Es solo... venganza //Sanemi Shinazugawa x lectora\\

20

El silencio reinaba el lugar ¿fue buena idea preguntar eso?

Sanemi estaba sentado en silencio frente a mi, me estaba preocupando un poco.

El peliblanco miraba a un punto fijo hace unos 30 minutos sin emitir palabra alguna.

- No tienes que hacerlo si no quieres Sanemi.

- Mi padre era un alcohólico de mierda. - Comenzó a hablar.

Vale, empezamos mal.

- Que se la pasaba maltratando a mi mamá y a mis hermanas.

Esto no hacía más que empeorar.

- Un día, un día el murió, lo asesinaron. Supuestamente fue alguien que lo odiaba mucho.

Hizo una gran pausa y tragó en seco, sabía que no venía algo bonito.

- Una noche, nuestra madre no regresaba del trabajo, todos estabanos muy asustados, pero sentimos un ruido en la puerta y alguno de nuestros hermanos corrieron a ella ignorando el grito de Genya.

Sanemi puso sus manos en la cabeza y miró abajo.

- De un solo golpe Tenchi, los mató de un solo golpe. Intenté defender a mis hermanos de mi madre, parecía poseída, sus pupilas estaban completamente dilatadas y su cuerpo apestaba a Sake.

Me acerqué un poco a él sentándome a su lado y acariciándo su pelo.

- Los iba matando uno por uno y yo no sabía que hacer. La maldita había hecho un trato con Muzan, el mataría a mi padre si ella se vendía a él y cumplía todas sus ordenes - Sus ojos se llenaron de lágrimas - Una de las órdenes eran acabar con sus hijos, Tenchi ¡nos cambió por ese estúpido maniático! me llené de irá y con un cuchillo que tenía para defenderme comencé a atcarla, ella me lanzaba golpes fuertes y me hacía grandes cortes - Señaló la cicatriz de su rostro - Pero mi ira era tan fuerte que no me importaba, sólo pensaba en mis hermanos muertos, en como ella los había asesinado, clavaba con fuerza el cuchillo en su piel, la sangre salpicaba a mi, y cuando me quice dar cuenta, estaba muerta. Genya llegó en ese momento, había ido a pedir ayuda, y cuando se encontró con eso comenzó a decir que yo era un asesino, y tenía razon Tenchi, lo era ¡lo soy! soy un maldito asesino que siempre intenta proteger a todos pero nunca logra proteger a nadie.

Las lágrimas caían por sus ojos y yo lo apreté contra mi en un fuerte abrazo, Sanemi escondió su rostro en mis tetas. Yo sólo lo abracé.

- Si mi rostro va a terminar aquí cada vez que estoy triste, debería hacerlo más amenudo. - bromeó y me alegré porque ya no lloraba

- No tienes que estar triste para estar aquí.

Lo apreté contra mi y el soltó un suspito, nos quedamos así por un rato hasta que la puerta sonó.

- Señorita Takahashi, la señorita Kanroji esta aquí.

- Oh cierto, que hoy venía Mitsuri.

- ¿Por qué viene?

- Me va a acompañar a comprar unas cosas para el bebé

- Esta bien Tenchi - Besó mi frente - Ten cuidado y lleva a Kiiromaru contigo

- Por supuesto.

《《¤~¤》》

Mitsuri y yo nos pasamos el día caminando de tienda en tienda acompañda de algunos guardias tanto míos como de la pelirosa.

Llevábamos las manos llenas de bolsas con ropa y zapatos de bebé, artículos que podrían ser útil y algunos juguetes.

Una vez llegamos a la casa nos encontramos a Sanemi intentando armar una cuna, Mitsuri se le unió ya que la gran fuerza que tenía podía ser de utilidad.

Yo por otro lado me quedé mirandolo desde una esquina acariciando mi vientre con una mano y a Kiiromaru con otra. Mis pies estaban completamente hinchados por lo mucho que caminamos y mi espalda dolía mucho, así que ambos me pidieron que descansara.

los meses pasaron y casa vez estaba más y más adornado el cuarto del bebé hasta que finalmente quedó listo.

- Es hermoso, Ichigo va a estar muy cómodo aquí - Miré a Sanemi quién tenía su vista fija en mi ya de 9 meses panza.

- Y pensar que en cualquier momento puede salir. Debería llamar a Shinobu, pedirle que se quede aquí hasta que llegue el bebé, no quiero arriesgarme a que llegue tarde y les suceda algo a ti y al bebé, el Ueno queda un poco lejos de aquí.

Me límite a asentir y este salió del cuarto para hacer su llamada.

Sanemi Pov's

Después de dos tonos se escuchó a alguien de la otra línea.

- Vaya vaya Sanemi, hasta que por fin llamas, hacía mucho no hablábamos ¿que necesitas? - Dijo con un tono de voz un tanto infantil sabiendo que eso me molestaría.

- Necesito que vengas, T/n ya tiene 9 meses y no quiero arriesgarme a que venga de sorpresa y tú no estés aquí

- ¿Me estas pidiendo que sea la doctora de tu....? ¿como debería llamarla? ¿pricionera? - Suspiré, sabía que lo hacía para molestarme - ¿O remplazo?

- Shinobu, ya hemos hablado de esto por favor. No menciones a Kanae, ella no tiene nada que ver con T/n.

- Claro que no Sanemi, ¿Sabes por qué? Porqué Kanae está muerta.

Sentí como un viejo dolor revivía.

- Voy a mandar a unos hombres a pasar por ti, ni se te ocurra volver a mencionar su precioso nombre.

- ¿Por que no Sanemi?, es mi hermana, y murió por mi culpa...

- Shinobu ¡Basta ya!

Dije y colgué

Suspiré frustrdo y me di la vuelta para volver y entrar por la habitación dónde había salido, pero T/n estaba ahí parada, mirándome con ojos confndidos

- Tenchi...

- ¿Quien es Kanae?

Suspiré, sabía que este momento llegaría, que tendría que explicarle quién era la dueña de mis pesadillas, y de gran parte de mis sueños antes de que ella llegara.

- Ella... ella era un chica increíble, hermosa, amable, gentil.

Su seño se frunció y me acerqué ella en tono juguetón.

- ¿celosa Tenshi?

- No, ¿por qué debería estarlo? - Respondió borde, cosa que por alguna razón me exito mucho.

- No deberías, porque ahora tu eres mi ángel - Susurré en su oído y comencé a darle besos en el cuello, sentía como su piel reccionaba ante mi tacto y eso me volvía loco.

Ella era mía y ni el estúpido de Kamado ni nadie iba a hacer que eso cambiara

- Aún no me dices quien es esa chica, ¿es tu novia?

Me separé y la miré a los ojos.

- No, Kanae está muerta. Prometí que la protegería toda la vida, y no pude cumplir mi promesa T/n. No puedo proteger a nadie.

- Shh tranquilo

Sus brazos me envolvieron de forma cariñosa

- Ella fue... ella fue mi primer amor.