CAPÍTULO 2: No digas nada

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La suerte que tenía, es que estaba a tan solo tres paradas de autobús para llegar y eso me facilitaba mucho el no llegar tarde.Cuando ya me encontraba enfrente de la puerta quedaban solo 5 minutos para las cuatro,no sabía bien cómo llamar y presentarme,pero preferí hacerlo sin pensar y actuar con tranquilidad.
-Elena cariño,¿que tal todo? tu madre me ha hablado muy bien de ti,me ha dicho que tenías muchas ganas de empezar.-Una señora de pelo castaño y con una voz suave y cálida me recibió,era demasiado maja pero eso no quitaba mi nerviosismo.
-Hola señora...-Me quede en shock cuando me di cuenta del gran detalle que no sabía,su nombre.
-Lidia,no te preocupes,del nerviosismo te habrás olvidado de mi nombre y es normal,entra y así te presento a mi pequeña Carla.Afirme con la cabeza esperando no cometer más errores,cuando vi a la niña no dude en saludarla con una sonrisa y un abrazo,era tan dulce.Pasados cinco minutos la señora Lidia ya tenía que irse para trabajar y fue cuando me despedí de ella y sentí un gran alivio.
Carla, era demasiado tranquila y buena,le había encantado el peluche que le di, tanto que enseguida le puso un nombre y no lo soltó en ningún momento,le di de comer,vimos la tele e hicimos muchos juegos juntas,me sentía como una hermana mayor ,y hablando de eso,habían pasado tres horas y yo seguía sin conocer a su hermano.La tarde había ido genial,lo que me preocupaba es que era un jueves y en dos días tendría que pasar 48horas con la responsabilidad de cuidar a una pequeña.
Al final como se acercaba la hora de dormir de Carla,le ayude a que se diese una ducha, nos divertimos mucho haciendo burbujas de jabón.Lo malo fue que acabe con la camiseta súper mojada y no quería dar esa impresión cuando la señora Lidia regresase del trabajo.Justo cuando deje a la peque en la bañera y salí en busca de intentar secarme un poco la camiseta suena mi móvil, por suerte era Elena y me había llamado para preguntar cómo me fue todo,después de dos minutos de llamada ya tenia que colgarla para ir a por Carla,pero nada más girarme para subir al baño me choqué con algo,o mejor dicho alguien.
-Ay! Lo siento yo..—justo cuando iba a terminar por disculparme,quede completamente en shock,no podía creerlo,no podía creer quien estaba delante de mis ojos.
-Vaya,no sabía que la canguro de mi hermana iba a ser de mi edad,soy Izan y siento si te he llegado a asustar al entrar.
Justo cuando iba a responderle el ya se había ido en dirección a su habitación,pero yo seguía en el mismo sitio,sin moverme ni hablar.
No sabía si Elena sabía todo esto o simplemente era una mala coincidencia ser la canguro de la hermana del mejor amigo de tu crush,algo si tenia en claro y es que el moreno de ojos claros no podía conocerme de nada,y eso me tranquilizaba,ya que él no iba a mi clase y yo no es que fuese una chica conocida ahí.Ya había terminado de ayudar a Carla a vestirse y a cenar,por lo que supe que había echo un gran trabajo.Cuando llego la señora Lidia,por su forma de despedirse noté que estaba contenta conmigo y que Carla ya me había cogido cariño.Pero camino a casa,no podía dejar de hacerme preguntas sobre lo que había pasado,no sabría ni siquiera describir el sentimiento que presencio en este momento.
Al llegar a casa pude notar lo sola que estaba de nuevo,por lo que ni siquiera quise cenar,solo darme una ducha y descansar.Decidí no comentarle nada a Elena ,porque si en realidad ella no lo sabía y se enterase por mi,me haría renunciar a mi trabajo por miedo a que lo pase mal,pero creo que será una oportunidad para mi para así olvidarlo y darme cuenta de que no era para tanto.Pero mi cabeza no dejaba de darle vueltas toda la noche,estaba nerviosa y más aún cuando me llegó una notificación de Elena diciéndome que la señora Lidia no va a volver mañana a casa,por lo que serán 2 noches durmiendo ahí.Al final apague el móvil y solo me puse música para poder centrarme en dormir y descansar.
Por la mañana tenía aún demasiado sueño,si pudiese me pasaría casi todo el día durmiendo.Me fui a dar una vuelta y así aproveche para calmarme un poco los nervios.Cuando llegue,la señora Lidia me explico que eran por asuntos del trabajo y que se disculpaba por ese inconveniente,me despedí de ella con una sonrisa cálida y entré en la casa para cuidar a la peque,pero esta vez él estaba en casa,y eso me ponía muy nerviosa.
Llame a Carla para jugar a la habitación cuando justo me mando un mensaje la señora Lidia diciéndome que se le olvidó decirme que Carla hoy iba a un cumpleaños y que estaba en la casa del vecino de al lado y que pasaría la noche ahí,me sentí molesta porque no podía ahora volver a casa,tendría que estar muy temprano aquí y acabaría como un zombie sin dormir.La llevé al cumpleaños y la dejé bajo la responsabilidad de la vecina.Pero cuando entre en la casa,escuche a Izan hablar por teléfono y no pude evitar escuchar,no es que fuese de esas personas que escuchan conversaciones ajenas,pero este caso era especial. No pude llegar a enterarme bien de la conversación y solo pude escuchar las palabras clave "fiesta hoy en su casa" una fiesta que estoy segura que no estaba autorizada por su madre y que iba a acabar mal.Y otra vez sin darme cuenta me quede en el mismo sitio sin moverme mientras el me miraba sabiendo que escuche todo.
-¿No te han enseñado que escuchar conversaciones ajenas es de mala educación?-dijo de forma seria y a la vez vacilona sabiendo que esto me causará vergüenza.
-Si,pero creo que a ti tampoco te enseñaron a hacer cosas sin permiso-respondí sin pensar en un segundo en lo que acababa de soltar por mi boca.Sabía que ya estaba roja por el ardor que sentía en mis mejillas.
-Vaya,eres guapa,rubia de ojos azules,con pecas y una altura perfecta de uno sesenta,eres tan guapa que tendrías que quedarte en silencio y no decir nada por tu bien,¿entiendes?
-Así que esta es tu forma de pedirme que no diga nada,esta bien,estaré en el cuarto sin salir en toda la noche,pero no me haré responsable de tus actos,porque soy la niñera de tu hermana y no de ti.
Me fui queriendo cortar ya la conversación,sabía que si seguía hablando con él me iba a poner más nerviosa,total solo iba a ser una fiesta de una noche,que podría salir mal.

No me imagino una vida sin ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora