𝚄𝚗 𝚜𝚞𝚌𝚒𝚘 𝚓𝚞𝚎𝚐𝚘|| 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇

"𝑬𝒓𝒆𝒔 𝒕𝒓𝒂𝒗𝒊𝒆𝒔𝒂...

—¿Tienes planes para hoy?— Me pregunto Clara atrás de la línea, lo pensé un momento;

—No, ¿algo que quieras decirme?— Siento su risita

—De echo necesito ayuda tuya, comprarme ropas y todo lo que tenga que ver con la moda, la cuál tú manejas muy bien— Solte una sonrisa nasal —, tengo cena con unos amigos de mis padres, quieren que me vean lo más decente. Ya sabes, tiene que ver con su empleo...— la oí bufar cansada— en fin, ¿tenés tiempo?—

—Obvio amor, claro. Nos estamos viendo en un rato...

—¡Te amo!— Gritó retumbando mis tímpanos

—Ay, Clara. Te paso a buscar y nos vemos, bye bye— Tire un beso en la línea, para recibir otro de ella y colgar.

Me puse de pies y subí las escaleras, apenas agarre mi bolso y las llaves, mi teléfono vibró; Tom el amor de mi vida, sí, estaba marcandome.

—¿Tom?— Masticaba mi chicle con sensualidad, como si estuviese viéndome.

—Estoy bien gracias amor...— Amor.

—Ah, bueno pues...

—Luego me lo devuelves. Ahora, ¿tienes planes para hoy?— Me subí a mi auto, poniendo mi teléfono en el asiento y así cerrar la puerta

—Ah si, bueno ahora estoy yendo a Clara. Necesita ayuda con la moda...— Siento su bufido —, ¿algo que debas decirme Kaulitz?— arranque mi auto, para ponerme el teléfono al oído.

—Si, es que necesitan tomarnos unas fotos...— Me detuve en seco con el auto —, Ricardo quiere fotografiar tu perfecto cuerpo con unas marcas de sus ropas, modelarle. Me agrado la idea y bueno te necesito, ¿no te molesta?—

—¡No! ¡Yo, Dios que vergüenza!

—¿Que por qué?

—¡Estaré posando frente a todos, cámaras y muchísimas más cámaras Tom!— Gruñi.

—¿Que hay de mal en ello? Estas teniendo tu primer trabajo y te estoy haciendo un gran favor. Acepta o me largo a llorar, vamos Evans, necesitó verte posar....digo...

—¡Ajá! ¡Tu necesitas verme!—

—¡Ok ok ok!— Bufa —¡Yo quiero tener un momento íntimo! Hoy saldrán los demás, quiero que vengas a casa...tipo 20hs, un momento para ambos, íntimo, sabes que te extraño...— Mi piel se erizo al oírlo con su voz gruesa.

—Está bien. Iré pero con la condición de que haya películas y postres, por ejemplo, helado, snacks, otras frituras, ehm...también crema con frutilla...—

—Ok, voy a darte yo el postre mientras comes todo lo que me pediste...— Susurró haciéndome reír —, ¿si?—

—Bien, estamos viéndonos luego. Adiós, te amo.—

—¡También te amo!—

(...)

—Deberías comprarte esto...— Modeló una lencería que traía puesta, haciéndome burla —Ya que te dio una indirecta muy y demasiado directa. Va a comerte mientras tu comes la comida comida, ¿me entiendes no?—

—Ya, no hablemos de eso. Vinimos por ti, no por mi...— Ella río, para sacarse la lencería que se midió sobre su ropa

—Ok, no te enfades. Pero confía en mi, es la lencería perfecta para la ocasión...— La mire, achinando mis ojos para negarle con mi cabeza —, bien bien ya, solo decía.—

—¡Mira este vestido!— Señalé para cambiar de tema y hacerla probar también un vestido color pastel. Ella negó, fustrada por no conseguir de su gusto. —¿Esté?—