes de apagar su teléfono. 

Lo deslizó en su bolsillo mientras tomaba la mano de Taehyung y luego comenzó a arreglar su cabello.

— ¿Supongo que es mi turno de elegir algo que hacer?— Taehyung miró entre los dos, obteniendo un asentimiento de ambos. — Casa embrujada.— Es todo lo que dice.

Una gran sonrisa apareció en el rostro de Jungkook mientras sus ojos se agrandaban y brillaban. Mientras tanto, el cuerpo de su novio se quedó inmóvil mientras sus ojos estallaban de terror. El agarre en su mano se hizo más fuerte.

— Demonios si.— Cantó Jungkook.

— Bebé, ¿podemos hacer algo más?— Susurró Jimin.

— Mimi, te protegeré. No te preocupes—. Taehyung le dirigió a Jimin una sonrisa reconfortante.

— Bien.— La voz de Jimin fue baja cuando Taehyung lo sacó de la cabina.

La pareja rosa y azul siguió a Jungkook, quien vitoreaba con entusiasmo.

Jimin se llenaba de pavor a cada paso que daba.

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Soy Jimin en este capítulo, sin duda alguna. No soporto ir a los parques de diversiones, justo por la casa embrujada y las atracciones llenas de adrenalina como las montañas rusas.

Nos leemos pronto :)