introducción

85 11 0
                                    


Antes de que leas esta historia quiero que sepas algunas cosas:
1. El nombre que aparece al principio de cada capítulo indica quién lo narra, ya que la historia es narrada por dos personajes (Ezra y Lina). Puede haber alguna excepción en la que otro personaje narre un capítulo, pero será solo eso, una excepción.
El nombre va a estar por encima de algunos asteriscos (**)
2. Hay pequeñas grandes referencias a mi autora favorita y también a mi cantante favorito.
3. Lo estoy terminando de escribir (me faltan 4 o quizás 5 capítulos para llegar al final)

Creo que son solo esas cosas. Espero que, si decides leer esta historia, la disfrutes.
                                                                                           

La ausencia de luz es lo que crea el color negro; la ausencia de tu presencia en mi vida hace que cada día sea un poco más oscuro.

Dijiste que volverías, dijiste que yo era todo para ti y que por mí serías capaz de matar.
Pero me dejaste morir a mí, y te demostré que sí sería capaz de quitarle la vida a alguien si eso significaba que podríamos estar juntos.

"¿Dónde estás? Prometiste que estarías conmigo en las buenas y en las malas.

Te lo pido, solo escríbeme, deja algo que me permita saber dónde estás. Prometo no correr tras de ti, prometo no ir a tu encuentro.
Solo quiero que sepas que aún estás en mi corazón, que aún te recuerdo con amor y no creo que eso cambie, no por ahora y espero que no cambie nunca. Con cariño, tu ángel."

Eso sería lo último que sabrías de mí o eso quise creer, pero esto es un bucle que parece no acabar nunca. Y si en este bucle infinito estás tú, tampoco quiero que acabe.

Siempre me negué a sentir algo por alguien; llegaste tú y sin pedir permiso me hiciste sentir todo lo que en algún momento me negué.
Te amo, Ezra...

Y podría esperar toda una vida para volver a ver tus ojos marrones, podría esperar para así sentir una vez más tu perfume.
Podría esperar si eso significase que tus ojos me volverían a mirar con amor.

Mi vida sin ti no es nada; tú eres mi tormenta.

Mi tormenta favorita.

Y como las tormentas, te fuiste de mi lado y dejaste mi vida en calma, una calma que no pedí. Solo espero que un día vuelvas a mí, no importa si vuelves con una mayor intensidad, solo vuelve, por favor.

En mi cabeza pasan mil veces los momentos que viví junto a ti: la vez que te conocí y cada beso que de ti recibí. Sé que te fuiste obligado, pero nunca seguiste las reglas de ninguno de los dos mundos. ¿Por qué justo ahora las sigues?

Mi bello demonio, mi asesino favorito. El dueño de mi ser y quien se lo llevó todo con él.
Ezra Brontë, el amor de mi vida.

En uno de esos tantos momentos en los cuales tus recuerdos acudían a mí como si de una película se tratase, y no quería sacarlos de mi cabeza, recordé lo que en algún momento me dijiste:

"No es lo mismo encontrar al amor de tu vida, que encontrar una vida con un amor".

Quizás todo esto lo viví o quizás solo fue un sueño, el cual al despertar intentas volver a dormir para seguir soñando lo mismo, sin saber que eso no pasa nunca.

Tormenta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora