Capítulo Siete

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Una sensación de nerviosismo se apodera de todo su cuerpo. También de su mente. Quiere responder de inmediato el mensaje. En cosa de segundos, pasan por su mente muchas frases posibles como respuesta.

"Estoy bien". "Te he extrañado". "Después que te fuiste, mi vida ha estado desolada". "Esperé que me escribieras durante tanto tiempo". Etcétera.

Infinidad de palabras llegan a su mente. No obstante, luego reflexiona sobre la pregunta de Jungkook: ¿Cómo has estado?

-Solo dile que bien -se regaña a sí mismo en voz alta.

Se pregunta cuál es la motivación de Jungkook para escribirle después de tanto tiempo. Poco más de nueve meses.

Segundos de intensa reflexión más tarde, Jimin escribe:

"Hola Jungkook. Estoy bien y me alegra saber de ti ¿Cómo te ha ido en tus clases?"

El rubio adolescente intenta disimular la emoción que siente.

"Me ha ido bien. Cuídate Jimin." Fue la discreta respuesta de Jungkook.

Luego de aquello, Jimin no vuelve a saber de él.

Días después, Jimin accede nuevamente a reunirse con su pretendiente Yoongi, quien lo recoge un día domingo por la tarde para llevarlo al Parque Olímpico.

Yoongi es un estudiante universitario y es hijo de padres divorciados. Su padre es abogado y vive en Japón y su madre vive en Estados Unidos hace algunos años. Vive en su propio apartamento, regalo de su padre como reconocimiento a su buen rendimiento en los estudios.

-Nunca había venido aquí -le confiesa el rubio.

-¿Y saber patinar?

-¿Qué? ¿Patinar?

-A eso vinimos. Tranquilo, si no sabes yo puedo enseñarte.

Una sonrisa tímida se asoma en el rostro del adolescente, la que acusa su inexperiencia en el patinaje. Ambos se preparan para ingresar a la pista de hielo. Se colocan los patines y Yoongi, amablemente ofrece su mano al chico. Él la toma y lo sigue hasta el centro de la pista.

-No me sueltes, por favor.

-Jamás -Yoongi se comporta como todo un caballero.

Ambos recorren la pista de la mano. Yoongi demostrando sutilmente su habilidad para patinar sobre el hielo, aunque sin descuidar a su compañero a quien lleva de la mano en todo momento. Permanecen en el lugar alrededor de dos horas.

-¿Vamos a comer algo? -le pregunta el joven universitario.

-Bueno.

Esta vez ambos deciden ir a un restaurante de comida típica. Yoongi se esmera en hacer que la noche sea conmovedora, llenándola de gestos dulces y atenciones para Jimin. El chico está encantado.

-¿Me puedes ir a dejar? -le pide el pelirrubio.

-Por supuesto. Te iré a dejar a tu casa.

-Um, iré a dormir a casa de Taehyung.

-Oh, de acuerdo.

Al llegar a casa de su amigo, Yoongi, acompaña a Jimin hasta la puerta. La madre de Taehyung abre la puerta.

-Hola Jimin. ¿Yoongi?

-Hola -responden ambos.

-Vengo a quedarme esta noche. ¿Se lo dijo Tae?

-Sí, me lo dijo. Aunque sabes que puedes venir y quedarte cuando quieras.

-Pasen. Yoongi, pasa un momento.

MI REFLEJO EN TUS OJOS (En edición) KookMin/JiKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora