Los Argent

XXII.- Propuesta Inesperada

Stiles suspiró cansado mientras leía los libros del bunker. Dean y Sam estaban a su lado, el mayor de sus tíos estaba más concentrado en su portátil hablando con los hijos de Deucalion que investigando a criaturas sobrenaturales o viendo las cosas que le correspondían del pueblo.

— ¿Mucho trabajo? Deberías tomarte unas vacaciones, a este paso vas a verte más viejo que Dean. — le dijo Sam mientras le daba otra taza con café a su sobrino.

— Hay muchas cosas que hacer antes de poder tomarme un descanso. Necesito concentrarme en lo que tengo enfrente. Quiero hacer de este un buen pueblo donde nadie tenga que esconderse y que los demás puedan disfrutar de sus vidas tranquilas sin importar si son humanos o sobrenaturales.

— Tienes un gran sueño por cumplir, pero necesitas tiempo para hacerlo. Roma no se construyó en un día y también mereces disfrutar de un poco de la paz que has logrado en este tiempo.

— Si siguen dándome sermones por todo voy a volverme más viejo, ojala me volviera rico.

— No seas modesto, tienes suficiente dinero y con lo que tiene tu novio puedes vivir en paz. — le dijo Dean mientras negaba con la cabeza. De verdad su sobrino era demasiado terco como para dejar de lado su trabajo, a este paso e iba a convertir en un adicto al trabajo.

— No puedo vivir de Derek, nosotros somos un equipo así que quiero hacer mi parte.

— Necio como tu madre y como todos en esta familia. — dijo Sam mientras negaba con la cabeza.

— Es el mal de los Argent y Winchester.

Los tres rieron levemente.

— Me imaginó que ustedes también saben lo que Derek oculta, es obvio que todos en la manada lo saben. Incluso yo comienzo a sospechar que es lo que esconde. — rio levemente mientras anotaba algunas cosas en una libreta — No soy tonto y no nací ayer, además soy el mejor el mejor detective que hay.

— Tan bien eres muy modesto, recuerda eso.

— No necesito ser modesto con lo genial que soy.

— A veces puedes ser todo un personaje.

*

Derek miró sus manos sudorosas, estaba nervioso. Hoy saldría a una cita con Stiles, pero no sería una cualquiera sino que al fin va a pedirle que se case con él. Estaba nervioso tenía que admitirlo, no quería que algo resultara mal sin importar lo mucho que se amaban aún tenía miedo de que no aceptara su propuesta.

— ¿Estás bien, sourwolf? Parece que estás al borde del colapso y eso no es algo muy común en ti. — le dijo Stiles con diversión al ver a su novio de esa manera.

— ¡Sí! Solo estoy emocionado por nuestra cita. ¿Cómo estuvieron las cosas en el bunker?

— Comparé la información de mi abuelo con la de los libros del bunker. Es interesante, encontré algunos libros que hablan de los antepasados de tu familia. Al parecer tu bisabuela era una vampira.

— ¿De verdad? — ambos subieron al auto del Alfa.

— Sip. Es interesante.

*

— Así que hoy lo va a hacer, ¿verdad? — comentó Chris viendo a los Betas emocionados.

— Si. Después de tanto tiempo hoy planea hacerlo. — le dijo Allyson con diversión al ver como Scott y los demás preparaban la mansión para cuando la pareja regresara.

— Eso es bueno, ya se estaba tardando y tu hermano no es muy paciente.

— Es bastante paciente con Derek. — rio al ver a Peter — Sabes... También puedes ser feliz, papá. Tú también mereces seguir con tu vida con la persona que realmente quieres. Peter es una buena persona, está un poco loco, pero quiere mucho a Mica y es amable conmigo. No tienes que preocuparte por nosotros, puedes seguir adelante. — le dijo Allyson con ternura.

A veces los padres necesitaban de un pequeño empujón.

— ¿Es lo correcto?

— Mereces ser feliz tanto como nosotros. Ahora solo ve y ya. — le dijo Allyson mientras empujaba a su padre hacia el lobo mayor.

— ¿Qué necesita uno de nuestros cazadores favoritos? — le preguntó Peter a Chris en cuanto se acercó al lobo.

— Una cita.

— Oh. ¿Conmigo?

Chris suspiró. ¿De verdad el lobo tan inteligente no podía captar que quería una cita con él?

— No, con tu hermano. Por supuesto que quiero una vita contigo, lobo inútil.

— Auch. No tienes que ser tan grosero. — le dijo Peter con diversión tomando la mano del cazador.

— Si usarás ese cerebro tuyo y tus sentidos sabrías que quiero una cita contigo.

— Sí, sí. Lo siento, Christopher y claro que tendremos una cita.

Chris puso los ojos en blanco y se atrevió a besar los labios del lobo.

— Eso me gusto. — le dijo Peter al cazador en cuanto se separaron.

Los demás Betas vieron con sorpresa lo que había pasado.

— Creo que Peter Hale va a convertirse en tu nuevo padrastro. — molestó Scott a su novia.

— No es tan malo, Scotty. Aunque no me hagas pensar en que ese lobo será mi padrastro, ugh, no había pensado en eso.

Scott rio con versión.

*

Stiles miró con ternura el anillo de oro blanco que ahora adornaba su dedo anular, era hermoso y tenía un pequeño lobo grabado en el.

Derek sonrió mientras tomaba la mano de su ahora prometido y besaba el dorso de la misma mientras conducía a la mansión.

— Tengo que admitir que jamás espere que cayeras al lago cuando me hicieras esa pregunta. — rio Stiles.

Derek había llevado a su castaño a un claro que solía visitar de niño y tuvieron un picnic con toda la comida favorita del castaño. Cuando llego el momento de arrodillarse y hacerle la pregunta al otro terminó resbalándose y cayendo al pequeño lago que había detrás de ellos.

— Bueno, tendremos una historia bastante divertida que contarles a nuestros hijos. — le dijo Derek ligeramente avergonzado.

— Me puedo ver diciéndoles: niños les voy a contar como su padre me pidió matrimonio y termino empapado. — sonrió y besó la mejilla del castaño — Pero a pesar de todo hoy ha sido el día más feliz de mi vida.

Derek sonrió.

Llegaron a la mansión y al bajar del auto Derek tomó la cintura de su ahora prometido y lo apegó a él.

— También es el día más feliz de mi vida, gracias por quedarte a mi lado Mieczyslaw.

Stiles sonrió y beso los labios de su lobo, su adorado y hermoso lobo.

— ¡Creo que dijo que sí! — gritó Erika desde la mansión. La chica estaba asomada por una de las ventanas.

— Que bueno, no quería un momento incómodo después de preparar esta cena. — comentó Alec con fastidio aunque había una pequeña sonrisa adornando su rostro.

Derek suspiró frustrado mientras Stiles reía.

— Amo a nuestra manada. — comento el castaño mientras se separaba del otro y solo lo tomaba de la mano.

— Vamos, nos están esperando.

Stiles asintió.