La rockera y el asesino - Samcoln

Capítulo 22

- ¡pero Sam! Yo tengo que ser la mejor guitarrista de la historia, solo yo puedo...-

- ¡YA BASTA! ¡siempre eres "yo, yo y yo" ¡¿y yo que Luna?! ¡¿acaso no te importan mis sentimientos?!. ¡¿no te importa que yo tengo otros sueños más que ser una estrella de rock?!.-

- ya te dije; no tendrás un buen futuro si sigues uno de esos sueños tontos. Lo mejor para ti es que sigamos juntas para así podamos ser famosas.-

- ... si para ti es más importante la fama que yo pues no te preocupes por eso, de hecho no te molestes en pedirme ayuda ¡porque terminamos!.-

El momento más incómodo en la vida de Luna pero el más satisfactorio en la de Sam; el día en que al rubia se hartó de que su pareja la vea más como un tapete que como una novia. Sam pensaba que Luna era una chica que podría ser su pareja ideal pero con el tiempo se dio cuenta de lo que era en realidad: una demente con una grave adicción al triunfo, específicamente en el ámbito musical puesto que por ser guitarrista ella tenía como única meta el ser la rockera más famosa del mundo.

Sin embargo Sam no tenía ese mismo sueño ya que ella si pensaba con claridad, es decir, el ser estrella de rock no te garantiza que tu vida será más fácil pues el ser estrella a veces no es muy lucrativo que digamos. Pero Luna la presionaba todo el tiempo para que siguiera con ella y pudiera ser vista como una futura estrella; al menos así fue hasta que Sam se armó de valor para terminar con esa relación que no la llevaría a nada más que al fracaso.

- ¡no quiero volver a verte nunca, nunca, nunca....-

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Regresando a la realidad Luna seguía visualizando aquel momento donde toda su vida se fue en picada, después de que Sam la haya dejado por según sus palabras, ser la idiota más egoísta de todo el universo. Pero ahora la situación se puso peor cuando la castaña se enteró de que Sam está saliendo con un chico al que nunca había visto antes; es más que obvio que por su obsesión de ser famosa no se tomó ni tres segundos para conocer la historia de Lincoln Loud.

Pero ahora no le importaba para nada quien era ese chico de cabello blanco, lo que ella más quería era darle una lección por cortejar a su "novia". Lo que si es seguro es que para mañana habrá un gran escándalo en la preparatoria, aunque en estos momentos Leni ya está por advertirle a Lincoln acerca de lo que puede, o más bien, lo que seguramente pasará mañana.