Pov Lisa.
La música retumbaba en el bosque, las luces brillaban entre las ramas y todos bailaban y reían sin preocuparse del mundo a su alrededor.
Yo estaba ahí, como siempre, más era solo por matar el tiempo que por disfrutar de la fiesta.
Me apoyé contra mi camioneta, observando de lejos, cuando de repente...
"¡Lisa!" la voz familiar interrumpió mis pensamientos y me giré para encontrarme con Somi sonriendo a unos pocos pasos de distancia.
Sonreía de oreja a oreja, su entusiasmo casi contagioso.
"Somi" respondí simplemente, tratando de no parecer demasiado indiferente.
Ella siempre tenía esa energía que yo nunca supe cómo manejar del todo.
"¡Qué bueno encontrarte aquí! Pensé que ibas a quedarte en casa, como de costumbre, ya últimamente lo has estado haciendo"
"Ya sabes cómo es... o más bien como soy" me encogí de hombros.
Luego nos perdimos junto a mi camioneta un poco para alejarnos del resto, ya sabrán a qué fuimos.
Antes de poder decir algo más o continuar en lo nuestro, mi teléfono comenzó a vibrar en el bolsillo. Lo saqué y mis ojos se abrieron de par en par al ver el nombre en la pantalla.
¿Cómo era posible?
Después de ese día en que no quiso arreglar las cosas entre nosotras, pensé que esto jamás sucedería.
Aunque lo anhelé todo el maldito tiempo.
"¿Quién es?" preguntó Somi, inclinándose hacia mí, claramente curiosa.
"No puede ser..., es..." las palabras se atascaron en mi garganta.
Mi corazón comenzó a latir aceleradamente.
¿Era una ilusión? ¿Una trampa de mi mente?
"¿Quién? ¡Vamos, dime!" Somi reía, pero al ver mi expresión, su rostro se tornó más serio.
Ella se acercó para ver la pantalla de mi teléfono, quizá logró ver el nombre de quien llamaba, Pero a mí no me importaba si fué así.
Yo solo me aparté un poco para poder contestar.
Debo decir que cuando su nombre apareció en mi teléfono, pensé que tal vez algo podría resultar, en que podríamos arreglar las cosas y que también encontraríamos nuestro camino de regreso a como éramos antes.
Pero soy una jodida idiota por pensarlo.
Ahora todo se trataba de él.
Él chico citadino, Taehyung.
Siempre fue el jodido de Taehyung.
Ya no era la primera en su vida, y ella no podría deletrearlo de forma más clara si lo intentaba decir para que me llegará el mensaje de una vez.
Era evidente que jennie estaba dejando de amarme en todo los sentidos, al menos era lo que mi razonamiento me estaba gritando.
Mi pecho estaba orprimido de solo estarlo pensando.
"¿Estás bien, Grandota?" preguntó Somi, logrando alejarme de mis pensamientos y caminando hacia mí.
Sonreí débilmente y la acerqué más hacia mí cuerpo, "Lo estoy ahora" dije llena de vacío.
Al menos quería convencerme a mi misma de eso.
Después de que Lauren me confrontó esa tarde en el restaurante, decidí cambiar mi forma de actuar, era todo lo que ella había dicho, y sentí vergüenza y asco de mi misma, y juro que no pude manejar mi propia vergüenza.
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My Favorite Girl
FanfictionEn un pequeño pueblo, bajo la vasta inmensidad de un cielo eternamente estrellado cerca de una bella playa nacen dos almas destinadas a entrelazarse. Desde sus primeros alientos, la vida parece tejerlas en un solo ser, compartiendo juegos, sueños y...