Agostina | Julián Álvarez

30. Feliz cumpleaños =)

30 de enero, 2022.

Julián.

Después del entrenamiento, volví a casa a cenar junto a mi familia. Ahora mismo no se encuentran acá en Buenos Aires mis padres ni hermanos, así que solo estoy con Mar y mi hija que son todo para mí.

Mar volvió de Colombia hace unos días, la verdad que le fue muy bien, ya vi algunos rodajes y están muy buenos sinceramente. Me pone feliz por ella. También la extrañe mucho, pero lo entiendo perfectamente, a ella le gusta y yo no voy a interferir en sus sueños, de hecho estoy para apoyarla, acompañarla e impulsarla a que los cumpla.

Sin más datos que agregar, mañana cumplo mis 22 años y escucho la TINI. Mentira. Pero es cierto que dentro de unas horas voy a ser cumpleañero y lástima que no va estar mi familia para festejarlo, pero bueno, me conformo con que esté Mar y Agos. No sé todavía pero imagino que haremos algo. Mi mujer me ha estado preguntando sobre el tema hace una semana y no quedamos en nada final.

-Amor, ¿querés postre? -pregunta mi mujer mientras estamos sentados en la mesa terminando de cenar.

-Si, un poquito, amor -levanto mi plato.

-Bueno, hay te traigo -trajo un postre para cada uno, mi hija que no quería comer, comió rápido al ver el postre-. ¿Y como te fue hoy, mi amor? -me mirá.

-Bien, todo bien, no entrenamos tanto -cuento.

-Que bueno -me mirá con una sonrisa.

-Ah, ¿y hablaste con Maxi? -pregunté recordando que hace unos días le tenía un contrato importante.

-Si -contesta y me la quedo viendo para que me cuente más-. Tenía un contrato para grabar en España los próximos meses, lo rechazamos porque no estaba bueno.

-¿Ah sí? Está bien.

-Mami, ya terminé -le damos el postre.

-Cambiando de tema, Agos quiere ir al jardín de River, me lo viene pidiendo desde que llegamos acá casi -me dice y sonrió mirando a mi hija, es telible' como dice ella.

-Si, yo quiero River -sonríe.

-Bueno, ahí vas a ir, mi amor -le digo y luego miro a mi mujer-. ¿Estás de acuerdo, que no, amor?

-Si, ya estuve averiguando un poco de eso -dice y me cuenta todo lo averiguado, nada iba ser obstáculo, mi hija va ir a ese jardín porque ella lo quiere y yo soy su papá, como que me llamo Julián Álvarez.

-No hay problema -digo al final, ahí va ir.

Terminamos de cenar y nos preparamos para dormir. Ya de costumbre Mar peleó con Agos para que duerma en su cuarto, peleó tanto por tener cuarto propio y ahora hay que pelear para que duerma sola.

Después de hacerla acostar, nos acostamos nosotros y dormimos feliz, como cualquier otra noche. Intercambie un par de mensajes con mis hermanos que están en Córdoba y luego apagué el celular para dormir, Mar ya dormía con sus ojitos cerrados y la boca entreabierta, me la quedo viendo hasta que me gana el sueño y entonces apagó la luz. Mi mujer la más hermosa.

Después de dormir no sé cuánto tiempo, empiezo a sentir algo incómodo en la nariz que me da cosquillas y ganas de estornudar. Paso la mano por la zona y de a poco voy abriendo los ojos hasta que logro descifrar una figura en frente mío, miró bien y es Mar con una sonrisa.

-¡Papi, papi! -la voz de mi pequeña retumba y siento su peso encima de mi cuerpo.

-Amor -habla Mar y entonces me siento.

-Buendía -me acomodo bien en la cama sentándome-. Guau, se levantaron muy temprano, no -dije.

-¡SORPRESA! -gritan y me levantan una manta de sobre la cama dejando al descubierto una enorme bandeja de comida, mejor dicho dulces que a mí me encantan con un ramo de flores al costado y varias cositas más. En el medio estaba una mini torta con varias velitas encendida.