El Hospital Kim Health es una institución destacada en Corea del Sur, donde los mejores médicos se esfuerzan por brindar atención de primera. Kim Jennie, una neurocirujana y la hija menor del señor Kim, propietario del hospital, se embarca en nuevas...
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°Unos días atrás°
Taehyung se despierta con el primer rayo de sol que se filtra por las cortinas. Durante unos breves momentos, la somnolencia le ofrece un respiro del dolor que lo consume. Pero entonces, como una ola implacable, la realidad lo golpea con fuerza. Su mejor amigo, Jungkook, el mismo por el que su corazón late con desesperada devoción, está enamorado de otra persona.
El recuerdo de la noche anterior se precipita en su mente: las risas de Jungkook y su nueva pareja, las miradas llenas de complicidad y amor que se intercambiaron. Taehyung siente un nudo en el estómago, una sensación de vacío que amenaza con devorar todo lo que queda de su esperanza. Se sienta en la cama, sus ojos se llenan de lágrimas mientras contempla el techo, tratando de procesar el dolor que lo abruma.
Cada rincón de su cuarto parece recordarle a Jungkook. Las fotos enmarcadas de momentos felices, los pequeños regalos que se han dado a lo largo de los años, todo parece ahora una cruel burla de su amor no correspondido. Taehyung se siente traicionado, no por Jungkook, sino por sus propios sentimientos, por haber dejado que su corazón se enredara tan profundamente.
Con un suspiro profundo, se levanta y camina hacia la ventana. La vista de la ciudad, normalmente un consuelo, ahora se ve borrosa a través de sus lágrimas. El mundo sigue adelante, indiferente a su sufrimiento. Sabe que Jungkook no tiene la culpa, que el amor no puede forzarse, pero eso no alivia el dolor que siente. Cada sonrisa de Jungkook con su pareja es una puñalada, cada muestra de afecto un recordatorio de lo que nunca podrá tener.
Taehyung se siente desgarrado entre la felicidad por su amigo y el dolor de su propia pérdida. Sabe que deberá encontrar una manera de seguir adelante, de curar su corazón roto, pero en este momento, el futuro parece sombrío y solitario. Se sienta junto a la ventana, dejando que las lágrimas fluyan libremente, esperando que, de alguna manera, este torrente de emociones lo purgue y le permita encontrar la paz.
Taehyung se dirige a la cocina, sus movimientos automáticos mientras preparan su desayuno. Abre el refrigerador y saca algunos ingredientes: huevos, pan y un poco de fruta. El silencio de la mañana es casi ensordecedor, roto solo por el sonido del sartén calentándose y el crujido del pan en la tostadora.
Mientras bate los huevos, su mente sigue atrapada en la maraña de pensamientos que lo asedian desde que se despertó. La pregunta que ha evitado durante tanto tiempo ahora se niega a desaparecer: ¿Qué hubiera pasado si le hubiera confesado a Jungkook sus verdaderos sentimientos?
Se sirve una taza de café y se sienta en la pequeña mesa de la cocina, la vista perdida en el vapor que se eleva lentamente. La escena se dibuja vívidamente en su mente una vez más: él y Jungkook, sentados en su café favorito, la luz del sol, bañándolos en un resplandor dorado. ¿Habría encontrado el valor para decirle? ¿Habría logrado abrir su corazón sin que el miedo lo paralizara?
