Horas después...
WhatsApp:
Max: En una hora te recojo.
Cuando leí este mensaje, me asusté, paré de inmediato y Gaby me miraba sorprendida.
—¿Qué pasó? ¿Quién te escribió?
—Era Max, me dijo que en una hora me recogería — respondí nerviosa.
—Oh, esto es genial — dijo sorprendida.
Registré en el armario y.... no tengo algo sexy para esta noche.
—¿Qué? — preguntó Gaby.
—No tengo un vestido para esta noche — repuse.
—Utilizas el vestido que colocaste la noche de la playa.
—No, parezco una fotocopia — repliqué—. Además, no es una buena idea repetir un vestido que una persona lo vió.
—Tienes razón — sacudió la cabeza y chasqueó sus dedos—. Se me alumbró el foco. — Gaby se paró del comedor y buscó algo entre sus cosas, la observé y miré que sacó algo y era...
—Toma, mida este vestido, a ver si te queda — me entregó un vestido muy divino—. Lo compré cuando estaba el día de la graduación de mi hermano menor del colegio. Eso fue el año pasado, empaqué este vestido por si las moscas y creo que te va a servir para ti.
—No es necesario...
—Claro que sí —me interrumpió-. Toma y te lo regalo.
—Gaby... — suspiré.
Y acepté, empecé a medir el vestido de mi amiga que prácticamente me lo regaló ya que ella tiene muchos vestidos muy parecidos y le agradecí por regalármelo.
—Guao si te queda bien este vestido — se sorprendió—. Estás sexy y Max se va a enamorar más de ti.
—De verás que me veo bien — Gaby puso su dedo pulgar arriba que sí. Al menos es una buena señal.
Una hora después, alguien tocó la puerta, Gaby abrió la puerta y era Max.
—Hola, Max — Gaby saludó —. Llegó su príncipe azul, querida. Enseguida va, si quieres pase y espérala... siéntate, en esta silla.
—Hola, Gabriela y gracias — dijo Max a mi amiga.
Cuando salí de ahí, Max me fijó en unos segundos como me veía.
—Como me veo, Gaby — vigilé a Max como me estaba mirándome desde arriba hasta mis piernas gruesas y morenas. Él carraspeó por lo que Gaby chasqueó con sus dedos y Max sobresaltó. De nuevo carraspeó.
—Joder, estás guapísima — contestó Max y carraspeó—. Cada día te veis más sexy, mi diavolina consentida. — Escuché su voz algo cortante y a la vez una pequeña sonrisita.
—Gra... gracias — tartamudee.
Max también estaba guapo este día, solo que se vistió un pantalón en dril con una camiseta manga corta color negra y olía muy bien. Hicimos estas miraditas de nuestros ojos y al instante Gaby carraspeó.
—Los dos se ven muy sexy — nos comentó que nos veíamos bien—. No quiero echar de la habitación, pero ya está cogiendo la tarde, así que lo disfruten esta noche.
—Gracias, Gaby — quise añadir algo más, pero lo único que se me ocurrió fue —: Vamos, Max.
—Si, claro — repuso—. Más tarde regresó sana y salva.
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Un Amor En El Extranjero Parte 1 (EN BORRADOR)
Romans¿Ustedes creen en el amor a primera vista? Alexa Rodriguez es una chica colombiana que en sus pasatiempos le encanta leer y escribir en su propio blog y publicar en sus redes sociales, hasta que ella ganó una beca universitaria en el extranjero. Cua...