Una nueva oportunidad en el amor

Primera Vez.

Ya habían pasado un mes desde que Alastor le declaró su amor al Rey del infierno.

Alastor.

Feliz primer mes, mi señor tengo el agrado de decirle que ha sido uno de los mejores meses de mi vida.

Lucifer.

Feliz primer mes mi amor, estoy feliz de poder estar contigo y saber que todo esta bien.

Ambos se encontraban muy feliz, se dieron un beso suave y corto y bajaron juntos para poder desayunar con los demás.

Alastor.

Cariño, ¿Quieres hacer algo especial hoy?

A Lucifer le apetecía salir a dar un pequeño paseo por el estanque al qué ya tenía tiempo de no ir.

Lucifer.

Claro amor, es una buena idea. Podríamos ir a un estanque y estar un rato ahí, si te parece.

Alastor.

Si tu vas a estar bien y lo vas a disfrutar por mi no hay ningún problema tesoro. Alistare un par de cosas para llevarlas, te espero en 30 minutos. ¿Te parece?

A Lucifer le agradaba la idea, terminaron de comer y Lucifer subió a cambiarse mientras Alastor empacaba algunas cosas para que tuvieran un pequeño picnic con cosas que le gustaran a Lucifer, últimamente estaba recayendo un poco y Alastor quería levantarle más los ánimos.

Pasaron los 30 minutos y Alastor y Lucifer ya estaban listos para su cita, salieron del hotel camino al estanque donde pasaron una tarde muy agradable, Alastor le dio la sorpresa de los bocadillos qué había llevado para Lucifer y este la agradeció llenandolo de besos en el rostro consiguiendo qué el demonio de sonrojara un poco.

Alastor.

Querido, estaba pensando que después de aquí podríamos ir a bailar, ¿Te gustaría ir?

A Lucifer le gusto la propuesta, pues ya tenía mucho que no salía a bailar y era algo que le emocionaba.

Terminaron su picnic y salieron camino al hotel nuevamente para poder cambiarse y dejar las cosas que habían llevado al estanque, una vez estaban listos volvieron a salir.

Fueron a un tipo de antro cuando entraron el ambiente era agradable, comenzaron tomando unas cuantas copas y luego salieron a bailar, empezó a sonar una música suave y romántica.

Alastor.

Mi rey, ¿le encantaría darle el placer de bailar con usted a este demonio?

Lucifer se sentía tan feliz que abrazo a Alastor y respondió a su pregunta.

Lucifer.

Nada me haría más feliz que complacerlo.

Y así salieron a bailar la canción, Alastor posó una de sus manos en la cadera del rey y con la otra su mano, el rey puso su mano en uno de los hombros de Alastor y con la otra estaba agarrado de su mano, era un momento demasiado mágico para los dos. Terminado la canción se dieron un beso para luego ir a sentarse y pedir algo más para tomar.

Siguieron tomando hasta que se sentían un poco mareados, sonó una canción que le gustaba mucho a Alastor y nuevamente invito al Rey a bailar.

Alastor.

Majestad, ¿sería tan amable de concederme esta pieza?

El rey con un leve sonrojo acepto la invitación de Alastor, salieron a bailar y solamente disfrutaban del momento.