Eres todo lo que quiero

Capítulo 9 - Una sorpresa

Colín y Penélope se besan de nuevo, siendo este un beso lento. Los ojos de Colín son los últimos en abrirse. Acomoda la ropa de Penélope y esta quiere saber que hace, a lo cual él tan solo abre la puerta del carruaje y sale.

—¿Colín? —pregunta creyendo que la dejaría ahí, temiendo que a la mañana siguiente él lo negará todo. En vez de eso, él le ofrece su mano.

—¿Vienes conmigo?

—¿Qué? Colín tú familia está dentro y nos pueden ver —menciona nerviosa, creyendo que solo sería suyo por una sola noche.

—Por el amor de Dios, Penélope Featherington, ¿Te vas a casar conmigo o no? —El pecho de ella sube y baja agitadamente.

—Yo... claro que sí —dice ella sin creérselo todavía.

Penélope acerca su mano a la de él, de la misma agitación, acaba resbalando al pisar la seda del vestido y cae de bruces contra el pecho de él. Colín se asegura de que ella se encuentra bien, ambos vuelven a reír. Él se ampara creyendo que pueda escapar, así decide entrar dentro de la casa Bridgerton cogiéndola de la mano. Se introducen en el interior. Penélope mira con temor a Colín, sin saber que se va a encontrar al otro lado de la sala, si la van aceptar o, por el contrario, la repugnarán; como de seguro hará Eloise cuando se entere.

Ambos entran, viendo como su madre está hablando con Franchesca junto con Hayacint y Gregory. Colín suelta por un instante la mano de Penélope haciendo que ella se vuelva mucho más insegura en ese momento. El corazón de ella palpita a un ritmo muy apresurado. Ve como Colín se acerca a su familia, ella siente miedo, horror e incluso. Se dice que se tiene que mantener en calma, cosa que claramente su cuerpo no obedece.

—¡Estamos prometidos! —grita Colín.

La familia Bridgerton se gira al escuchar la voz de Colín, procesando las palabras que acaban de salir por su boca. Un instante después todas ellas miran en la dirección en donde se encuentra Penélope, incluido Gregory. Sueltan un grito de alegría al tiempo que Hayacint va corriendo abrazar a Penélope. Franchesca al igual que su madre, Violet abrazan a Colín. Eloise se queda en el mismo sitio, mirando la escena perpleja, las cosas le van cuadrando en su mente; cómo iba su hermano Colín a encontrarse con Penélope en el jardín o, por el motivo del cual él se envolvió ayudar a Penélope en su busca de marido; ¿Sería eso? ¿Así era como Colín la iba ayudar, convirtiéndose él en ese marido?

—Cuidado Hyacinth, que vas a asfixiar a Penélope —se queja Colín.

—Es que conozco a Penélope de tantos años y ahora va a ser mi nueva hermana —comenta Hyacinth eufórica.

Al tiempo Violet se queda atrás esperando su turno para abrazar a su futura nuera, que, por su larga sonrisa, es algo que le hace realmente feliz.

—Estoy encantada por los dos —expresa Violet, acercándose a Penélope.

—Muchas gracias, Lady Bridgerton —dice ella dichosa al devolverle el abrazo.

Entonces Penélope voltea a mirar en dirección en donde sigue Eloise estupefacta. Ella tan solo pide disculpas y se marcha de la sala, aunque Colín quiere ir tras ella, es Penélope la que al final va. La sigue hasta estar lo suficientemente lejos para que la familia no escuche la conversación.

—Espera Eloise...

—Me parece vergonzoso que uses a mí hermano para salir de tu casa —lanza su primera apuñalada.

—Yo... no es eso, jamás arrastraría a Colín a un matrimonio engañoso —menciona Penélope, disgustada al pensar que la que fue su mejor amiga pudiera pensar eso de ella.