Only Want | Loki Laufeyson

Capítulo 9: Escapes

Apenas terminó el funeral de la digna reina Frigga y de los valientes guardias que cayeron durante el ataque de Malekith y los Elfos Oscuros, el ambiente en Asgard era solemne y lleno de tristeza. Todos nos dirigimos a la taberna como lo habían planeado, solo estábamos Sif, Frandal, Volstagg, Thor y yo. Nos sentamos alrededor de una mesa larga, de madera maciza. Thor se veía muy afectado por la pérdida de Frigga, su mirada perdida en algún punto más allá de nosotros.

— Lo que voy a pedirles es una traición del más alto nivel. El éxito nos llevará al exilio y el fracaso nos provocará la muerte. Malekith sabía que el Éter estaba aquí, puede sentir su poder. Si no hacemos nada, él vendrá por el Éter, pero esta vez destruirá todo lo que está en Asgard —suspira—. Nos llevaremos a Jane de este mundo.

— El Bifrost ha sido sellado y el teseracto se encuentra en la cámara —Sif cuestionó.

— Existen más salidas de Asgard, solo las conocen unos pocos —explica Haimdall.

— Uno, de hecho —aclara Thor.

— Loki —susurré, aún siendo audible para todos.

— No… —Volstagg se niega rotundamente.

— Él nos ayudará, no lo dudará en ningún momento, todo sea por venganza —apreté mis manos sobre la mesa, mostrando mi determinación—. Estoy segura de ello.

Todos en la sala giraron sus cabezas para mirarme, cada uno asintió, una acción casi mecánica, reflejando un acuerdo superficial con lo que se había dicho. Sin embargo, a pesar de este aparente consenso, podía sentir una tensión palpable en el aire. Sus miradas delataban una disonancia interna; una duda profunda que ninguno se atrevía a expresar en voz alta.

Sabían de la astucia y poder de Loki, pero también de su naturaleza impredecible y sus antecedentes de traición. Esta dualidad generaba un conflicto interno en cada uno de ellos.

— Sé que ustedes desconfían de él, pero es el único que nos puede ayudar.

En un rincón, Heimdall, que había estado observando la conversación en silencio, finalmente habló. Su voz, grave y calmada, cortó la tensión en la sala como un cuchillo. Todos volvieron la atención hacia él, ansiosos por escuchar sus palabras.

— Loki es impredecible y peligroso, pero su conocimiento de los caminos ocultos y su habilidad para el engaño son inigualables. Si realmente queremos salvar a Asgard y a la mortal, no tenemos otra opción —Haimdall se había acercado un poco a nosotros.

— Él te va a traicionar —Frandal le dice a Thor mirándolo a los ojos.

Thor con sus dos brazos sobre la mesa y sus manos juntas, piensa sus palabras y dice lo siguiente:— Lo va a intentar. Pero yo llevaré las esposas, en caso de que se atreva.

— Bien, entonces… ¿Y luego que? —se va contra el respaldo de la silla—. Tu hermosa mortal —mira a Thor mientras cruza sus brazos—, es protegida por una legión de Einherjar y deberán venir a kilómetros de distancia.

— Yo no voy a ser quien vaya por ella—Thor mira a Sif, significando lo que todos habíamos pensado.

Sif asintió, comprendiendo lo que Thor le estaba pidiendo. Su lealtad hacia él y hacia Asgard era indudable, y aunque sabía que la misión sería peligrosa, estaba dispuesta a asumir el riesgo.