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Después de la tormenta viene la calma, ¿no?

Pues en éste caso era al revés.

Después de esa increíble calma que habíamos tenido, venía nuestra tormenta.

Sanemi estaba parado frente a mi. con su uniforme y una pequeña mochila, junto a él estaba igual Masachika con el uniforme puesto y una pequeña mochila.

- Por favor, tengan cuidado ¿si? - Mi mano estaba en el rostro de Sanemi. - Cuídense mutuamente - Miré a Masachika quien sonrió

- Por supuesto T/n-chan, no dejaré que éste imbécil muera - Río y revolvió el cabello del Shinazugawa quien se quejó

- Si te mueres, te mató - Bromeé y ambos nos reímos

Mis dos manos tomaron las mejillas de Sanemi y uní mis labios en un corto beso.

- Por favor, vuelvan a casa, los estaré esperando, tendremos una gran cena - Sonreí

- Solo vamos a investigar Tenchi, no a la gerra.

- Van a investigar posibles movimientos de Muzan, con ese demonio nunca se sabe. Solo quiero que tengan cuidado por favor.

Ambos chicos salieron de la mansión y una gran preocupación reinó en mi.

Los días pasaban y no tenía señales de Masachika y Sanemi.

Caminaba de un lado a otro en la habitación mientras Kiiromaru me miraba preocupado.

Me dejé caer en el suelo y el cachorro corrió a mi, comenzó a lamer mi cara. Él sabia que algo me pasaba.

- ¿Crees que estén bien? Deberían haber vuelto hace dos dias - Dije casi al borde de llorar.

- Señorita Kama- Takahashi, su baño está listo. - avisó una mucama desde la entrada de mi habitación.

Me levanté y me metí a la bañera. Me sumergí en el aguan completamente.

¿Y si estaban muertos?

No, mis chicos son fuertes

¿Y si ese cabron los tenía torturandolos?

No, ese tipo no es nada contra mis muchachos

¿verdad? ¿cierto?

Salí rápido del agua ya que estaba apunto de quedarme sin oxígeno. Después de darme un baño, me puse una bata, la cuál no abroché y me acosté en la cama.

Kiiromaru se subió inmediatamente y se acostó a mi lado, lo abracé acariciando su cabeza.

Afuera estaba lloviendo muy fuerte, caían truenos y relámpagos.

Por mis ojos caían lagrimas imaginado lo peor.

En mi mente solo había un escenario de Sanemi ensangrentado tirado en el suelo rodead de un charcho de su propia sangre y Masachika sin cabeza.

Parpadee intentando borrar esa imagen tan aterradora y entonces la puerta de mi habitación se abrió de golpe.

Me levanté rápido al igual que Kiiromaru el cuál se puso alerta.

Pero se relajó al ver quien era.

Parado en el marco de la puerta, cómo si de una peli de terror se tratara se encontraba Sanemi todo empapado de agua y con algunos rastros de Sangre, los relámpagos que caían iluminaban la habitación dejando ver su expresión.

Una mezcla de terror, dolor y enojo se reflejaba en su rostro.

Me levanté en shock sin saber que hacer, corrí a Sanemi sin importarme estar completamente desnuda ya que mi bata había caído.

Pero entonces, el habló.

Y como si me acabaran de hechar un balde de agua fría me quedé paralizada

sus palabras dolieron cuál puñalada.

- Él... Él murió, Masachika ¡Murió! ¡Murió en mis brazos T/n! ¡Murió protegiendome!

¿Q-que?

Sin saber que decir me avalancé sobre él y lo abracé hundiendo mi cara en su pecho.

Mis lágrimas salían, a mi me dolía.

Desde que había llegado a este lugar, el único que consideraba mi amigo era él. Siempre me hacía reir con su sonrisa o contagiando su buen humor.

Nos dedicabamos a hacerle bromas a Sanemi solo para verlo enojar.

Platicaba conmigo cada vez que me sentía sola y me entraba el bajón.

Siempre iba conmigo a los lugares y me intentaba proteger de todo. Hasta de un señor que solo me preguntaba la hora.

A mi me dolía, me dolía mucho, pero...

¿Sanemi?

Ese era la unica persona que consideraba su amigo, o más que eso, su hermano.

Kumeno había sido su mentor, su guarda espalda, su aliado, su amigo, su hermano, la unica familia que decía tener.

Sanemi estaba destrozado y yo lo sabía, sólo podía abrazarlo y sentir como sus lágrimas caían.

El gritaba, gritaba con furia, sacaba todo el dolor que tenía dentro.

Rompía cosas y golpeaba las paredes. Otra vez corrió a mi y me abrazó, me abrazó con fuerza.

《《¤~¤》》

- Por favor Tenchi, tu no te vayas de mi lado.

Una vez calmado, Sanemi acostado en mi pecho me abrazaba.

- No me iré de tu lado, te lo prometo - Le sonreí

Sanemi comenzó a acariciar mis pechos desnudos

- mmm~ Sanemi.

- shhh dejame, esto me hace sentirme mejor. - Decía mientras metía su cara entre mis tetas

- Sanemi, quiero pedirte algo. - él se restregó más contra ellas

- Después, déjame disfrutar ahora

Me dolía tanto el corazón en pensar en cómo se pudo morir, ese maldito ¿Cómo se atrevía a morirse?

A pesar de que Sanemi me dijo que mató a puñetazos al cabron que hizo eso, yo quería vengarme, quería matar al maldito demonio infeliz de Muzan.

Lo odiaba tanto, no era la primera vez que hacía que una persona que me importara sufriera así. Cuándo mato a toda la familia de Tanjiro, juré que lo mataría con mis propias manos.

¿Y ahora se atrevía a quitarle la vida a quién podría considerarse mi mejor amigo?

quiero terminar con ésto, no voy a dejar que ese mal nacido siguiera arrebatandome a las personas que me importaban.

Pero no era nada, antes pertenecía a los Kamado, ¿pero ahora?.

Quiero volverme una Yakuza y acabar con él.

Voy a vengar la muerte de Masachika.

Voy a vengar lo que le hizo a Genya

Voy a vengar lo que le hizo a Nezuko

Voy a vengar la muerte de cada uno de los familiares de Tanjiro.

Ese hijo de puta se va a arrepentir de haberse metido con mi gente, porque lo voy a hacer sufrir, y mucho.

- ¿Tenchi?

Sanemi me limpió la lágrima que sin darme cuenta corría por mi mejilla.

- Sanemi... quiero ocupar el puesto de Machika.

Es solo... venganza //Sanemi Shinazugawa x lectora\\Donde viven las historias. Descúbrelo ahora