Sentí que esa sonrisa salió de la nada, yo sólo lo miré sin expresión alguna, ignorando lo que sea que fuese eso y decidí irme con Leslie que se sienta con Ethan. Es otro amigo de Max. Es maravilloso que todos estemos en el mismo salón, yo, Leslie, Mack, Emily, Elsa, Max, Ethan, Kevin, Peter, Mark y Nick. Max fue demasiado sociable con ellos y logró tener su grupo de amigos grande. Me fui con ellos porque no pensé ir ahí con esa bola de hormonas que ni del salón eran. Llegué con Leslie y Ethan, que estaba recostado sobre el escritorio, y estaban Emily y Mack también.
─Hola, idiotas, ¿cómo están? ─dije llegando con ellos.
─Mejor que tú, al parecer ─dijo Emily. Entrecerré los ojos y Ethan sólo levantó el dedo pulgar dando a entender que estaba bien─. Escucha, Grey, ¿por qué no vas a tu lugar y averiguas más acerca del guapo que tiene Elsa por hermano?
─Claro que no, por eso vine aquí, no quiero estar ahí con esas chicas hormonales, menos por Elsa ─ellas asintieron y carraspeé mi garganta─. Así que, ¿es su hermano? ─dije como si me diera igual, aunque con el modo que me levanté hoy, espero que me lo crean más.
─Así es, sólo sabemos que viene a ver a su hermanita a la escuela, llegó a la ciudad después de unas vacaciones en el extranjero y creo que lo veremos alrededor demasiado ─dijo Mack viendo hacia ellos.
En ese momento sonó el timbre y Ethan dio un salto, al parecer se asustó con el sonido, todas reímos ante eso, ya yéndonos para nuestros lugares. La bola de hormonas ya se había marchado y decidí esperarme tantito en lo que él se iba. Se despidió de Elsa y ya iba saliendo y, en un último instante, antes de salir, se giró de nuevo, volvió a verme y me sonrió, o eso creo. Volteé hacia atrás y no había nadie prestando atención al frente ─creo que parecí idiota por eso─, y después salió de ahí. Sin duda parecí una tonta. ¿Qué le pasa? O más bien, ¿qué me pasa a mí? Él no pudo haberme sonreído a mí. No lo conozco. ¡Basta! Debería de dejar ver tanta televisión. Me senté en mi lugar y saludé an Elsa, pero no dije nada de su hermano.
Mi hermano y sus amigos entraron todos riéndose como siempre, parecen una bola de bobos. Las clases tomaron su curso normal. Antes de que la última clase terminara, apareció el hermano de Elsa en la puerta pidiendo permiso al profesor para hablar con ella. Elsa fue y él voltio a verme y sonrió sin mostrar diente alguno, a lo que yo solo me dediqué a concentrarme en mi cuaderno. Entró Elsa y le agradeció al profesor y por último volvió a hacer lo mismo y después se fue. Dios mío, no es saludable ver tanto Netflix y comer tanto chocolate, quizá esté alucinando por la cantidad de azúcar en mi sistema. Las clases terminaron y nos dirigimos a nuestros hogares. Entré a mi cuarto y me tumbé en mi cama. Este día estuvo raro.
Al día siguiente, se nos hizo tardísimo. El día anterior estaba viendo una película con Max en la sala de estudio, nos quedamos dormidos y en la mañana entró Paulo gritándonos. A veces él parece el jefe aquí.
─ ¡Muchachos! ─dijo, pegándonos con un cojín─. ¡Faltan quince minutos para las ocho! ¡Levántense ya!
En ese momento, Max y yo nos miramos asustados y salimos como una bala de ahí. Lo primero que hice fue lavarme cara y dientes; por suerte ya había alistado mi mochila, y me puse lo primero que encontré, eché un peine en mi mochila y mi teléfono que no cargué, pero tenía batería así que sí soportaría, lo llevé en el bolsillo de mí pantalón y salí con los zapatos en la mano. Ya no había tiempo, salimos corriendo, y entramos rápido al carro y Paulo intentó llevarnos lo más rápido posible. Max tampoco se había puesto los zapatos y llevaba la mochila un poco desordenada. En el camino acomodó su mochila y se puso los zapatos, yo hice lo mismo y también me peiné. En cuanto llegamos, salimos disparados de ahí y entramos corriendo por los pasillos y nos preocupamos más porque tocaba con el profesor Máster que es muy mala onda y seguro nos pondrá un demerito por esto ─y nuestros padres nos regañarán, hemos tenido suficientes─. Además de que estaban vacíos los pasillos, sólo se escuchaban nuestros pasos. Dimos vuelta rápida en una esquina y chocamos con alguien haciéndonos caer a los tres. Lo vi rápido y era el hermano de Elsa, él estaba confundido, Max se levantó rápido al igual que yo y solo dijimos "disculpa", pero ya ni lo vimos y salimos corriendo, dejándolo ahí tirado. Llegamos deslizándonos a la puerta del salón chocando con la esquina de ésta ya que el piso era resbaloso. Estábamos agitados y nos detuvimos en la entrada llamando la atención de todos, pero nos dimos cuenta de que no estaba el maestro así que entramos sin problema rodando los ojos. Me senté en mi lugar y Elsa me miraba preocupada.
─Ay, Grey, otra vez tarde, pero tuvieron suerte ─dice, al ver que no contestaba porque estaba recuperándome de la corrida que di como nunca había hecho antes─. El profesor no vendrá hoy, seguramente mandan a un substituto. Toma ─me ofreció una manzana─. Seguramente no desayunaste ─solo le agradecí con la mirada y una sonrisa, ella me sonrió y se fue dejándome desayunar. Iba a revisar la hora que era y ver en cuánto fue nuestro genial récord pero no encontraba mi celular. Hice memoria y me acuerdo de que lo metí en el bolsillo de mi pantalón y ya de ahí no sé, ojalá y esté en el auto. Estuve inquieta en la mañana por eso.
Era la hora del almuerzo y yo moría de hambre, así que salí primero yo que las chicas ya que terminé el trabajo de historia primero, ellas entendiendo mi situación, así que me adelanté a comprar y ellas quedaron después. Salí de ahí y me fui a sentar ─sí, sola─, y di la primera mordida a mi comida disfrutándolo como nunca. Seguí hasta que se sentó alguien a mi lado, me quedé con mi comida en la boca al ver de quién se trataba. Era el hermano de Elsa. ¿Qué hacía aquí?
─Hola ─dice, sonriéndome, a lo que yo solo di un trago enorme pasándome la comida y solo quedé un poco incómoda ante esto. Me daba pena cuando alguien que no conocía me observara mientras comiera. Al ver que no decía nada, decidió hablar─. Perdón por no presentarme, soy Eduard Cooper, un placer.
Normalmente pensaba que decían "Un gusto en conocerte".
***
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Heavens (En Curso)
ChickLitGreeicy Heaven ha acumulado los problemas del pasado hasta el punto de afectar sus relaciones sociales, y con ello, sus relaciones amorosas. Fue así hasta que conoce al nuevo amigo de su hermano mellizo, quien poco a poco comienza a entrar en la vi...