Dignidad y romance

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Maratón (3/3)

¿Las cosas cambiaron para mal con Namjoon? Por supuesto que no

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¿Las cosas cambiaron para mal con Namjoon? Por supuesto que no.

Pero ahora Jungkook tenía demasiado en qué pensar.

Por un lado, estaba renaciendo su vínculo con Jimin, algo que no podía ignorar. Por el otro, estaba recuperando su amistad con Namjoon y buscando la manera de sacarlo del agujero en el que tenía la cabeza metida.

No estaba haciendo planes con Namjoon solo por sentirse culpable, aunque sí lo sentía, lo hacía porque era su amigo y su deber era estar ahí para él, como lo estaba para Jimin. No quería verlo colapsar por tanto estrés, le importaba.

—Felicitaciones —dijo Seokjin en la cafetería—. Después de escuchar todo tu progreso con Jimin, puedo decir que pronto te graduarás como profesional en cuidados emocionales intensivos.

—Era difícil, pero ahora sé que solo tengo que dejar que las cosas fluyan para que hagamos click naturalmente.

Los ojos de Seokjin brillaban mientras veía la fotografía que Jungkook acababa de mostrarle, donde tenían la habitación completamente terminada. Habían colgado algunas fotos polaroid que Jimin guardaba, pósters de sus bandas favoritas, repisas para poner algunas figuras coleccionables o recuerdos. Empezaron con un llavero que encontraron en la calle mientras caminaban juntos.

—Esto se ve tan... hogareño —Seokjin suspiró—. Está bien, es demasiado empalagoso para mí, niño, no quieres que muera de diabetes y me lleve mis mejores consejos a la tumba.

Jungkook tomó su celular de vuelta.

Estaban desayunando en el lugar de siempre, waffles para Jungkook y una comida completa para Seokjin, que llevaba despierto desde las 5 de la mañana.

—Me alegra que todavía tengas apetito —comentó Jungkook, tras ver los platos casi vacíos de Seokjin en la mesa—. Namjoon dijo que has estado sufriendo con el servicio social.

—¿Sufriendo?

—Dijo que tenías más trabajo que antes —Jungkook se encogió de hombros—. Me alegra que estés enérgico, pero no intentes sobrepasarte.

Seokjin frunció el ceño y asintió con la cabeza sin decir nada más. ¿Tal vez molesto porque su resistencia era subestimada? Jungkook no se detuvo a pensar más y siguió comiendo lo suyo.

—¿Qué harás mañana? —preguntó Seokjin.

—Namjoon me acompañará a un concierto de piano, solo nos sentaremos a escuchar, tarea de club.

—Namjoon no me dijo que saldrían mañana.

Jungkook sonrió a la fuerza para intentar calmar la notoria confusión de Seokjin.

—Fue un plan espontáneo —contó—. Tal vez no te lo dijo porque ya se iba a dormir.

—Se quedó a dormir en mi casa —interrumpió Seokjin, recalcando las últimas dos palabras—. Pudo decirlo cuando estábamos en la cama.

Stardust Lover | kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora