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¿dónde estoy? .... ¿por que hay tanto silencio? acaso... ¿estaba muerta?

De repente todos los recuerdos de esa noche volvieron a mi.

Abrí lentamente los ojos acostumbrandome a la luz.

- ¿Dónde estoy? - Susurré mientras miraba todo a mi alrededor.

Estaba en una sala de hospital, junto a mi habían varias flores y algunos globos.

- ¿Hola? - Mi voz hizo eco.

Me vi por el reflejo del crital de la ventana. Una venda crubria mi frente, tenía un gran lleso en mi mano y la otra estaba vendada cerca del hombro, dónde me habían disparado. Mi cabello mal cortado quedaba en cima de mis hombros, tenía algunos mechones mas largos que otros.

Entonces Genya entró a mi habitación. En sus brazos tenía a un ya crecido Ichigo.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, en cuanto el pelinegro me vió corrió hacia mi.

- Oh dios mio T/n ¡doctor! - Comenzó a gritar y varias enfermeras entraron.

Después de varias revisiones por fin me dejaron sola con Genya y mi hermoso bebé, al cuál apreté en mis brazos.

- amá - Balbuceó en un intento de nombrarme.

- Mi hermoso campeón, no sabes cuanto te extrañé - Le abracé, aunque hubiera estado inconsciente todo este tiempo, sentía que lo había extrañado mucho.

- 6 meses T/n, estuviste en coma 6 meses. - Dijo Genya y yo tragué en seco.

¿Que había pasado en estos 6 meses?

- ¿Dada? - Mis ojos se llenaron de lágrimas ante las mencionadas palabras del pequeño frente a mi.

Entonces recorde todo, sus brazos envolviendome en un abrazo mientras yo lloraba, Muzan disparandole, la casa... o dios ¿donde iba a vivir ahora?.

Cómo si me leyera la mente Genya hablo.

- Sanemi dejó una casa a nombre de Ichigo en Shinjuku, en su testamento... También-

lo interrumpí.

- Sácame de aquí Genya, quiero irme ya a mi casa, no quiero estar en este lugar.

Genya asintió y después de unas horas de mover algunas fichas y hacerme unas últimas revisiones, finalmente llegue a mi casa con mi pequeño.

El Shinazugawa menor me dijo que algunos empleados trabajarían para mi. Yo solo asentí y me encerré en mi habitación.

Así pasé las siguientes 3 semanas, entre llantos y lamentos.

lo extrañaba, lo extrañaba mucho.

Hasta que una tarde Ichigo entró gateando a mi habitación.

- amá - Balbuceo, lo miré y me tendió un juguete.

Lo vi, su rostro era igualito al de Sanemi, entonces lo comprendí. No podía quedarme aquí de brazos cruzados lamentando todo lo que pasó. Tenía que salir adelante. Por mi, y por Ichigo.

Me puse de pie y cargue a Ichigo con una mano, ya me habían quitado el yeso pero aún no podía hacer peso con ese brazo.

Caminé hasta el salón en dónde Genya descansaba.

- Situación - Sólo dije esa palabra pero él me miró con una sonrisa orgullosa.

Genya me contó que después de que Tanjiro y yo dispararamos él me dio en el abdomen y yo le di en la pierna. El logró uir con ayuda de algunos Oni y desde entonces no hemos vuelto a saber de el.

Uzui después de casi perder a una de sus esposas renunció a los Yakuzas y se fue de Japón, actualmente se desconoce dónde se encuentra.

Shinobu al salir antes de la batalla logró no tener ninguna herida grave.

Tomioka estuvo 3 meses en el hospital y una noche simplemente se fue diciendo que ya estaba bien.

Mitsuri y Iguro recibieron daños graves pero por suerte ambos sobrevivieron después de pasar 4 meses y medio en el hospital.

Himejima después de la batalla quedó inconsciente por perder tanta sangre, pero después de sanar sus heridas volvió a su vida normal.

por otro lado Tokito quedó muy herido y pasó 6 meses al igual que yo en coma, solo que este aún estaba ingresado en el hospital.

- tengo que ir a verlo, él me protegió en la batalla - Le dije a Genya y me puse de pié pero este me detuvo.

- Espera T/n. aún hay más. Cuando Sanemi murió, el la lectura del testamento decía que dejaba todas sus propiedades a nombre de Shinazugawa Ichigo, pero como él es menor de edad estan a tu nombre hasta que el niño cumpla los 18, Sanemi también... También te dejó a cargo de sus negocios, y junto con eso, a cargo del Shinjuku.

- Ya veo... - Susurré - si así es como mí amado lo quiso, etonces cumpliré su voluntad.

- ¿Tu amado T/n? pensé que ahora que él ya no estabas tu te darías cuenta de que eres libre y quizás.

- Cállate - Dije con una voz seria. - prepara el aunto, iremos a ver a Mitsuri y luego a Tokito.

Dije y sali de ahí con mi bebé en brazos.

《《¤~¤》》

- ¿Que te parece? - Le pregunté con una a Mitsuri

Había pintado de amarillo los dos mechones mas largos de mi cabello, solo por aburrimiento y me había gustado como quedó.

- ¿No te lo vas a emparejar? - Negué con la cabeza.

- Él lo cortó. Nadie mas lo hará - dije y Mitsuri casi chillo.

Tomé a Ichigo y me despedí de Mitsuri.

- Tengo que ir a hacer unas cuantas cosas, nos vemos pronto.

Salí de la gran mansión con mi pequeño en brazos y de ahí me dirigí al hospital.

Dejé a Ichigo con Genya abajo y subí hasta la habitación de Tokito.

Cuándo entré este estaba acostado mirando por la ventana, algunos vendajes cubrían su frente y tenía algunos cables conectados a él.

- Oh dios mio Tokito, ¿que carajos te pasó?

Él río un poco.

- Sólo un poco de veneno que casi me destruye por dentro y algunas heridas en órganos vitales, nada grave - Bromeó con una sonrisa cuando me vió parada en la puerta.

- Te ves fatal - Reí.

- T/n, me alegra verte aquí, justo pensaba en ti - Le hizo una seña a los hombres que estaban en la habitación y estos salieron. - Debo decir que me sorprendió lo bien que te manejaste en el campo de batalla, estuviste bastante bien a pesar de nunca haber luchado.

- No creo que hubiera estado bien si tuviste que salvarme, tu y unas quinientas personas más.

Ambos reímos un poco.

- Escucha T/n, quiero confesarte que al principio pensé qué solo ibas a ser un personaje extra que se moriría en cualquier momento y nadie lo notaría.

- ¿eh?

- Pero después de ver la valentía con la que luchaste contra el mayor criminal de Japón me dice algo de ti T/n, tú vas a ser la encargada de vencer a Tanjiro, lo se y confío en ti.

Me puse de pie y caminé hasta la puerta.

- Pues procura no morirte, porqué tú estarás a mi lado cuando eso pase, enano.

Sonreí y salí de la habitación escuchando su grito "soy mas alto que tú"

Ahora, solo tenía que encontrar a alguien más. Mi querido Kiiromaru.

Suspiré y llamé a la gran mansión de Tomioka.

Es solo... venganza //Sanemi Shinazugawa x lectora\\Donde viven las historias. Descúbrelo ahora