Algo dorado// Traducción Dramione

2

31 de octubre de 1995

Las mazmorras resuenan con música y charlas a medida que los estudiantes comienzan a participar en nuestra fiesta anual de Halloween de Slytherin. Es la única época del año en la que generosamente abrimos las puertas de nuestra sala común a todas las casas. Llámennos santos. Halloween se trata de ser quien quieras y lo que quieras, ¿verdad? ¿Por qué no dejar que los menos afortunados finjan que son dignos de Slytherin por una noche?

Sorprendentemente, los Hufflepuffs son con los que siempre puedes contar para traer algunos recuerdos de fiesta bastante decentes.

"Jansen, ¿supongo que esta es esa hierba muggle?" —pregunto mientras sostengo el frasco y examino el contenido verde que contiene.

Él asiente con la cabeza: "Un lote aún mejor que el del año pasado".

"Excelente. Puedes pasarle esto a Zabini.

Unas cuantas chicas de Ravenclaw me miran con los ojos al pasar. Les doy un brusco asentimiento, pero decido no seguir interactuando con ellos. En cambio, me dirijo a donde está Theo, que actualmente está ocupado mirando a cada chica que ingresa y estampando una calificación en cada una como si fuera una especie de concurso.

"Siete. Escuché que se sopló un Hufflepuff de cuarto año en el baño de los prefectos el trimestre pasado", nos dice Theo a Blaise y a mí mientras sus ojos siguen a la rubia Gryffindor.

– ¿Cómo demonios entraron? —pregunta Blaise mientras me pasa la hierba muggle.

"Probablemente también sopló a un prefecto", Theo se encoge de hombros. "Ahora bien, ahí mismo hay un nueve".

Sigo su línea de visión hasta la puerta principal mientras inhalo lentamente el humo. En lugar de localizar a la bruja a la que Theo se refería esta vez, termino viendo a Potter y Weasley. Entregándole la hierba a Theo, cruzo la habitación hacia donde están los dos idiotas.

"Bueno, bien", repito, ganándome su atención. "Los dos amantes decidieron venir de fiesta juntos, ¿eh?"

"Cabrear a Malfoy", se burla Weasley.

"Esa no es forma de hablar con el anfitrión", respondo. "¿Dónde está tu niñera? Tengo que decir que estoy sorprendido de que ustedes dos hayan logrado abrirse camino a través de la escuela sin su ayuda".

"¿Por qué te importa dónde está Hermione?" —pregunta Potter, con un tono insinuante.

"Solo tengo curiosidad por saber quién cuidará de tus dos traseros después de que hagas el ridículo esta noche", digo mientras le arrebato dos tazas a un cuarto año. Me doy la vuelta para mirar a los dos entumecidos, les pongo las bebidas en las manos y les digo: "Disfrútalo".

-*-

Apoyado contra la pared del fondo, miro a Blaise, que tiene un Ravenclaw en su regazo, y a Theo, que tiene dos Hufflepuffs en el suyo.

"Repugnante", se burla Pansy mientras se acerca.

—No seas celoso, Pans —bromeo—.

Me quita el cigarrillo de la boca, se lo coloca entre los labios y da una calada antes de decir: "Sé que es tradición permitir que todas las casas entren por la noche, pero ¿no podríamos haber hecho una excepción al prohibir esos dos?"

Sigo la dirección en la que señala su dedo. Mis ojos se posan en Potter y Weasley una vez más, que están chocando descuidadamente con todos y derramando el contenido de sus bebidas en el suelo.

Dioses, ¿esos son los dos que todos consideran capaces de derribar al Señor Oscuro?

Patético.

Solo duero una hora más antes de irritarme de codearme con todos en la sala común y de que las chicas borrosas me pasen sus manos viscosas por el brazo. No me malinterpreten, soy un chico adolescente, obviamente quiero que las chicas estén encima de mí, pero preferiría que no estuvieran a solo unos segundos de lanzar por todas partes.