Sakura se va por mas de tres años de la aldea de Konoha, por la misión de ofrecerse como voluntaria para ayudar al cuerpo médico de Suna con nuevas técnicas medicas.
Pero lo curioso sera que regresara acompañada de un niño. Un niño que es su hijo y...
Naruto buscaba desesperado a Sakumo. Había demasiada gente en el festival que hacía asfixiante su búsqueda. ¿De dónde habrá salido tanta muchedumbre? Se preguntaba el rubio mientras buscaba en cada puesto de juegos propios del festival, en cada puesto de comida e incluso en los juegos lúdicos que habían colocado para los niños de la edad de Sakumo.
-¡SAKUMO-CHAN! -Gritaba desesperadamente, preguntando a cada persona si había visto a un niño con las siguientes características: Un pequeño de dos años con gorro de Totoro, ojos verde jade y yūkata azul rondando solo por ahí.
Pero no obtuvo respuesta alguna.
-Mierda... -susurro para si mismo, mientras intentaba rastrear su chakra.
Pero ni aun así supo ubicar a Sakumo. Naruto desespero buscando a su pequeño sobrino. Incluso llego a pensar que quizás un grupo de ninjas renegados había descubierto la verdadera identidad del padre del hijo de Sakura y al descubrir que Sakumo era hijo de nada más y nada menos de HATAKE KAKASHI, decidieron secuestrar al pequeño al ser algo valioso para su padre, hijo de un hokage... era una buena hipótesis... estúpida mejor dicho, que ni el mismo se la creía, así que, mentalmente Naruto se dio una bofetada y disipo esos pensamientos ilógicos y creados por la situación y estrés del momento.
-¡Sakumo-chan!... ¿Dónde estas?... - Lo ultimo lo dijo en un susurro suave mirando al cielo nocturno, pensando en si tenia miedo o tenia frio, pensando en si alguien lo había secuestrado. Se culpo así mismo por su descuido e irresponsabilidad, y no quería imaginarse en como estaría Sakura al no poder encontrar a su hijo.
Kakashi llevaba cargado a Sakumo para poder avanzar mejor en medio de la multitud del festival, ya que había demasiada gente circulando por las calles, y con demasiada se refería a exagerada para su gusto y le hizo recordar el porque el pasaba de esos festivales.
Pero cuando vio los ojos jade de Sakumo deslumbrado por los colores centellantes de los puestos y viendo los juegos propios del festival, sonrió bajo su mascara y le recordó como cierta pelirrosa lo llevaba o mejor dicho, lo jalaba a fuerza a dichos puestos para jugar, antes de irse a su colina secreta para ver los fuegos artificiales en paz y luego perderse a hacer el amor.
-No cleo que mi mami este pod aquí Dokudaime - Le dijo Sakumo viendo para todas partes y tratando de oler y de reconocer el aroma de su madre o de su tío Naruto.
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-Ummm, bueno debería de estar por aquí - Le contesto Kakashi buscando con la vista y al igual que su hijo tratando de "oler" el aroma característico de su ex-amante -¿Dónde crees que podría estar chaval?
Sakumo se quedó pensativo por un momento, haciendo memoria y luego recordó el parque en donde estuvo antes de perderse.
-Podlia estad en las bancas del padque con tío Naduto -Le dijo inocente el pequeño con una gran sonrisa esperanzado que ellos siguieran ahí y rogando a Kami que sepan de las reglas de supervivencia de Obito-sensei y que estén en el mismo lugar. Pero esa regla aplicaba solo para el perdido y no para los que estaban buscando.
