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: ₊˚⋆☾⋆⁺ dime que será : ₊˚☾⋆⁺
Era un sábado por la tarde y Rodri había planeado pasar el día con Camila, esperando distraerse y ver si realmente había algo significativo entre ellos. Quedaron en encontrarse en un café de en el centro de Buenos Aires.
Rodri llegó primero y se sentó en una mesa, revisando su teléfono mientras esperaba. Al poco rato, Camila apareció, vestida con una sonrisa encantadora.
- ¡Hola, Rodri! -saludó Camila, dándole un beso en la mejilla antes de sentarse. - ¡Este lugar es increíble! Me encanta venir aquí. La última vez estuve con unas amigas y pedimos el postre más caro del menú. Es una locura lo bueno que es.
Rodri sonrió, aunque por dentro sentía una ligera incomodidad. - Sí, es un buen lugar. ¿Qué te gustaría pedir hoy?
Camila revisó el menú rápidamente. - Hmm, creo que voy a pedir el café más caro que tengan. Siempre he querido probarlo. Además, tengo que tomar una foto para mi Instagram, mis seguidores adoran estas cosas.**
Rodri asintió, aunque en su mente no podía evitar compararla con Sara. "Sara nunca se preocupaba por estas cosas. Siempre le importaba más la conversación que el lugar."
Pasaron la tarde charlando, pero Rodri no podía evitar notar que la conversación con Camila giraba en torno a temas superficiales: la última moda, los lugares más caros para salir y las personas influyentes en su círculo social.
- ¿Y qué tal va tu stream? -preguntó Camila, interesada. - Siempre he pensado que deberías monetizar más. Tienes mucho potencial para ganar más dinero con lo que haces.
- Va bien, gracias -respondió Rodri, tratando de cambiar de tema. - ¿Qué hay de ti? ¿Algún proyecto nuevo?
Camila sonrió, emocionada. - Sí, estoy pensando en lanzar una línea de ropa. Algo exclusivo y de alta gama. Creo que podría funcionar bien. Además, con las conexiones correctas, podríamos llegar lejos.
Rodri asintió, sintiendo que la conversación volvía a un terreno conocido para Camila.
Después del café, Camila sugirió ir a un restaurante exclusivo para cenar. Durante la cena, siguió hablando de sus planes de vacaciones en algún lugar exótico y caro, y de cómo su sueño era vivir una vida de lujos.
- ¿Y tú, Rodri? ¿Tienes algún plan para estas vacaciones? -preguntó Camila, apenas prestando atención mientras revisaba su teléfono.
- Todavía no he decidido. Me gusta la idea de un lugar tranquilo, tal vez con amigos cercanos -respondió Rodri, mintiendo ya que con Sara habían planeado salir de vacaciones juntos.
Camila apenas levantó la vista de su teléfono. - Ah, claro. Bueno, si necesitas ideas, podrías venir conmigo a las Maldivas. Aunque es caro, vale cada centavo.
En un momento de la cena, Camila dejó de mirar su teléfono y miró a Rodri. - Por cierto, Rodri, ¿qué ha sido de Sara? Hace tiempo que no la veo con vos.
Rodri sintió un pinchazo en el corazón al escuchar el nombre de Sara. - Hemos estado un poco distanciados últimamente. Cosas de la vida, supongo.
Camila asintió, sin darle mucha importancia. - Bueno, a veces las cosas cambian. Es normal.
Rodri decidió mencionar sus planes para el día siguiente, esperando que eso terminara la conversación sobre Sara. - Mañana tengo una juntada con mis amigos en la casa de Uni. Va a ser una reunión tranquila.
Camila levantó una ceja, interesada. - ¡Qué bien! ¿Y puedo ir? Me encantaría conocer a tus amigos.
Rodri se quedó en silencio por un momento, sintiéndose atrapado. No quería herir los sentimientos de Camila, pero tampoco estaba seguro de cómo manejar la situación. - Ehm, no sé, Camila. Es más bien una reunión de gente del stream y puede que no te sientas cómoda.
- No te preocupes, me adapto a cualquier situación. Además, siempre es bueno conocer a la gente cercana a uno, ¿no? -respondió Camila con una sonrisa.
Rodri no supo cómo decirle que no sin parecer grosero, así que asintió. - Está bien, si insistes. Nos vemos mañana entonces.
Al final de la noche, después de dejar a Camila en su casa, Rodri se quedó en el auto unos minutos, reflexionando sobre el día.
"¿Qué estoy haciendo? Esto no es lo que quiero. Camila es bonita y divertida, pero no es Sara. Nunca será Sara," pensó Rodri, sintiendo una mezcla de frustración y claridad.
