M*erda

4.3K 478 55
                                    

Luke subió al autobús y notó que estaba casi lleno. Por suerte, Tom le había reservado un lugar en uno de los asientos de atrás.


En el autobús, Luke no se cruzó con ninguna de las personas que lo molestaban, ya que, a diferencia de él, tenían padres que los llevaban a la escuela.


"¿Estás seguro de hacer la broma...?" preguntó Tom mientras Luke se sentaba a su lado.


"Sí... Es mejor no hablar de eso aquí", dijo Luke, que no quería que se filtrara nada.


Para algunos de los preparativos de la broma, Luke necesitaba la ayuda de Tom, por lo que era la única persona al tanto de la gran broma que sucedería este sábado. Luke sabía que Tom odiaba a los matones al igual que él, así que no haría nada estúpido.


El viernes terminaban las clases y el sábado habría una fiesta a la que iría todo el colegio.


Es el momento perfecto para la venganza de Luke y para enseñar a los estúpidos matones y al inepto personal de la escuela que hacen oídos sordos a pesar de las quejas de Luke, Tom y otros niños del orfanato.


Finalmente llegaron a la escuela. Luke se bajó del autobús y caminó hacia la puerta principal acompañado por Tom.


Mientras caminaban por los pasillos de la escuela hacia sus casilleros, Luke pudo escuchar una voz que se dirigía a él: "Bonitos zapatos, Luke. ¿No tienes dinero para comprar un par nuevo?"


Luke volvió la cabeza y notó un grupo de cuatro niños. El del medio fue quien habló y el líder de todos: Brad Thompson. Es el líder del equipo de fútbol de la escuela y una de las personas más populares.


El estereotipo de Brad era tan cliché que a Luke le dieron ganas de vomitar. No podía creer que existiera una persona tan normal que cumpliera con todos los requisitos de un típico matón escolar.


"Dudo que tengan dinero en ese maloliente orfanato", comentó un amigo de Brad, y todos empezaron a reír a carcajadas.


"Veo que te estás esforzando más con tus burlas. Bien hecho. ¿Qué será mañana? ¿Mis padres? No, espera... De eso ya se burlaron", dijo Luke pensativamente.


"Tal vez puedan burlarse de los agujeros en tus pantalones", dijo Tom con una leve sonrisa."Oh, sí... de eso aún no se han burlado", asintió Luke, mirándose los pantalones. En su tibia derecha había un agujero que dejaba su pierna a la vista.


"¿Escuchaste eso? Es una buena sugerencia. Escríbelo. No sea que tus estúpidos cerebros lo olviden", agregó Luke con una leve sonrisa. Tom junto a él comenzó a reír a carcajadas.


"¡No seas listo, Luke!" gruñó Brad, apretando los puños y moviéndose agresivamente hacia Luke.


Luke no retrocedió, aunque pesaba 20 kg menos que Brad, no tenía miedo. Sus ojos miraron a Brad con desprecio. Con sus poderes psíquicos, podría terminar la pelea en segundos. Quizás debería romperse una pierna y terminar prematuramente su carrera futbolística.

Wednesday: El psíquico más fuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora