Mi prometido

Capítulo 61 (Parte 13)

-Los amigos son tesoros valiosos porque son difíciles de encontrarlos.

Camila Blaise:

- Ayer me quede durmiendo luego de que me despidiera de mi mejor amiga, me dispuse a mirar películas en el dormitorio, no quise salir para nada de la habitación, cuando me fijo la hora del día siguiente había sido la seis de la mañana en mi celular que se encontraba en el tocador a lado de mi joyero me quedo viendo la foto que nos sacamos con Dest me encuentro triste que se hubiera mudado con su esposo y me dejara sola en el internado sin contar que el idiota de Alec Stick estará presente hasta finalizar la ceremonia de graduación demonios, correrán los rumores al tener pocas amistades no bastará para callarlos requiero una solución rápida para sobrevivir al internado, se me ocurre una idea hablaré con Simón Breeze, alzó el celular del tocador para enviarle un breve mensaje a Dest para pedirle que me pase el número del mejor amigo de su esposo.

- Que horror pedir esto exclamó frustrada pero no se me ocurre otra solución debo hacer esto si queremos seguir manteniendo las apariencias no permitiré que se burlen de mi persona incluyendo a Dest prometimos cuidarnos desde que éramos niñas. Será un acuerdo mutuo para ambos noto cierta atracción que tiene hacia mi distraerme será lo mejor tal vez nunca pueda entregar mi corazón a otra persona por temor a que lo vuelvan destruir como Alec me hizo sentir cuando rompimos y pensar que nos juramos un amor eterno hasta nuestro último aliento unas cuantas lágrimas caen por mis mejillas decido darme una breve ducha.

Alec Stick:

- Despierto por la alarma de mi teléfono debo alistarme ayer me quede planeando los últimos detalles para entregar los informes de las cuentas bancarias de las personas que estafó engañándolos con promesas vacías y que todo está a nombre de mi padre como gane su confianza probablemente me acompañe en el internado los guardias personales de él, no me perderá de vista omitiendo que la veré a Camila en los pasillos pero es un riesgo que debo correr lo haré por ella y mi mejor amiga con eso en mente me preparo para alistarme y salir al internado.

Camila Blaise:

-Me termine de alistar que consistía en un par de jeans Baggy una polera lila y un par de zapatillas blancas que son cómodas y por último mis preciados aros argolla de color oro que fue un obsequio que me regalaron mis padres cuando gané la beca para el internado, mi lucha eterna por salir adelante fue a lo que me llevo en el lugar donde me encuentro ahora, además estuve recibiendo becas de diferentes universidades todavía me hallo indecisa por cual decidir y la carrera escogida fue negocios internacionales me gustaría quedarme aquí y no irme a otro estado.

Alec Stick:

-Me termine de acomodar con la ropa que había dejado en la silla del escritorio que consistía en una polera básica, un par de jeans oscuros y mi chamarra de cuero negra con mis zapatillas negras de Adidas bastantes cómodas para las actividades que realizare agarro la mochila donde meteré los informes acompañado de un par de cuadernos para camuflar el peso de la mochila, en el internado no utilizamos cuadernos sino tablets pero igual tenemos esa opción por suerte los imbéciles de los guardaespaldas son despistados antes de irme recojo la cadena de plata.

- Abro la puerta del departamento y la cierro para irme caminando hacia el internado que me queda cerca pero como suponía me esperaban afuera de mi domicilio, la gente de papá para llevarme al internado con un ligero buenos días y mi mejor sonrisa me subo a la camioneta de vidrio blindados nunca antes había recibido ese trato de mi progenitor, que desgraciado eres pienso, pero muy pronto estarás tras las rejas con eso en mente espero llegar al internado.

Camila Blaise:

-Termino de arreglarme salgo del dormitorio y paso por el comedor del internado para comer algo ligero no cuento con mucha hambre en el mostrador le pido a la vendedora una manzana roja y acompañado de un agua para refrescar mi estómago después de haber cenado una pizza entera para mi sola fue delicioso no me arrepiento espero a que me entreguen la bandeja con las cosas que pedí y sacó un par de dólares para pagar con las manos ocupadas me siento en una mesa desocupada que cuenta con una sola silla cuando noto a mi ex acompañado de unos hombres vestidos de negro qué demonios intento mirar a otro lado cuando percibo que él me mira fijamente que incomodo aligero la mirada prefiero ignorarlo y cumplir la promesa que le hice en la fiesta de la boda de Dest, haríamos como si nunca nos hubiéramos conocido.