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Al día siguiente, Minho como lo acordado, estaba frente a su edificio en espera de Seungmin, quien unos cuantos minutos después bajo y entro al carro

— Hola, buenos días -mencionó para Minho y el chófer, quienes no respondieron

— Toma, estas son las citas que tengo hoy, puedes mirarlas y decirme con forme pasa el día que cita sigue -hablo Minho entregándole una tableta

— ¿Solo eso? -preguntó, pues se le hacía muy fácil, cosa, que realmente no lo era.

— Al menos por ahora, si. -finalizo dándole un beso, del cual Seungmin se quito de inmediato

— No.... -respondío avergonzado, mirando de reojo al chófer, quien solo conducía mirando al frente

Minho soltó una risa sacarcastica

— ¿Que? ¿Te da pena? -dijo posando una de sus manos en la pierna de Seungmin-  Ignora su presencia, no dirá nada.

Menciono por último, tomándo con una mano la cara de Seungmin juntando sus bocas en un beso fogoso, mientras que con la otra mano, comenzó a recorrer la pierna ajena hasta llegar al cinturón de Seungmin, el cual desabrocho

— No Lee -alcanzo a decir antes de que Minho metiera su mano dentro del pantalón del menor, quien comenzó a moverse como gusano sobre el asiento, Minho bajo hasta su cuello, dónde comenzó a besarlo desesperadamente

Seungmin simplemente pudo tapar su boca con una de sus manos, pues sabía que no podía controlar a Minho, quien yacía bajando hasta la entrepierna de Seungmin

El carro comenzó a moverse poco a poco, menos mal que el auto estaba en curso y con vidrios polarizados, si no, cualquier los hubiera pillado

— Ah, ahh -gimio descaradamente Minho, teniendo a Seungmin bajo de el en cuatro, sosteniéndose en los asientos, su trasero pegando consecutivamente con la pelvis de minho, quien mantenía un ritmo rápido y algo brusco

Jalo de los cabellos del menor, quien se reincorporo con dificultad, pegando su espalda con el abdomen de Minho, uniendo sus labios en un nuevo beso

Al llegar a la locación, el primero en bajar fue Seungmin, quien corrió a un baño de inmediato, pues se había mareado en el transcurso del viaje

— ¿Te mareaste mucho? -preguntó Minho mientras prendía un cigarro

— Eres un idiota -solto Seungmin ya lavando su boca, sosteniéndose del fregadero de mármol

Minho dejo el cigarro aun lado, tomando a Seungmin de la cintura, posicionándose atrás suyo

— Minho... No, para -mencionó al sentirlo bajar su pantalón

— ¿Estás cansado, cariño? -preguntó bajando la ropa interior de Seungmin, quien unos instantes después, volvió a sentirlo dentro suyo

Minho volvió a tomar su cigarro, mientras que con su mano desocupada ayudo a la cadera del menor, comenzando a mirar mediante el gran espejo la cara de su amante quien gimoteaba, teniendo levemente la boca abierta, mientras apretaba sus ojos por el placer

Ese fue tan solo el comienzo de una era, en la cuál minho comenzó a tener relaciones sexuales a más no poder con el, haciendo cuestionar a Seungmin, pues pareciera que Minho solo lo quería por eso

— Es muy lindo tu secretario -mencionó un inversionistas- ¿Me lo podrías prestar?

Pregunto haciéndolo sentir incómodo, no era la primera vez, y estaba seguro que no iba a ser la última

— Claro que no, si quieres te puedo presentar a alguien -hablo Minho desviando el tema- Pero el no, el es mío.

Seungmin se había dado cuenta que aquel trabajo era algo complicado, si bien no era cansado, era complicado, estar presente en todas las reuniones, ayudar a Minho con los inversionistas, facilitarle las cosas, estar pendiente a las citas, y algo que no odiaba, pero se le había echo cansado; tener sexo.

𝘔𝘢𝘳𝘪𝘱𝘰𝘴𝘢𝘴 ✩ 𝐊𝐧𝐨𝐰𝐌𝐢𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora