Contenido +18.
No me sentía de dieciocho años. Tenía una percepción del tiempo que solía quedarse atrapado en el pasado, y aquello poco a poco se ajustaba hasta que entraba a un nuevo cumpleaños, sin embargo, el ciclo solía repetirse.
Era nuevamente sábado a las tres de la mañana cuando me encontraba despierta, entre mis sábanas, mirando al ventilador dar vueltas y presenciando la casa estar en absoluto silencio. Salí de mi cama, poniéndome un suéter azul y procedí a ir al cuarto de Max. Cada año solemos empezarlos con ambos charlando en la madrugada, terminando en la hamaca de nuestra casa, y planeaba continuar nuestra pequeña tradición, o al menos con la mitad de ella.
—Mhm —se quejó cuando me acosté a su lado, no se molesta cuando me ve como lo haría normalmente cada vez que lo despertaba—. ¿Feliz cumpleaños? —preguntó con su voz somnolienta y ronca, haciendo que riera. Quise adivinar que apenas puede procesar algún pensamiento, pero aún así recuerda nuestro día.
—Sí, feliz cumpleaños, bobo. Tres años más para que cumplas tu sueño dorado: tomar legalmente.
—No es mi sueño dorado. Me gusta un poco hacerlo a escondidas, no te lo voy a negar —remarcó, ofreciéndome una manta y posicionándome mejor a su lado—. Me hace recordar a nuestra graduación.
— ¡Claro! Nuestra graduación. Cuando nos dejaste a la disposición de la botella de papá y al día siguiente se percató de que alguien se había pasado de copas, castigándonos a ambos.
—Es por ello que no deberían dejarte a cargo —le pegué en el brazo y él rió—. Oye, hablando de aquella noche, Peter me comentó que fue la primera cercanía entre Sebas y tú, públicamente. Él tenía tantas ganas de contarle a alguien porque no le gusta mantener secretos que casi le veo recuperar algo de color.
—Sí...
—Querías que todos nos enteremos de que ustedes han estado saliendo prácticamente por medio año y el único enterado es Peter. No entiendo cómo no me di cuenta antes —se frotó los ojos con una mano.
—Estabas ocupado con alguien más. Además, si te hubiera dicho, quizá me hubieses mandado a vivir a las residencias de la universidad o quizá hubiese afectado la amistad de ustedes, y yo no quería arruinar nada.
—O quizá te hubiéramos entendido. —Una sonrisa de lado forman sus labios y me dio esa mirada de que va a comenzar a darme un sermón—. Sé que puedo llegar a ser un intenso, créeme, Less me lo decía demasiado...
— ¿A ella si le haces caso?
—...pero ya prácticamente somos adultos, y creo que soy el menos indicado para darte un consejo de amor. Sebas es mi amigo, y siempre temí que algo sucediera entre ustedes antes cuando recién llegó, pero es un buen chico, ¿qué le voy a hacer? Solo que él... —debatió en decirme algo y sacude la cabeza—. Olvídalo, sólo no es la relación entre amigos que yo esperaba.
— ¿Eso qué significa?
—Sé que Mark te ha querido desde siempre, pero me alegra que hayas salido de ese ciclo repetitivo de «Mark me quiere, hace algo lindo, yo me sonrojo porque mis amigas me lo dicen, actúo como tonta y continúo con mi día hasta el siguiente encuentro», porque era doloroso de ver —lo dijo en un tono cursi hasta que finaliza en uno serio, sonaba algo gracioso y vergonzoso al mismo tiempo porque se trataba de mí.
—No sabía que era tan obvio —solté apenada. ¿Qué más da? Todos parecen saber que ocultar incluso mis sentimientos es difícil a menos de que ellos estén demasiado entretenidos en algo más.
—Cambiemos de tema, no quiero revivir la secundaria.
Sí, yo tampoco.
La semana pasada hice lo que Leslie me había dicho, y por desgracia encontré más cosas de las que pensaba tener, entonces me dispuse a poner todo en una caja. Había un libro que me había regalado Elsa que se había perdido, y fue Sebas quien me ayudó a encontrarlo. Lo importante de ese libro es que dentro de él había una foto en la playa donde Eduard me cargaba entre sus brazos, cayó antes de que él me entregara el libro, con una nota en la parte posterior que exponía algo personal. Sebas preguntó quién era, y pensaba decirle que no importaba porque quería comenzar a dejar el pasado en el pasado, pero él se percató de lo que hacía con la caja y entendió que no era una persona cualquiera. Al final terminé contándole todo, y me refiero a todo.
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Heavens (En Curso)
ChickLitGreeicy Heaven ha acumulado los problemas del pasado hasta el punto de afectar sus relaciones sociales, y con ello, sus relaciones amorosas. Fue así hasta que conoce al nuevo amigo de su hermano mellizo, quien poco a poco comienza a entrar en la vi...