03

2.1K 113 23
                                    

*Al día siguiente*

Natalia:

Como una buena deportista y futbolista que soy, me había propuesto salir a correr todas las mañanas de verano, así estaría bien preparada para la pretemporada. Me puse el despertador a las nueve de la mañana, y en cuanto sonó, me levanté y me puse ropa deportiva, que por suerte me había acordado de meter en ma maleta. Nadie estaba despierto a esta hora, Julia seguía durmiendo y los demás estaban en sus habitaciones correspondientes.

Bajé las escaleras y al dirigirme hacia la cocina, vi que alguien sí que estaba despierto. Héctor. Abrí la nevera para coger una manzana fresquita, mientras él seguía concentrado en probar el batido de vitaminas que había hecho.

No tenía muy buena pinta...

-¿Vas a salir a correr?-Pregunté mientras le daba un mordisco a la manzana, después de lavarla, claro. Él solo asintió sin mirarme.

Antes de salir de la cocina me acercó el batido de vitaminas que había hecho, lo puso en el lado de la encimera en la que yo estaba.-Pruébalo si quieres.-Habló aburrido.-Tiene vitaminas, me lo recomendó mi nutriciunista.-De nuevo, no me miró ni a la cara, y se fue de la cocina.
Poco después salí yo a correr.

(...)

-Matías, tranquilo.-Entré en casa y vi a Héctor y Marc sentados en el sofá. Me miraron al notar mi presencia y yo les hice un simple gesto con la mano en forma de saludo.-¿Qué? ¡No!-Le dije a Matías por el móvil.-Mira para que te quedes más tranquilo, Marc tiene novia y es Carmen, Cubarsí está con Julia, Fermin tiene algo con alguien, creo y Lamine va a su bola, no se centra en mujeres. Nadie quiere nada conmigo, ¿vale?.-Le di tiempo a responder.-No, Héctor no ha venido, si no, no hubiera venido,...Que no, que no está aquí.-Expliqué mientras sacaba una botella de agua de la nevera.-Agh, Matías, cuando se te pase esta escenita de celos, me llamas, adiós.-Corté la llamada y me fui para el sofá con un paquete de galletas, me senté al lado de Marc.

-Problemas con el novio, ¿no?-Sonrió.

-¿Dónde están los demás?-Pregunté al no ver a ninguno más que a ellos.

-En la playa.-Explicó Marc

-¿Julia se ha ido a la playa sin avisarme? ¡Qué fuerte!-Marc solo se rió después de mi comentario.

-Ahora vamos a ir nosotros también, vente.-Me ofreció Marc.

Subí a mi habitación a ponerme un bikini y ponerme un vestido de playa.

Al bajar, ellos seguían viendo la televisión, me prestaron atención y salimos de casa después de coger  algunas toallas y bocadillos.

Llegamos a la playa y vimos a los demás a lo lejos, había poca gente allí, ellos estaban tomando el sol, mientras Lamine jugaba al Uno con Cubarsí y Fermin. En cuanto llegué me puse a jugar con ellos, Marc y Héctor se fueron al agua.
Poco después fuimos todos.

Nos quedamos haciendo guerras de agua.

La tensión entre Héctor y yo se podía notar a kilómetros, y sé que nuestra actitud de pocos amigos estropeaba el momento tan bonito que estaban viviendo los demás, así que por mi parte intenté disimular la incomodidad y dejar de mirarlo, aunque eso era casi imposible.

Después de estar un rato en el mar, nos salimos para poder almorzar los bocadillos de tortilla que habíamos traído.

-Joder.-Dije y todos me miraron mientras le daban mordiscos a sus bocadillos.-Se me ha olvidado mi bocadillo.-Aclaré cogiendo una bolsa de patatas para almorzar algo.

-Toma.-Me miró Héctor, dándome la mitad de su bocadillo.
Esta vez me miró, me miró a los ojos, simplemente que ese brillo que había hace meses, no estaba.
Ya su mirada no me decía nada.

EN LA MISMA VILLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora