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Jimin resopló mientras apagaba su teléfono y lo dejaba sobre su mullido edredón rosa. Apartó las piernas a un lado de la cama y se puso las pantuflas abiertas. Arrastrando los pies hasta la habitación de Hoseok.

Ni siquiera llamó, sino que abrió la puerta y arrastró al mayor fuera de su cama.

— Jimin, ¡¿qué diablos?!— Hoseok ladró mientras Jimin lo arrastraba hacia la habitación de Jin.

Abrió la puerta de una patada y empujó a Hoseok sobre la cama de Jin. El dueño de dicha cama estaba mirando esto con los ojos muy abiertos mientras estaba sentado en la cama frente a su teléfono. Jimin cerró la puerta y se sentó al final de la cama frente a los dos mayores en la cabecera de la cama.

— ¡Necesito hablar con ustedes dos!— Los labios de Jimin formaban un puchero firme y sus ojos ardían con determinación.

— ¡¿A las 12 de la madrugada?!— Hoseok resopló.

— ¡Sí! Hablé con Jungkook hace unas horas-

— ¡¿Entonces nos lo estás diciendo ahora?!— Hoseok chilló, visiblemente molesto porque su hermoso descanso fue interrumpido.

— ¡He estado pensando en ello toda la noche! ¿Viste sus tweets?

— ¿Sobre sus dolores en el pecho?— Jin pregunta.

Jimin asiente apresuradamente.

— Después de esos tweets, Tae corrió a su casa. Luego, un poco más tarde, le envié un mensaje de texto para preguntarle cómo estaba Jungkook y no obtuve respuesta. Así que le envié un mensaje de texto a Jungkook, pero cuando finalmente respondió, hacía pausas muy largas. Como pausas de un minuto. Creo que él debe ver a un médico.— Jimin frunce el ceño ante la idea de que el más joven esté enfermo.— Además, sigue postergando el asunto diciendo que estará bien una vez que empecemos a salir de gira.

— Espera, ¿te vas a ir de gira?— Hoseok se sienta.

— Oh, ¿me olvidé de decírselo chicos?—Jimin sonrió mientras se tocaba suavemente la cabeza con la palma de la mano.

— ¡Sí idiota! ¿Qué gira?

— ¡Cuándo!— Jin se sentó mientras apagaba su teléfono.

— En algún momento del próximo mes, estoy seguro. Dado que acaban de lanzar un álbum, es natural que después nos vayamos de gira". 

Jimin sacudió la cabeza con las manos en la cintura. Los dos mayores pusieron los ojos en blanco al unísono.

— Será mejor que tomes muchas fotografías o te golpearé.— Jin ladra mientras pellizca la mejilla de Jimin.

— ¡Suelta!— Jimin apartó la mano del pelinegro.— Y lo haré. No te preocupes.

Hablaron un poco más antes de dirigirse a sus respectivas habitaciones. Olvidando por completo la razón principal por la que Jimin los unió. 

Dejando el pensamiento muy en el fondo de sus mentes.

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Nos leemos nuevamente, ¿cómo han estado? (ノ・∀・)ノ

Nos leemos nuevamente, ¿cómo han estado? (ノ・∀・)ノ

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