07-. Nicolás Tagliafico

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— Nicolás Tagliafico —

***

Estábamos en casa de Otamendi, había montado una fiesta con gente cercana y gente que la verdad yo no conocía, pero era su casa, no la mía.

Me presentó a algunos de los chicos de la selección que no conocía, aunque la mayoría me eran familiares por fotos o demás.

—Dale Nicolás, ¿hoy se van a juntar? —nos preguntó Otamendi.

Estábamos como en un corrito, algunos sentados en el sofá y otros estábamos de pie, en concreto Nicolás y yo.

Obviamente nadie ponía en duda que a mí me gustaba Tagliafico, excepto él mismo.

Y todos allí sabían que Nicolás gustaba de mí.

—No me da bola —Nico se encogió hombros.

—Claro que no, sos un gato —negué.

—¿Qué decís morocha? —se quejó el nombrado.

—Siempre te lanzas a por todas.

—Y dale Nico, ya besala para que se calle —señaló Leandro.

—No —me moví para ponerme de perfil y que no se acercase.

—Primer rechazo de la noche —contó Paulo riendo y levantando un dedo.

—Sí, los dejo solos, me voy con la chicas —me despedí con la mano y fui hacia el corrito de las chicas.

Pero sinceramente me aburrí rápido y fui a la mesa de las bebidas a entretenerme un poco.

—¿Ya te aburriste Belu? —apareció Nicolás a mi lado.

—Sí, están hablando de no sé qué evento, y la verdad no me entero de nada —bufé.

—¿Sabes que si fuera mi novia estarías en los mismo eventos que ellas? Quizá así te enterarias —propuso.

—A mí me da igual estar en un evento o no, total, ¿qué gano yo? ¿Hacerme una foto? Ni que me importase —me encogí de hombros y me di la vuelta a seguir eligiendo bebida.

—Y dale nena —me agarró del brazo y me giró de nuevo hacia él—, vos sabes perfecto que me gustas desde hace banda —puso ese brazo en su hombro y yo agarré su cuello.

—Bueno, ¿y qué querés que haga? Vos nunca me lo dijiste, me enteré por Otamendi, que sé yo si ustedes se lo inventan —acaricié su nuca y vi de reojo a los del sofá mirando.

—¿Querés que te diga que me gustas? Me encantas morocha, me encantas —me agarró de la cintura con su mano libre.

Se acercó de nuevo a besarme y giré mi cara a un lado, rechazando ese beso también y reí viendo a los demás.

One shots || Selección argentina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora