Only Want | Loki Laufeyson

Capítulo 17: Charla importante

El sonido suave de la puerta cerrándose detrás de Loki resonó en la alcoba, dejándome sola con mis pensamientos. Mi corazón aún latía con fuerza mientras intentaba procesar lo que acababa de suceder. Aunque había pedido esos momentos a solas para prepararme, lo que realmente necesitaba era un instante para organizar las palabras que le diría.

El sueño que había tenido con él no dejaba de rondar en mi mente. En ese mundo onírico, su voz había sido tan clara, tan llena de certeza. "Tu poder es sorprendente", me había dicho, y lo más impactante: estamos destinados a estar juntos.

Me acerqué al espejo, buscando en mis propios ojos alguna señal de esa verdad oculta. ¿Cómo podría decirle lo que había visto, lo que había sentido? Loki siempre había sido un enigma, pero ahora, con este sueño, sentía que estaba a punto de descubrir una pieza crucial de ese rompecabezas, del cómo he llegado aquí, tal vez.

Loki merecía saber lo que había visto en mi sueño, y yo necesitaba entender por qué esas palabras habían resonado tan profundamente en mi ser. Con una última mirada al espejo, me giré hacia la puerta, decidida a encontrar respuestas.

Me dirigí al vestidor, donde encontré una túnica asgardiana de suave tela verde esmeralda que fluía elegantemente hasta mis tobillos, ceñida a la cintura con un cinturón dorado decorado con intrincados patrones. La tela, ligera pero resistente, se movía con gracia al ritmo de mis pasos.

Encima de la túnica, me coloqué un chaleco de dorado oscuro, ajustado y con detalles en relieve que resaltaban la artesanía asgardiana. Las mangas largas de la túnica se ajustaban perfectamente a mis brazos, y dejé que la abertura en la parte frontal permitiera un movimiento fácil y cómodo. Me até unas sandalias de cuero trenzado que subían hasta media pantorrilla, asegurándome de que cada nudo fuera firme.

Finalmente, Tomé un respiro profundo, sintiendo el peso reconfortante del amuleto sobre mi pecho, y me dirigí hacia la puerta, lista para enfrentar la conversación con Loki.

Abrí aquella puerta, Loki estaba cruzado de brazos, parecía impaciente, bueno, es impaciente. Su cara pasó de estar seria a una de un cachorrito emocionado.

Ahora sí que no pareces un gato negro.

— ¿Ahora a dónde quieres ir? —tomó mi mano, guiándola a su brazo cruzado, habiendo que la abrazara y sostuviera.

— A la...¿biblioteca? —sonó más como pregunta que como respuesta.

— Como gustes —aceptó Loki, comenzando a guiarme hacia allí—. Conversaremos luego sobre lo que me querías decir, aquel tema importante.

Tragué saliva, parpadeando un par de veces— Si, por supuesto.

Loki me condujo por los pasillos de palacio, su presencia a mi lado era tranquilizadora, aunque su impaciencia era palpable. La biblioteca estaba silenciosa, envuelta en una atmósfera de calma y concentración que contrastaba con el bullicio de las demás áreas del palacio.

Al entrar, me maravillé ante la vasta colección de libros y pergaminos que llenaban las estanterías de pared a pared. Los altos ventanales dejaban entrar la luz del sol, iluminando el espacio con un resplandor cálido y dorado.

Loki me guió a una mesa en el centro de la sala, rodeada de libros abiertos y pergaminos dispersos. Me indicó que tomara asiento mientras él se sentaba frente a mí, sus ojos brillaban con una mezcla de curiosidad y expectación.

— Bien, ¿qué es lo que querías decirme? —preguntó, su tono serio pero afectuoso.

Tomé una respiración profunda, sintiendo el peso de las palabras que había estado guardando.