16 | THANKS, BIRLEM

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ARIANNE SENTÍA COMO SUS MANOS TEMBLABAN y el aire le faltaba mientras veía los cientos de terrestres fuera del campamento, esperando el momento de la venganza.

Sentía su corazón latir fuertemente en sus oídos, ignorando lo que sea que estuviera diciendo Murphy delante suyo aunque sabía que intentaba consolarla tras haberla escuchado todo el camino de regreso lamentarse por no haber hecho algo más para ayudar a su amigo.

Ella, aún muy ida como para notar lo que hacía realmente, pasó una de sus manos por el cabello del chico, dejándolo confundido.

--¿Qué es eso?--preguntó con voz temblorosa, señalando un tronco grande que plantaban en el suelo.

--Es para Finn--contestó Clarke a su lado sin apartar la mirada--. Quieren que lo veamos.

--Vamos a recuperarlo--dijo Bellamy poniendo su mano en el hombro de Arianne--. Nos acercaremos y los atacaremos con todo.

--Hijo, hay miles de ellos--interrumpió Kane, logrando que el corazón de Arianne volviera a sacudirse, quedando con pocas esperanzas de volver a tener a su amigo en el campamento--. Incluso si matáramos a unos cientos, arrasarían con el campamento y tu amigo moriría.

La chica quería decirle que se calle, que cada palabra era como un latigazo para ella, pero solamente se quedó quieta, sintiendo como sus ojos se inundaban de lágrimas pero rápidamente las quitó, parpadeando.

--Tenemos que intentarlo--insistió la pelirroja.

--Abby--Raven miró a la mujer, que no le hizo caso--. Abby, tenemos que hacer algo.

Arianne también volteó a verla, recibiendo una mirada llena de pena de parte de Abby hacia ella.

--No.

Sentía como su cabeza empezaba a doler mientras buscaba alguna solución, entonces algo se le ocurrió y miró a Bellamy y a Clarke, que rápidamente la siguieron hacia la puerta del campamento sin hacer ruido.

Tenía miedo. No sabía lo que podría pasar ni qué haría exactamente, solamente sabía que debía intentarlo.

--Toma esto--le pasó su arma a Murphy, que los había seguido junto a Raven.

--¿Qué estás haciendo?--preguntó él queriendo agarrar su mano para detenerla pero ella la movió antes.

--Hablaré con la Comandante.

--¿Qué tienes para decir?

La chica negó con la cabeza tras darle una fugaz mirada al grupo, ya se encontraban en la puerta y no había tiempo para dudar, el de su amigo probablemente sería más corto.

--No lo sé.

--Dame tu mano--le pidió Raven acercándose a ella y obedeció, viendo cómo la chica arrastraba un pequeño cuchillo por debajo de la manga de su chaqueta--. Si no lo deja ir, mátala--Arianne tragó saliva con dificultad, viendo a la chica igual de desesperada.

--Eso es una locura, la matarán--dijo Murphy intentando hacerlas entrar en razón, pero ninguna hizo caso.

--Se hará un caos y los sacaremos a ambos.

Arianne miró hacia afuera del campamento. ¿Qué pasaría si no lograba salvarlo? Tal vez prefería morir intentándolo a quedarse cruzada de brazos viendo cómo torturaban a la única persona que siempre le había importado.

--Arianne, tienes que ayudarlo--pidió Raven, llamando nuevamente su atención--. Le debo mi vida.

La pelirroja asintió levemente, dándose la vuelta antes de que alguno pudiera decir algo más, ya estaba lo suficientemente nerviosa como para que alguien más le dijera lo que tenía que hacer y lograr que dudara.

𝐒𝐇𝐀𝐃𝐄𝐒 𝐎𝐅 𝐂𝐎𝐎𝐋 ──── 𝐉𝐎𝐇𝐍 𝐌𝐔𝐑𝐏𝐇𝐘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora