POV VICKY
Han pasado unos meses desde aquella maravillosa noche de Año Nuevo. Sin embargo, además de alegría, mi vida se ha convertido en un torbellino de incertidumbre y dolor. Estoy decidida a formalizar mi relación con Samy siento que ya es hora, llevamos casi un año saliendo y por fin voy a dar el siguiente paso, a pesar de una inquietud persistente que no logro sacudir de mi mente.
Simplemente es una sensación que no quiere abandonar mi pecho, por más feliz que me encuentre solo me dice que algo malo va a pasar. El problema es que aún no se que es… Lo único que espero que no sea algo demasiado malo o malo en general. Ignorando esa punzada en mi pecho vuelvo a concentrarme en el entorno que me rodea.
Un atardecer tiñe la terraza de nuestro departamento con tonos cálidos. Bueno es mi apartamento, pero pronto también será de Samy… Será nuestro. La mesa está decorada con velas y flores frescas. El aroma de la cena, que cociné con tanto cariño, llena el aire. Siento mariposas en el estómago, emocionada y nerviosa al mismo tiempo. Esta noche voy a pedirle a Samy que sea oficialmente mi novia. Quiero que sepa cuánto la amo y cuánto significa para mí.
—Samy, ¿puedes venir un momento? — La llamo desde la terraza, mi voz está temblando ligeramente.
Ella aparece con una sonrisa, su presencia siempre es tan radiante. Podría estar entre más de cien mil estrellas y mis ojos solo la seguirían viendo a ella.
—¿Qué sucede, Vicky?— Pregunta mirándome a los ojos.
—Quería preparar algo especial para ti — Digo, tomando su mano y guiándola hacia la mesa—. Esta noche es para nosotras.
Nos sentamos y disfrutamos de la cena entre risas y recuerdos compartidos. Mis manos sudan un poco al pensar en lo que viene después. Finalmente, cuando los platos están vacíos y las velas casi consumidas, me armo de valor.
—Samy, hay algo que quiero decirte — Comienzo, mirando sus hermosos ojos avellanas. — Desde el primer momento en que te vi, supe que eras especial… Cada día a tu lado ha sido un regalo. Me haces sentir completa y amada de una manera que nunca creí posible.
Ella me mira, sus ojos brillan con emoción. Saco una pequeña caja de mi bolsillo, el anillo plateado en su interior brilla con una promesa de amor eterno.
—Quiero pedirte algo importante… — Bien llegó el momento Victoria tu puedes. — ¿Puedo ser tu novia, Samy? Quiero formalizar lo que tenemos y que sepas cuánto te amo. Prometo estar a tu lado en cada paso del camino, apoyarte, cuidarte y amarte con todo mi corazón. — Mi corazón latía fuertemente en mi pecho.
Samy se quedo completamente en silencio por un momento, la calidez de sus ojos se desvanece, reemplazada por una frialdad que nunca había visto antes. Mi corazón se acelera, una sensación de inquietud se instala en el fondo de mi estómago.
—No, Vicky. Estoy con Félix. Yo nunca te quise de verdad... ¿En serio pensaste que lo nuestro tenía futuro? Solo fuiste un juego.
Las palabras golpean como un mazazo. Todo se torna oscuro y siento como si el suelo se abriera bajo mis pies. Trato de hablar, de decir algo, pero mi voz no sale, solo veo su rostro con una sonrisa burlándose de mi y dé mis sentimientos.
Entonces, de repente, me despierto en mi cama, sudando y con el corazón acelerado. Otra vez el mismo sueño, pero desearía que solo fuera eso un sueño y no… Un recuerdo, un eco de lo que pasó después de ese accidente de auto.
Estoy sola en mi cuarto. Samy ya no está aquí. Me levanto de la cama y me dirijo a la ventana, mirando el cielo nocturno. Los recuerdos del accidente me golpean con fuerza. Aquella noche, después de la fiesta, Samy y yo íbamos en el auto, una curva, no tenía frenos y después solo oscuridad, pero en mi mente solo estaba Samy con su preciosa sonrisa. Yo desperté en el hospital, pero ella no estaba a mi lado.
Días después, fue cuando intenté formalizar lo que teníamos y… me enteré de la verdad. Samy se había ido con Félix. No he vuelto a verla, ese día simplemente tomo sus cosas y se fue… como si yo no le hubiera importado en ningún momento. La angustia de perderla y el dolor del accidente se mezclan, creando una tormenta dentro de mí.
Salgo de mi cuarto y me dirijo a la cocina para tomar un vaso y llenarlo de agua, pero no es suficiente necesito algo que me haga olvidarla por completo, olvidar todo lo que pase con ella, olvidar su aroma, nuestros recuerdos. Tome una botella de Whisky y llene mi vaso tomándolo de un trago.
Los recuerdos seguían llegando a mi mente como una tormenta nuestro primer beso, la primera vez que nos dijimos te amo, nuestras idas al parque con Waffle, las cenas familiares, las risas resuenan en mi cabeza. ¿Cómo puedo olvidar todo el amor que todavía siento por ella? ¿Cómo puedo… solo dejar de amarla?
Necesito despejar mi mente, pensar en qué hacer. No puedo seguir viviendo con este peso, con esta incertidumbre. Aunque Samy ya no esté en mi vida, su sombra me persigue, su traición me atormenta.
De repente, siento una presencia detrás de mí. Me giro, pero no hay nadie. Es solo mi mente jugándome malas pasadas. Me siento en la mesa de la cocina, dejando que las lágrimas fluyan libremente. Me duele tanto recordar, pero no puedo evitarlo.
Todo su amor… Todas la sonrisas… Todos los momentos que pasamos… Todo con ella fue falso.
Me levantó de mi asiento tirando la mesa, me siento mareada no se cuánto he tomado ni cuánto tiempo llevo aquí sentada llorando. Lo único en mi cabeza es ella. Tomo nuevamente la botella de Whisky tomando el último sorbo que quedaba y con eso tirando la botella la cuál se hace añicos al golpear con la pared. De un momento a otro un grito sale logrando quemar mi garganta y mis piernas ya no soportan mi peso logrando que caiga al suelo.
Solo puedo tomar mi pecho en mi manos sintiendo como mi corazón duele, duele como si lo estuvieran cortando a pedacitos, como si lo calcinaran lentamente… No lograba pensar con claridad… todos los recuerdos, el accidente, su amor falso, nuestros encuentros, su sonrisa al decirme que nada de lo que pasamos fue verdadero…
¿Cómo pudo lograr que algo que se sentía tan puro, tan sincero… resultará ser falso? ¿Cómo pudo lograr enamorarme solo para irse de nuevo con el? ¿Qué tiene el que no tenga yo? ¿No fui suficiente? ¿No le di todo mi amor? ¿Qué me faltó?
—La odio… Te odio Samantha Rivera — Dije en un susurro antes de caer completamente inconsciente en el piso de mi sala, con la cara llena de lágrimas y con el corazón roto.
Nota de autor:
Bueno... Yo lo advertí.— Nix ִֶָ࣪☾.
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EYES TO EYES (Rivers x Young miko)
Fanfiction- ¿Entonces te gustó? - Asiento. - Sí, me gustas Vicky. Está es mi primera historia de Riviko (Rivers x Young Miko).