Capítulo 18: Ultima Sonrisa I

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El sol empezó a adornar el día con sus luminosos rayos, la mañana era tranquila y algo fría. Una pequeña y fina capa de niebla a la altura de los talones te enfriarían los pies si anduvieras descalzo.

En ese bosque de arboles gruesos de troncos oscuros, había varias cabañas de aspecto extravagante. Construidas de forma redonda y con los mismos troncos oscuros de sus alrededores. En una de ellas, un chico despertó repentinamente.

—Despierta Lyrel! no querrás llegar tarde a la ceremonia!— Se escucho un grito femenino en la habitación continua, era su madre. El chico se cambio apresurado y se calzo unas extrañas sandalias, para ir en su encuentro.

En la habitación principal la vio, Una mujer esbelta de piel gris, cabello blanco y ojos violetas. Al ver a su hijo, la mujer dejo de agitar una cuchara en un gran caldero y fue a su encuentro:

—Aww mi niño— Dijo mientras lo abrazaba demasiado fuerte. —Estas preparado? Hoy es tu gran día!— hablo mirándolo con seriedad, pero en sus ojos pudo ver el cariño profundo, que le aseguraba que, si incluso hoy lo hiciera todo mal, ella estaría ahí para protegerlo. 

—Si mama!— El chico solo alcanzo a decir nervioso antes de que su madre le diera empujoncitos hacia la salida. —Vamos, vamos el anciano ya te esta esperando—

El chico salió de su casa con nervios y tensión, y con pasos mecánicos se fue acercando al gran árbol en el centro de la tribu.

Allí una enorme multitud lo estaba esperando, que al verlo abrieron un camino hacia el centro, cuando paso por el varios le dieron golpecitos y palabras de animo. En el medio de la multitud el Anciano, el enorme árbol y una especie de barril lo recibieron.

Al verlo, el viejo cascarrabias solo asintió. Luego se dirigió hacia la multitud.

—Hoy estamos aquí reunidos...— Hablo con una voz fuerte y profunda. — Para ser testigos de nuestra iniciación a Lyrel como mago y... como persona— Un fuerte vitoreo sonó en la multitud.

El anciano, con su bastón, golpeo el árbol enorme haciéndolo mágicamente vibrar profundamente. Pronto un centenar de semillas cayeron de sus enormes ramas. La gente vio con asombro y se reían cuando algunas de estas les caia en la cabeza a alguno de sus conocidos.

Lentamente, el suelo se cubrió de las extrañas semillas y el barril se lleno de ellas. El anciano tanteo con la mirada, su cara llenas de arrugas lucia satisfecha. 

Lyrel con practicidad le tendio las palmas al anciano, el, sin dudarlo, saco una daga y se las corto. El niño hizo una mueca ante el dolor pero no se quejo. Cuando empezó a sangrar profusamente el anciano lo tomo por las muñecas y las movió sobre el barril.

Lentamente la sangre goteo y mancho todas las semillas dentro de el. Luego de eso, esperaron.

—Por favor, por favor...— Suplico internamente. Afortunadamente sus suplicas no quedaron en el aire. En barril brillo y tembló, lentamente de el emergió una hermosa semilla que a diferencia del resto brillaba como una vela.

La multitud vitoreo y el anciano le dedico una sonrisa ahora aliviada. Luego el viejo tomo con delicadeza la semilla y se la dio al joven.

—Ya sabes que hacer. Debes de escalar la gran colina y plantarla allí, solo cuando hagas eso podrás tomar una de las flores que hay alli...— Dijo con una absoluta seriedad. Lyrel asintió con igual emocion.

...

El sol ya estaba a mitad de camino, ya era de tarde. Había tardado horas en subir, con los cortes en su mano cada vez que trepaba un poco le dolía un infierno. Pero la espera era infima ante la ganancia.

Cuando logro poner ambos pies en la cima miro la gran planicie allí. Un enorme campo de flores de todos los colores del arcoíris, todas ellas plantadas por sus ancestros y los ancestros de sus ancestros.

Con delicadeza planto la suya, escarbó un agujero con sus manos sangrantes y luego de colocarla lo volvió a llenar. Luego de eso estuvo una hora entera pensando en cual de las hermosas flores debería llevarse.

Al final eligió una Rosa Ígnea.

...

Bajar tomo casi el mismo tiempo que subir. Ya había resguardado la flor en su jardín interno. Se disponía en volver antes de que acabara el día, tal vez si se apresuraba marcaria un récord.

Cuando iba a mitad de camino vio una columna de humo saliendo de la dirección a la que se dirigía.

—Que esta pasando?— Algo en su corazón hizo que empezara a apurarse. 

Corrió por los bosques, saltando las raíces aérea y pasando sin cuidado sobre zonas fangosas o de arbustos de espinas. No fueron pocas las veces que cayo, ni fueron pocas las veces que se lastimo, pero había logrado terminar el recorrido en la mitad de tiempo...

Cuando llegó al borde del bosque y divisó el humo, un grito desgarrador se escapó de sus labios. El pueblo estaba envuelto en llamas, el fuego devoraba las cabañas y la gente corría en todas direcciones, gritando y suplicando por ayuda.

El corazón de Lyrel se heló en su pecho al ver la devastación. Sin pensarlo dos veces, se lanzó hacia el caos, ignorando el dolor en sus manos heridas y el miedo que amenazaba con paralizarlo.

Entre las llamas y el humo, vio a sus amigos y vecinos siendo arrastrados por unos humanos de aspecto barbárico, quienes reían con crueldad mientras cargaban a los cautivos en carromatos tirados por bestias. La desesperación se apoderó de él cuando reconoció los rostros familiares, y un feroz deseo de salvarlos lo impulsó hacia adelante, el tenia que actuar.

Sin embargo, su valentía se congelo en un instante. En medio del caos, divisó el cuerpo carbonizado de su madre. Sus rasgos no eran reconocibles, pero su silueta y cabello sedoso le decían todo lo que necesitaba...

El dolor lo golpeó como un puñetazo en el estómago. Se arrodilló junto a ella, incapaz de contener las lágrimas que brotaban de sus ojos.

En ese momento de desesperación, una mano pesada se posó en su hombro, y Lyrel se volvió para encontrarse con la mirada fría de un barbaro. Antes de que pudiera reaccionar, fue sometido y atado con fuerza, su libertad arrebatada en un instante.

...

Ahora, mientras era arrastrado lejos de su hogar en manos de sus captores, Lyrel se aferraba en su interior a la rosa ígnea que había tomado como un símbolo de esperanza. Aunque su cuerpo estaba herido y su corazón destrozado, una llama de determinación ardía en su interior. No permitiría que su tribu fuera olvidada, y haría cualquier cosa para liberar a su gente y vengar a su madre. La oscuridad de la esclavitud solo avivaba su determinación de encontrar la luz de la libertad.

Desde ese momento, su nombre fue cambiado y su rostro ya no mostraría una sonrisa verdadera de nuevo... 

...

N/A: Que pareció la Side History?! A que no adivinas quien es xD

Espero que el capitulo de haya gustado! Deja una estrellita o coment si así lo fue! Lo agradecería muchísimo.

Un saludo y que tengas lindo dia!

Renací Como Mi Personaje Vampiro!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora