Capítulo 7

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Lina
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Ha pasado una semana desde la última vez que hablé por mensajes con Ezra.

Es raro: soy yo quien le envía mensajes y él no responde. Anteriormente, solo pasaban un par de minutos hasta que él respondiera a mis mensajes.

Quizás su hermano lo convenció de no hablarme más, quizás ya lo aburrí.

-SEGURO ES ESO, LE PASO LO MISMO A TUS AMIGOS-

Comenzó a decirme la vocecita de mi cabeza.

Tiene razón, mis amigos dejaron de hablarme por sus carreras, pero también porque no me gustaba salir a fiestas, porque no tomaba alcohol y porque me rehusaba a drogarme.

[Hola, ¿cómo estás?], envié, esperando a que Ezra me respondiera.

"En línea", decía en el momento que envié el mensaje. Me quedé en el chat esperando, sería cuestión de tiempo para que él respondiera. Unos minutos después, se desconectó sin responder a aquel mensaje. Borré el mensaje y dejé el celular.

-Sí, ADELANTE, BORRA LA EVIDENCIA DE QUE LLEVAS PENSANDO EN ÉL DESDE HACE UNA SEMANA-

Mi celular sonó, lo tomé lo más rápido que pude esperando que fuera Ezra.

Y no, era Aria.

[Hola zanahoria, ¿cómo estás?], escribió.

Cuando no diciéndome así, sabe que me molesta y aún así lo sigue haciendo.

[Hola pesado, bien, ¿y tú?].

[Bien, te quería hacer una pregunta y espero un sí por respuesta], envió unos segundos más tarde.

[Dime, mientras no sea irme a vivir contigo].

[Es justamente eso...] No terminé de leer y bloqueé el celular; no tengo intenciones de irme a vivir con él. Aunque mi curiosidad era mayor: ¿qué quería decirme aparte de que me vaya a vivir con él? ¿Qué se le habrá ocurrido ahora para convencerme? Volví a desbloquear el celular y comencé a leer nuevamente el mensaje.

[Es justamente eso, tengo una propuesta para ti. Sé que tienes solo el seguro de vida de tu padre y que no quieres trabajar o estudiar. Pero nunca dijiste NO a tomarte unas vacaciones. Puedes venir a mi casa por uno o dos meses y ver qué haces, piénsalo].

No es mala idea irme y no ver a mi madre por unos meses.

No iría de arrimada; tengo dinero suficiente para aportar y ayudar con los gastos.

[No me parece una mala idea, la verdad, déjame pensarlo unos días], envié unos segundos después de pensar en su propuesta.

[Tienes exactamente cuatro días, hasta el viernes. Si decides venir, iré por ti].

Irme de mi casa, relajarme sin tener que ver a mi madre, sin aguantar sus gritos y sus constantes regaños.

Era más un sí que un no.

-¡DI QUE SÍ, ESTÚPIDA! ADEMÁS, ARIA ESTÁ BASTANTE LINDO-

¡Qué mierda! A mí no me gusta Aria, es mi amigo. Mejor cállate, voz de mierda.

Dejé el celular y decidí dormir un poco. Un poco, es un decir, dormí aproximadamente seis horas. Para cuando me desperté, ya era de noche.

[Ey, pesado] le envié a Aria más tarde esa noche.

[Dime, zanahoria]

[El viernes, ¿puedes venir a las 21:00 hs?] pregunté.

Eso era un sí, había decidido irme. Luego vería por cuánto tiempo, pero lo mejor para mí en este momento es irme y desconectarme un poco.

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