Es solo... venganza //Sanemi Shinazugawa x lectora\\

17

Llegué a la casa y dejé las bolsas con los ingredientes en la encimera mientras me puse manos a la obra.

De vez en cuando le lanzaba un pedazo de carne a Kiiromaru quien lo atrapaba en el aire.

Las palabras de Genya daban vueltas en mi cabeza.

¿Acaso la clave para vencer a Muzan era haciendo alianza con los Kamado?

tomé la bandeja con la sopa y subí a la habitación de Sanemi toque la puerta y al no escuchar un adelanté, me preocupé y entré.

Puse la bandeja en una mesa y corrí a Sanemi.

Estaba tirado en el suelo y sujetaba su cabeza con sus manos. Todo al rededor estaba hecho un desastre, adornos rotos en una esquina, las almohada abiertas con todo el relleno fuera y algunas sillas tiradas en una esquina como si las hubieran pateado.

- Kiiro espera ahí

Le ordené al can quien se sentó el la puerta. El suelo estaba lleno de vidrios rotos y no quería que alguna de sus patas de dañara por accidente.

- ¿Sanemi que sucede? - Lo tome por el rostro y lo intenté levantar pero el seguía tirado en el suelo, no queria verme

- Aahh - Solto un gritó y me abrazó con fuerza.

Entré sus piernas estaba una foto de el y Masachika un poco más jovenes.

- T/n fue mi culpa, el murió por mi culpa, no pude protegerlo - Gritaba entre sollozos mientras me apretaba a el.

Odiaba verlo en ese estado, me partia el corazón.

- Dime Sanemi - Me puse de pie y el me siguió con la mirada llena de lágrimas - ¿Crees que a Masachika le hubieran gustado que estuvieras asi? Tirado en un rincón culpándote por todo.

Sanemi nego con la cabeza y se secó las lágrimas con furia.

- Si él estuviera aquí te diría, entrena, haste más fuerte, no lloriquees como una niña.

Sanemi se puso de pie y caminó hasta mi

- Así que cumple la voluntad de tu amigo y deja de llorar como una nena - Le di ul golpé suave en el pecho y el me besó, me besó con furia

Sujetaba mi nuca y pegaba mi cintura a él. me besaba como si quisiera descargar toda su furia de esa forma. Me tomó en brazos y me llevó a la cama, me tiró en esta y levanto mi falda.

Sin perder mucho el tiempo comenzó a penetrarme de forma violenta.

- Ahh~ Sanemi despacio

- Esto es por hablarme así - sus embestidas aumentaron su rapidez y fuerza

- Ahh~ Maldito Shinazugawa - Gemia y el sonreía de lado

- Y ésto porque tienes razón.

Y con esas palabras llegamos al orgamo. Gemí con fuerza y encajé mis uñas a su espalda.

Se levantó de arriba de mi y se acomodó la ropa.

- Ahora preparate, que en 10 minutos tienes la reunión.

- Pensé que ibas a ir, ya que estabas... bien

- Tengo que limpiar todo este desastre, confío en ti. - Besó mis labios.

《《¤~¤》》

10 minutos después me encontraba en la sede.

Había un ambiente raro, y faltaba alguien, pero no lograba recordar quién.

El patrón llego y después de una breve presentación fuimos a la sala de reuniones.

- ¿Tu quién eres? - Él que pude reconocer como Uzui me miro extrañado y todos dirigieron su mirada a mi.

Aunque Sanemi ya le había informado a Oyakata-sama sobre mi presencia en la reunión, quería yo presentarme y así ganarme su confianza.

- Un placer, vengo a reprecentar a Shinazugawa, mi nombre es T/n Taka-

- Kamado T/n - Me interrumpió una pelinegra con adorno de mariposa en su pelo, Kochō

Todos se sorprendieron

- No puedes estar aquí

- ¿Por qué Sanemi te mandó?

Decían algunos entre otras cosas que no pude escuchar.

- No, me llamó Takahashi T/n - Interrumpí a todos

- ¿Y por qué Sanemi no vino? Se que eres la esposa de Tanjiro, ¿acaso él te mandó por Sanemi para asesinarlo? ya que ambos tenían una rivalidad - Volvió a decir la pelinegra.

Apreté los puños.

- Es por lo de la muerte de Kumeno - Dijó un pelinegro con una serpiente en el cuello

- Inútil, no debería permitir que los sentimientos y el trabajo se involucren - Dijo el más grande de todos

- Y mucho menos si es un simple asistente - Volvió a decir Shinobu

Mi paciencia se agotó y me puse de pie.

- ¿Un simple asistente? - Entrcerré los ojos. - Ninguno de ustedes saben que era Kumeno para Shinazugawa, eran más que un simple asistente, era su hermano. - apreté los puños. - Dime Shinobu ¿no duele ver a tu hermano morir en tus manos y darte cuenta que no pudiste protegerlo?

A pesar de que la pelinegra tenia una sonrisa, pude ver una pequeña vena en su frente. Aunque también pude ver como el más pequeño de todos se tensaba.

- Bien, suficiente. Es hora de empezar la reunión.

La señora junto a Oyakata-sama interrumpió.

- Aún no podemos empezar, Rengoku no llega - dijo Mitsuri con una voz respetuosa

Ya veo, asi que ese era el que faltaba.

- De eso hablaremos en esta reunión. Rengoku a muerto.

Todos se quedaron en Shock, incluso yo que no conocía a ese hombre. Pero si alguien como el había muerto, solo habia una explicación.

- Los Oni... - susurré.

Alguno de los presentes tenian diminutas lagrimas en los ojos mientras otros miraban abajao con tristeza.

- Exactamente. Muzan y sus hombres se apoderaron del Ryogoku.

Todos se tensaron.

- Debemos hacer algo, no podemos quedarnos de brazos cruzados mientras esperamos que Muzan y sus hombres vengan a la puerta de nuestras casas, maten a nuestros hombres y lo mas seguro que a nosotros. - Dije y algunos asintieron.

- Eso ocurrió porque Rengoku era débil, estoy seguro de que si vienen a mi puerta voy a saber como atacar - Dijo Iguro.

- No creo que sea algo tan sencillo si te atacan por sorpresa - Dijo Tokito.

- Tengo entendido que Tanjiro y dos de sus hombres estuvieron presente en el ataque, y siguen con vida - Habló por primera vez Tomioka. - Creo que es más que obvio lo que tenemos que hacer, ¿no?

- Creo que Tomioka tiene razón, ahora mismo necesitamos tener mas aliados que enemigos - Dijo Mitsuri y poco a poco todos fueron aceptando.

- No tomaré una decisión si Sanemi no está presente.

Dije y Oyakata-sama asintió.

- Bien, tomaremos la decisión en la próxima reunión. Tomioka, ponte en contacto con Tanjiro a ver si aún quiere mantener el trato - Habló Oyakata-sama

Después de finalizar la reunión fuí directo a Sanemi y le conté todo lo sucedido.

- ¿Que crees que deberianos hacer Tenchi? - me miró

- Creo que es buena idea unirnos a los Kamado, se que tienes una rivalidad, pero es mejor mantener los sentimientos fuera. Ahora mientras más aliados tengamos, mas capaces de vencerlo seremos.

- Bien, uniremos fuerza con los Kamado entonces.