MI REFLEJO EN TUS OJOS (En edición) KookMin/JiKook

Capítulo Trece

Durante un fin de semana, Taehyung se alista con cuidado, su corazón late con anticipación. Ha invitado a Lisa a ver una película en el cine y luego a disfrutar de una comida en algún lugar acogedor. Él y Lisa se han vuelto muy cercanos, pero aún no existe una relación romántica entre ellos. A pesar de que sus sentimientos por ella son evidentes, Taehyung no ha reunido el valor suficiente para confesarle su amor.

En su habitación, típica de un joven de 18 años, hay posters de sus bandas favoritas en las paredes, una guitarra apoyada en un rincón y una pila de ropa apilada descuidadamente sobre una silla. El escritorio está lleno de libros y cuadernos abiertos, mezclados con algunos videojuegos. Taehyung, alto y delgado, se ha vestido con esmero con un jeans azul oscuro, una camiseta gris y una relucientes zapatillas blancas. Su cabello está perfectamente peinado, en contraste con el desorden de su cuarto.

—Ya me voy —le anuncia a su hermano Jungkook, quien está inmerso en la lectura de un libro en la sala.

La ropa deportiva y el cabello despeinado de Jungkook refleja una despreocupación usual de un domingo en casa. La atmósfera de la sala es calmada y cálida, con luz suave que entra por las ventanas y una leve fragancia a café recién hecho.

—Suerte —le desea a su hermano menor.

—Espero tenerla —dice Taehyung, con una mezcla de nervios y determinación—. Hoy le pediré a Lisa que sea mi novia.

—¿Ah? ¿Hoy? —exclama Jungkook, levantándose del asiento con asombro.

—Sí... ¿Por qué?

—No, no. Por nada en particular. Es solo que no me lo esperaba. Digo, la conoces hace tan poco tiempo.

—Hermano, perdóname por lo que te diré, pero yo no esperaré un año para confesarle mi amor a Lisa como tú lo hiciste con Jimin.

—Oye, eso no es justo. Yo estaba en Londres y no podía decírselo —se defiende Jungkook.

—Pudiste haber hecho una llamada —replica Taehyung, encogiendo los hombros.

—No, esas cosas se hacen personalmente. Y sí, tienes razón, un año fue demasiado tiempo para haber comenzado mi relación con Jimin. ¿Sabes qué? Te apoyo. Creo que debes sincerarte con Lisa para ver qué pasa con ustedes. Ella tendría que estar loca para no darse cuenta del tremendo partido que tiene enfrente.

—Eso lo dices porque eres mi hermano.

—Exactamente por eso lo digo. Porque soy tu hermano y te conozco muy bien.

—Bueno, ya me voy. Hoy sabremos si Lisa y yo seremos novios finalmente o si terminaré con el corazón roto —dice el chico antes de salir de la casa.

La tarde avanza y Taehyung llega al cine, donde Lisa ya lo espera. El cabello negro y largo de la chica cae en suaves ondas sobre sus hombros, contrastando perfectamente con su hermoso rostro pálido. Lisa lleva un pantalón beige ancho, un suéter blanco y unos tenis urbanos que completan su estilo relajado pero elegante. Al verla, Taehyung siente que su corazón late con más fuerza.

—Hola, Lisa —dice Taehyung, intentando mantener la calma.

—Hola, Taehyung —responde Lisa con una sonrisa que lo desarma.

Juntos entran al cine y eligen sus asientos. Durante la película, Taehyung no puede evitar sentirse nervioso. Sus manos están ligeramente sudorosas y su mente no deja de repasar las palabras que ha ensayado tantas veces. Lisa, por su parte, parece disfrutar la película, riendo en los momentos adecuados y susurrando comentarios a Taehyung, lo cual lo tranquiliza un poco.

Después de la película, deciden caminar hasta una pequeña cafetería cercana. El lugar es acogedor, con luces tenues y una atmósfera tranquila que invita a la conversación. Piden unas bebidas y se sientan en una mesa junto a la ventana.