La familia Addams

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1313 Cemetery Lane.


En un terreno baldío, rodeado de pantanos y un foso, se alza una mansión señorial y sombría. Desde el exterior, la mansión es una vista imponente y decadente. La fachada estaba cubierta de follaje y enredaderas retorcidas.


Los aldabones y el buzón parecen tener vida propia, como guardianes grotescos que vigilan la entrada principal.


Al entrar en la mansión se revela un laberinto de pasillos secretos y habitaciones ocultas. El interior está adornado con objetos extraños y estatuas macabras. Cada rincón de la mansión parece albergar algún secreto oscuro o rareza única.


En una de las muchas habitaciones de esta mansión, se estaba llevando a cabo una conversación. La habitación tenía un ambiente gótico y excéntrico. Las paredes están adornadas con tapices antiguos y pinturas oscuras que parecen seguirte con su mirada. Los candelabros colgantes, cubiertos de telarañas y adornados con calaveras, arrojaban una luz tenue que agregaba un toque de teatralidad a la atmósfera.


En el centro de la habitación había una enorme chimenea de piedra, siempre encendida y que emanaba una calidez reconfortante que contrastaba con la atmósfera sombría del lugar.


Dos personas estaban sentadas en un sofá de terciopelo negro. Un hombre y una mujer.


La mujer era hermosa y tenía la piel pálida y el pelo largo y negro. Llevaba un vestido gótico negro a juego con su pelo.


El hombre era fornido, con la nariz chata, los dientes torcidos y el mentón hundido. Era más bajo de estatura que la mujer que estaba a su lado. Llevaba el pelo peinado hacia atrás y lucía un bigote fino como un lápiz.


Frente a los dos estaba sentada una joven.


La chica tenía el pelo negro recogido en dos largas trenzas, un flequillo sobre la frente, tez pálida, ojos de color marrón oscuro y sombra de ojos negra. La chica también llevaba un vestido negro similar al de la mujer. Era como una versión más pequeña y delicada.


La única diferencia era que la chica tenía una expresión vacía y sin emociones. Por otro lado, la mujer sonreía cálidamente mientras la miraba.


"Querida, ¿cuánto tiempo más estarás enojada con nosotros?" preguntó la pálida y hermosa mujer. Su nombre era Morticia Addams.


La mansión pertenecía a la famosa y antigua familia de psíquicos Los Addams. Una de las familias marginadas más antiguas y poderosas de América.


"El tiempo que sea necesario. Me inscribiste en Nevermore sin mi consentimiento. No quiero repetir los mismos pasos que tú, madre", dijo la chica de la coleta en tono monótono y sin cambiar su expresión. Su nombre era Merlina Addams.


"Te prometo, mi pequeña serpiente, que amarás a Nevermore, ¿verdad, mi amada?" preguntó el hombre del bigote. Su nombre era Gomez Addams.


"Por supuesto. Es la escuela ideal para ella", dijo Morticia asintiendo.


Wednesday: El psíquico más fuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora