Ámame otra vez +21

Capitulo 18/Violentas Confrontaciones

Steven

—No pensé que volverías de nuevo—Toma asiento delante mío sin ganas con un moño desordenado y un conjunto de ropa blanca. 

Mira a Eidan detrás mío a quien le dije que no era necesaria su presencia, pero no se fía de Bella puede que cometa una locura porque esta vez nada se interpone entre nosotros no como la primera vez que podía verla atreves de un cristal.

Mirandola ahora parece mas calmada que la ultima vez, menos irritada. 

—No lo tenia planeado, pero investigue lo ultimo que dijiste—levanta la mirada en mi dirección sin ninguna expresión—Y me pregunte como mi hermanita sabia de la muerte de la mujer de Darío. 

Se muerde el labio inferior un síntoma de irritación de su parte algunos hábitos no cambian. 

—¿Mujer? esa no era su mujer—De todo lo que le dije solo proyecto esa palabra miro de reojo a Eidan quien tampoco entiende mucho por lo que noto. 

—¿Bella que hacías en México? Cuando yo explícitamente te deje en la isla privada al sur oeste de Asia—Baja la cabeza mordiéndose la uñas de su mano derecha—Si no me lo dices yo mismo te entregare a los Mexicanos. 

De claro mordaz sin ninguna empatía ya tengo muchos problemas por su culpa. Con tan solo decir eso levanta la cabeza rápidamente con temor en sus ojos como nunca antes la había visto después de lo del abuelo.

Niega rápidamente y habla. 

—Mama me saco de la isla no...no confiaba en ti Steven temía que un día me entregaras o me mataras entonces me mando a México fue la peor decisión que tomo por mi.

Temer de mi, ¿Mi madre temía que le hiciera algo a Bella? Por dios!! ahora si la mataría prácticamente condeno a Bella al infierno al mandarla a México. 

Le tiembla la voz al hablar y a mi, ni si quiera se que sentir verdaderamente Bella es todo lo contrario a mi temerosa se deja guiar por los demás sin ningún tipo de decisiones en ella misma eso es lo que creo mi madre en ella. 

Una muñeca que podía controlar.

Mi madre pensó que quería matarla ahora claramente lo hare y antes también lo tenia planeado, en eso no se equivoca porque pensaba que era un estorbo para mi al igual que pensé que lo seria mi primo y mi tío. 

Ellos eran lo primero en deshacerse de mi camino y después siguió Bella lo demás fue sencillo después de todo. Me prometí a la edad de trece años que seria el Don de la Bratva era mi única manera de poder seguir esta vida. 

Arrebate sueños como dijo mi abuelo. Ahora en solo un mes tengo que volver a rusia para tomar mi lugar en la Bratva como el nuevo Don. 

—¿Que hiciste en México Bella?

No tengo mucha paciencia y Bella es lo sinónimo de la espera total para sacarle algo que no quiere mencionar. 

—Todo marchaba tan bien, pero un día al volver de mi trabajo una camioneta se paro en frente mío me subieron a la fuerza al principio pensé que me habían encontrado los hombres de papa, pero no, nos tuvieron encerradas es un sótano un año Steven. 

¿Sera trata de personas? Los Mexicanos tienen ese tipo de trabajos muchos de ellos se manejan con ese trabajo dudo que Darío también lo haga. 

—Un día llego alguien al sótano y miro a cada una de nosotras y de todas me eligió a mi, no quería ir, pero era mejor irse que quedarse en ese lugar. El estaba casado Steven y... Solo me encerró y me quede ahí esperando. 

—¿Donde te encerró Bella?—pregunto ansioso por saber mas. 

—En la mansión había otra mansión yo me quedaba ahí. Me prometió muchas cosas me dijo que tenia planeado divorciarse y quedarse conmigo y nuestra hija—se señala con la mano temblorosa y los ojos cristalizados.