"𝑭𝒓𝒆𝒔𝒂𝒔 𝒄𝒐𝒏 𝒄𝒉𝒐𝒄𝒐𝒍𝒂𝒕𝒆...

62 8 0
                                    

No había nada más que besos cálidos pero también y al mismo tiempo me sentía confundida, sus toques me hacían perder la cabeza, sus dedos parecían estar fuegos quemando mi piel.

—¿Y ahora?— Susurró sobre mi oído Tom, estábamos en aquel mismo sillón  donde empezó todo. Toda la discusión y luego los besos necesitados. —¿Que haremos?—

—Estoy...confundida...— Murmure viendo a un punto del living, esté se removió debajo mío y me miró —No es malo, quiero decir...confundida pero con lo que pasará lo que resta de nuestras vidas, éramos enemigos y nos odiabamos mutuamente y ahora reina el amor entre ambos. ¿No es todo extraño?— reí para hacer desaparecer los nervios que sentía ahora mismo, simplemente por nombrar aquella palabra amor.

¿En que momento fue todo eso?

—Sólo nos enamoramos, ¿sí? nosotros no decidimos de quién enamorarnos, sino el corazón es quién escoge por nosotros...— Besó mi frente lentamente —, estoy seguro que me enamore de ti aquel día que nos besamos, tuve que embriagarme para poder robarte un beso y de una vez por toda comprobar que me gustabas— ahora fui yo quién giró a verle, con una sonrisa confusa —. Si, tantas peleas no eran por que te odiaba, tu capaz me odiabas terriblemente pero yo no, sólo estaba celoso de que seas tu la que deseaban hasta que necesitaba hacer algo para que no fuera así, sino ser yo...debo decir que soy tan idiota por comprobarlo de esa manera, entre peleas y demás idioteces de chico enamorado.—

—Pues...no se que decirte ahora, esto es tan confuso para mí. De verdad quiero algo pero no sé cómo...— El me sonrió y levantó sus manos para agarrar mi rostro, —, tengo tiempo tal ves es eso, primera vez intentando algo serio y con la persona que jamás creí tener algo, ni en sueños..— el soltó una risita achinando sus ojos al reír.

—Te voy ayudar, en todo pero aún así, no quiero que nadie más te mire— Demandó poniéndose serio, sólo asentí por que iba lo mismo para el.

—Para ti igual, ni Mía ni Sheryl...— el frunce el ceño

—¿Sheryl?

—Es una zorra, te mira cómo una necesitada

—Y es por que me necesita— bromeó haciéndole el gracioso hasta que lo mire —Es broma, sabes que eres la única.— beso mi mejilla

—Bien, que sea así.

—Tortolitos ¿vienen?— Bill nos hizo pegar un salto del sillón, haciéndonos verlo con enojo —Emma está por revelar el sexo— nos avisó con emoción en su tono de voz que rápido salió corriendo.

Ambos hicimos lo mismo, encontrándonos a los demás expectantes de todo. Emma se junto a Bill, ambos se miraban con emoción y energéticos rompiendo unos cuantos globos para qué uno de los dos llegue al último globo más grande color negro, Emma lo hizo mientras Bill la miraba sonriendo.

—¡Una!— contaron todos de repente, al unísono.

—¡Dos!— sentí una cálida piel rozando la de mi mano, baje mi cabeza para mirar y era Tom agarrando mi mano. Sonreí más feliz que nunca.

—¡Tres!— y Emma rompió, saliendo varios papeles de color azul, haciéndonos a todos reír de la emoción, adrenalina al ver a ellos reírse y agarrarse el rostro.

—¡Te amo!— Bill la cargo con cuidado y la beso, todos empezamos a gritar. Vimos que nuestros padres se nos acercaban y me solté de la mano de Tom.

—¡Eva, cariño!— Lía me besó, con lágrimas en los ojos se me acerco en un abrazo —¡No puedo creerlo!— murmuró entre lágrimas.

—¡Joder!— estábamos todos riendo de la adrenalina, a la vez feliz por que íbamos a tener otro integrante a la familia. La pequeña Emma era mamá, traía al mundo un hijo de los Kaulitz y no era como yo lo pensé, era por que ellos se amaban.

—¿Estás feliz de que nuestro sobrino sea varón?— siento una mano tocar mi cintura, dando un leve apretón

—¡Más que feliz!— respondí y por la energía, lo abrace riéndome —¡Seré tía!—

—¡Y yo tío!— me siguió. Cuándo el intento besarme me alejé, yo sabía que no iba a resistirme pero debía hacerlo, estábamos frente a todos los invitados.

—¿Los saludamos?— el asintió, siguiéndome hasta dónde estaban la pareja, recibiendo los demás saludos







(...)





—Joderr Eva— mire a Mía, estaba perdida en su teléfono con una sonrisa —¡Mira esto!— me puso la pantalla cerca del rostro, haciéndome ver una publicación de Tom en su Instagram. "Tan pronto van a tener la competencia tan esperada, Tom Kaulitz VS Evangelina Bloosom..."

Mis mejillas ardieron al ver aquella foto de ambos riéndonos y con ese título en grande, de subtítulos estaban la fecha y hora también su etiqueta hacia mi usuario con una corazón. Sonreí al ver eso, por otro lado recibí un leve empujón de Mía.

—¿Te gusta verdad?— habló sonriéndome coqueta, sin rodeos asenti embobada en la publicación. —Sabia que terminarían juntos, por que sé que polos opuestos se atraen...— ruedo los ojos —, no te enojes boba..es cierto, ahora están juntos y tú que querías fingir un amorío conmigo y el...

—Sobre eso, lo siento ¿okay? es que pensé que te gusta y que tu le gustabas. ¿Me perdonas?— hice un puchero exagerado haciéndola reír —Eras apetitosa tu también, el momento que entraste fue de diva, una fresa con chocolates...¿me entiendes a lo que me refiero?— ella soltó una carcajada asintiendo

—Tu también eres hermosa, no te sientas menos. Y obvio, ahora somos casi...¿amigas, no?– me abrazó por los hombros riendo juguetona

—Pues claro, somos amigas ahora vivís conmigo— le acepté el abrazo entre risas nos mirábamos. Ella empezó a hacerme cosquillas —¡No, cosquillas no!— me alejé, entre risas corríamos por qué ella intentaba atraparme.

Pasamos toda la tarde jugando, para luego acostarme algo exhausta. Creo que todo por ahora estaba bien, solo tenía que descansar y volver a despertar mañana para otro día.










HELLO!

¿Cómo les cae la historia? 👍o👎

Espero que puedan disfrutar y que no olviden de apoyar esto. Cambio y fuera lectoritas🥰.

𝚄𝚗 𝚜𝚞𝚌𝚒𝚘 𝚓𝚞𝚎𝚐𝚘|| 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora