Una nueva oportunidad en el amor

Un Nuevo Comienzo.

Después de la lucha contra los exorcista, todos se pusieron manos a la obra para poder remodelar el hotel, haciendo de este más elegante y grande con la esperanza de que llegaran demonios a redimirse, todos estaban felices por el nuevo comienzo de sus vidas.

Lucifer decidió quedarse a vivir en el hotel con su hija para poder ayudarla en lo que pudiera, se dió cuenta de como ella luchaba por sus sueños y decidió apoyarla en todo lo que pudiera.

Después de unos meses empezó a llegar gente al hotel interesados en la redención, Charlie los recibía muy feliz, estaba tan contenta de que su proyecto fuera avanzando.

Conforme fue pasando el tiempo todos los huéspedes del hotel pasaban tiempo juntos, Alastor y Lucifer se estaban empezando a llevar bien a pesar de tener demasiadas diferencias.

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Alastor.

Majestad, ¿no le gustaría tomar algo?, se ve usted algo cansado.

Lucifer.

Muchas gracias por la oferta Alastor, pero prefiero ir a descansar un poco. *Procede a levantarse y retirarse del lugar*

Alastor notó que algo no iba muy bien con el Rey, le parecía verlo más triste que otros días así que decidió acercarse un poco a él para ver si podía ayudarlo.

A pesar de que no eran amigos había algo en Lucifer qué llamaba la atención de Alastor, el pecador se sentía algo atraído por el Rey del infierno y quiso saber que sería eso que le llamaba la atención.

~Al día siguiente~

Alastor se despertó temprano para preparar el desayuno de todos, cuando ya todos estaban abajo desayunando se dio cuenta que faltaba el Rey, así que decidió llevarle el desayuno a su habitación.

*Toca la puerta*

Lucifer.

¿Quién?

Alastor.

Buenos días su majestad, ¿Puedo pasar?.

Lucifer.

Buenos días Alastor, ¿Se te ofrece algo?

Alastor.

Quería entregarle el desayuno, ya qué me he dado cuenta que no bajo para acompañarnos a todos en él.

Lucifer.

Gracias por el detalle Alastor, puedes pasar.

*Abre la puerta y entra en la habitación*

Alastor.

Aquí está su desayuno señor, que lo disfrute.

Lucifer.

Muchas gracias Alastor, ¿Se te ofrece algo más?

Alastor.

La es que si, últimamente lo he visto más apagado señor, como más triste y aunque usted no lo crea me gustaría saber que le pasa, tal vez podría ayudarlo, claro si usted me lo permite.

Lucifer.

No me pasa nada Alastor, son unos pequeños bajones de ánimo, pero ya se me pasarán, de igual forma gracias por el gesto.

Alastor no muy convencido por la respuesta del Rey decidió no insistir y darle su espacio así que tuvo que retirarse.