GOLP34 D3 NUEV∅

[54] Miles de millas para atrapar a la esposa

Cuando Lin Yao vio un destello de sorpresa en los ojos de Zhang Xing, seguía apoyado en el marco de la puerta. Sentía que si no fuera por ese marco, seguramente se habría desplomado de rodillas en el suelo. Así que continuó apoyándose en el marco y dijo: —Doctor Zhang, seguramente usted sabe. ¿Puede decírmelo?

—¿Tú me llamaste? —Zhang Xing miró el número en su teléfono.

—Mm.

—¿Cómo conseguiste mi número? —Zhang Xing lo examinó, sosteniendo su taza.

—Revisé el registro de llamadas de Guan Ze, —respondió Lin Yao honestamente: —El día que vino para el chequeo, solo te llamó a ti...

Zhang Xing se dio la vuelta para dejar la taza en la mesa, encendió la luz de la sala y se sentó en una silla: —Entonces puedes seguir revisando el registro de llamadas.

—Aunque lo encuentre, no servirá de nada. Él no contestará mis llamadas, —Lin Yao suspiró suavemente: —Incluso si contestara, no sabría dónde está.

—Tampoco te servirá de nada buscarme a mí. No sé dónde está —Zhang Xing sonrió.

—Así que tampoco le pregunté dónde estaba —Lin Yao finalmente se decidió a salir del marco de la puerta y se acercó al escritorio de Zhang Xing: —Solo quiero saber qué le pasa, qué enfermedad tiene, ¿es grave?

—No lo sé, él no es mi paciente —Zhang Xing señaló el cartel de cardiología en la puerta: —De todos modos, no es una enfermedad cardíaca. 

Lin Yao se dio cuenta de que Zhang Xing y Guan Ze tenían una buena relación, y posiblemente era la única persona que sabía algo sobre la condición de Guan Ze, pero sería muy difícil sacarle alguna información.

—Entonces, ¿podría decirme si su enfermedad es grave? —Lin Yao se apoyó en la mesa.

—No morirá —Zhang Xing tomó una carpeta de al lado, sacó algunas hojas y comenzó a leerlas con la cabeza gacha, dando a entender que no tenía intención de hablar más.

—Gracias. —Lin Yao se quedó parado al lado de la mesa sin decir ni hacer nada. La respuesta de que no moriría no lo tranquilizaba, solo que no moriría, ¿pero se quedaría ciego? ¿quedará discapacitado?

Zhang Xing miró fijamente los papeles, dándoles vuelta una y otra vez, probablemente hasta haya revisado las numeraciones de página. Al final, levantó la cabeza y miró a Lin Yao: —No sé por qué lo buscas, solo puedo decirte lo que sé, y eso es todo. No sé nada más.

—Seguramente volverá a contactarlo, ¿verdad? —dijo Lin Yao apretando los dientes: —Ayúdeme a decirle que no descansaré hasta encontrarlo.

—No puedo garantizar que le transmita el mensaje —dijo Zhang Xing, cerrando la carpeta.

—Además, mi mamá ya lo sabe, todo se puede resolver. Dile que deje de esconderse de mí —dijo Lin Yao antes de darse la vuelta y salir.

Lin Yao pensaba que revisar en privado el registro de llamadas de Zhang Xing era muy descortés, especialmente considerando que Zhang Xing ya lo sabía. Era como si un ladrón fuera descubierto robando una bolsa y alguien le dijera: "¿Estás robando una bolsa?", y él respondiera: "Sí". Luego la persona preguntara: "¿También vas a robar la mía?", y él tuviera que admitir descaradamente: "Correcto".

Y luego sacara la billetera del bolsillo de la persona frente a ellos.

—Esto está muy mal —dijo Lin Yao sentado en la cama de Lin Zong, mirando el registro de llamadas frente a él.