-ya es hora de irnos, Imogen nos espera y mis padres seguro están en el auto-dijo Nick, mientras se levantaba de la cama.
-si pero ¿Te encuentras bien? Te veo algo mal-terminaba de hacerse su delineado en el espejo. Dejó sus cosas en su bolsa de maquillaje dónde encontró de casualidad un termómetro viejo que llevaban mercurio-¿Quiéres que te mida la temperatura?-ofreció.
-no-tocó su frente-estoy bien-mintió. Sentía un dolor de cabeza insoportable y unos temblores así que a escondidas tomó un medicamento.
Partieron a casa de la muchacha. Los padres de Nick saldrían a cenar así que a horas de la madrugada ya estarían en su casa de vuelta.
Bailaron, hablaron, fumaron, tomaron. Bueno, lo último no fue algo que el rubio haya hecho por su tratamiento psiquiátrico. Le tentaba pero su mejor amigo lo cuidó.
Al final del cumpleaños, Nick comenzaba a temblar de nuevo y el viento no ayudaba. Por suerte sus padres ya los pasaban a buscar.
Habían hecho planes; Charlie quedaría a dormir a casa del rubio.Apenas llegaron, a pesar de tener dos colchones, decidieron dormir en la misma cama.
-amigo, mueres de calor-el tacto de la mano de Charlie en la piel de Nick le hizo sobresaltar.
-claro que no-temblaba y se escondía entre las frazadas de invierno aún así estando en otoño.
-si tu lo dices-besó la frente del rubio quién se escondió más entre las mantas, temblando-pero no puedo dejarte asi...-con cariño pasaba su manos en el cabello de su amigo, enredando sus dedos en este.
Nick estaba acostado mirando la pared mientras recibía mimos del otro chico. En un momento dejó de recibir afecto, eso significaba que Charlie había quedado dormido.
Allí fue cuando aprovechó y comenzó a llorar. En su cabeza imaginaba miles de escenarios con el rizado, besándolo, abrazándolo. Dándose duchas juntos después del sexo, desayunando con la ropa de Charlie. Dormir juntos y pasear con las manos entrelazadas.
Se levantó porque volaba de fiebre. Tenía frío aunque su cuerpo estaba caliente. Tomó una sudadera abrigada y volvió a la cama. Charlie despertó por el movimiento del rubio.
-Nicki, no hace tanto frío...
-shh-limpió sus lágrimas-sigamos durmiendo -tomó la mano del chico y la posó en su cadera.
-Nick, mirame-el rubio negó-mirame, por favor -insistió y al negarse de nuevo, le tocó la mejilla-estás volando de fiebre y....-sintió húmedad-¿Estás llorando?.
Solo se tapó con la manta de nuevo.
Charlie sin vergüenza besó el cuello de su amigo-oye, necesito que te levantes un momento-susurró-se sentó en la cama y de su mochila sacó su portacosméticos donde estaba el termómetro-vamos, a ver tu temperatura Nicki.
Nick tardó unos minutos en levantarse pero lo hizo. Sus ojitos algo rojos por el llanto y sus mejillas coloradas.
-muy bien-se levantó de la cama y encendió la luz-levanta el brazo-dijo cuando se acercó al rubio. Este le obedeció-
Eran las 4am y en la habitación entraba frío. El silencio reinaba en toda la casa-ahora me cuentas que sucede que lloras.-no lo soporto.
-¿La fiebre? Pues si, es...
-no, ósea, sí. Es fea la fiebre-rió apenado-pero no soporto otra cosa.
-¿Se puede saber?- Charlie sacaba un cigarrillo de su mochila.
-¿Vas a fumar y no compartes?
-te iba a invitar pero recordé que a tu familia no le gusta que fumemos dentro de tu casa -rió y guardó el cigarro.
-podemos ir a la terraza-se encogió de brazos y justo sonó el termómetro anunciando que ya midió la temperatura.
-no, estamos bien así. Además te vas a enfermar peor con el cambio de temperatura-tomó el aparato -oh, 40 grados-apoyó su mano fría para el cuerpo caliente del chico, quien temblaba-necesitas un baño.
-no, solo necesito un abrazo calentito.
-eso te hará peor, amigo -rió. Se tiró encima de él y quedaron acostados mirandose a la cara con una sonrisa tierna. Charlie acariciaba sus narices con delicadeza.
Nick dió el siguiente paso. Lo besó sin miedo.
-¿Me besaste?-susurró divertido.
-no-sonreía y volvió a darle un besito en los labios, de nuevo -o quizá sí.
Una sonrisa de amor y ojitos brillosos se presentaban en el rostro del rizado.
-te haré un té y lo tomarás con un medicamento ¿Sí?
-pero primero....
-¿Qué?
-un beso por favor, quizá me saque este malestar.
-me vas a contagiar -sonrió y de igual forma le plantó un besito en los labios-¿Ahora, después del té, me contarás por qué llorabas?.
-si.
[🍒]
Por partes, viví todo esto :(