Relationship

117 14 1
                                    


Desde la perspectiva de Enid:

La relación con Ajax nunca había sido perfecta, pero últimamente se sentía más como una prisión que como un refugio. Al principio, Ajax era encantador, siempre con una sonrisa y palabras dulces. Pero con el tiempo, su verdadero carácter comenzó a emerger.

Ajax tenía un temperamento volátil. Cualquier cosa podía desencadenar su ira: una palabra mal dicha, una mirada que no le gustaba, incluso el simple hecho de que yo hablara con otros chicos. Sus celos eran sofocantes, y yo me encontraba constantemente caminando sobre cáscaras de huevo, tratando de no provocarlo.

Había días en los que Ajax era cariñoso, y esos momentos eran los que me mantenían atada a él. Pero esos días eran cada vez más escasos. La mayoría del tiempo, Ajax me menospreciaba, criticaba mi apariencia, mis amigos, incluso mis sueños. me hacía sentir pequeña, insignificante.

yo sabía que la relación era tóxica, pero había algo en Ajax que me hacía quedarse. Tal vez era el miedo a estar sola, o la esperanza de que él cambiara. O quizás, era la creencia de que merecía ese trato, una idea que Ajax había implantado en mi mente con sus constantes críticas.

Cada vez que intentaba alejarme, Ajax me manipulaba emocionalmente, prometiendo cambiar, rogándome que no lo dejara. Y yo, con un corazón blando y mi deseo de creer en lo mejor de las personas, siempre cedía.

Pero conocer a Wednesday había encendido una chispa en mí.

Por primera vez en años, me había sentido vista y hasta apreciada. El hecho de que Wednesday me hubiera dicho "hermosa" hizo que perdiera el control de todo. Esa palabra resonaba en mi cabeza una y otra vez. Hacía mucho tiempo que Ajax no me decía ni siquiera algo parecido. ¿Pero qué me pasa? ¿Por qué estoy pensando tanto en aquella mujer de pelo largo y oscuro, con unos ojos negros encantadores, penetrantes de hecho?. Mierda, ¿qué me está pasando? Mi cabeza daba vueltas y vueltas mientras a mi lado se encontraba Ajax.


Sin embargo, romper con Ajax no era fácil. Había una parte de mi que aún lo amaba, o al menos, amaba la idea de lo que él podría ser.

2:50 am. Aún no me podía dormir, pensando y pensando. En ese momento recordé que tenía el contacto de Wednesday. No me pude resistir y le mandé un mensaje.

Enid: Hola, Wedns, ¿estás despierta?

Wednesday: Hola, Enid. Sí, lo estoy. ¿Pasó algo?

Enid: No, solo te quería preguntar si puedes salir ahora. No sé cómo decírtelo, pero quiero verte.

Wednesday: No pensé que dirías eso, Enid. Está bien, salgamos. Voy camino a tu casa.

Luego de un rato hablando, acordamos vernos, pero no pensé en Ajax. Si hacía el más mínimo ruido, él podría oírme y no quiero saber qué podría pasarme. Una vez que Wednesday venía de camino, me apresuré para vestirme y salir de mi casa sin hacer ni un solo ruido. Pero no salió como esperaba. Apenas puse un pie fuera de la cama, tropecé con algo y caí al piso, haciendo que Ajax se despertara de un salto.

—Enid, ¿estás bien? —dijo sobresaltado.

—Sí, estoy bien, no te preocupes —dije con una expresión de susto en mi cara, al parecer notable.

—Te ibas a algún lado, ¿verdad? Enid, ¿me estás engañando? —me dijo con ira en sus ojos.

—Ajax, no te lo había dicho antes, pero estoy cansada de que siempre me digas lo mismo. No te incumbe a dónde voy —dije con una voz desafiante.

Él se paró de la cama y se acercó hacia mí con furia.

—No permitiré que me digas eso de nuevo, ¿escuchaste? —dijo mientras me miraba furioso a los ojos.

—¿Y si no qué, Ajax? ¿Qué me harás? —dije aún desafiándolo.

Él me miró realmente furioso, cegado por la ira. Luego me dio un golpe fuerte en el rostro.

—O-oye, ¿qué haces? —dije mientras mis ojos se cristalizaban y mi voz se entrecortaba. Tenía ganas de llorar. Él siempre me había hecho cosas malas, pero jamás me había levantado la mano. Era la primera vez que lo hacía. De repente, me largué a llorar desconsoladamente, aún sin poder creer lo que me había hecho. Con miedo, comencé a caminar lejos de él.

—No, Enid, espera. Yo no quería, solo... lo siento, por favor —dijo intentando detenerme.

—Ajax, simplemente... no me hables. No quiero saber nada de ti. Solo aléjate... —dije aún llorando desconsoladamente mientras me dirigía hacia la puerta para irme.

Nota del Autor:

¡Si te gustó este capítulo, no olvides dejar un voto para continuar con la historia! ¡Gracias! 

No me MiresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora