EL JOVEN QUE QUIZO SALVAR A LA SANTA DE UN MUNDO DE FANTASÍA

Capítulo 29

Cuando revisó la hora, se dio cuenta de que todavía era temprano, las 8 de la mañana. Quizás se despertó temprano por haber ido a dormir más temprano de lo usual. Bueno, no era tan relevante.

Dejó a la mariposa intacta y se fue a asear. Cuando salió de su cuarto de baño se encontró con una señora no mayor a los 60 años y pensó que era una sirviente más, por lo que solo la saludó.

––Señorita Nile, pensé que me había extrañado, pero acabo de regresar de mis vacaciones y me encuentro con la noticia de que se irá de la Sede. ¿Deseará que la acompañe a su pronta morada definitiva? ––Nil no sabía que decir, parecía que la Santa y la señora tenían una relación cercana.

––No es tanto así, por ahora no habrá matrimonio, por lo que todavía puede que regrese seguido ––La señora todavía se veía expectante a que Nil dijese algo más, por lo que improvisó––. Lo cierto es que como hoy es mi último día aquí, podrías acompañarme...

––Claro, ¿para qué más estaría en la Santa Sede si no fuese por usted? ––la mujer sonrió animada y comenzó a ordenar la habitación.

Nil le devolvió la sonrisa porque le daba confianza y decidió salir de improviso hacia la biblioteca junto a la mariposa, aprovechando que la señora tenía algunas obligaciones pendientes antes de asistirlo por completo. Necesitaba "recordar" cual era la exacta relación que tenían la señora, de la cual todavía no sabía su nombre, y la Santa.

Cuando llegó a un rincón alejado de los demás dentro de la biblioteca, sacó su libreta de uno de sus bolsillos y lo colocó en el escritorio que había reservado.

La mariposa se posó en la pluma que tenía entre sus dedos y se le quedó viendo a Nil.

––Mariposita... ¿sabes por qué hemos venido a un lugar solitario? ––la mariposa revoloteó un poco y se volvió a quedar inmóvil–– Claro, te lo cuento porque no puedes leer la mente. No recuerdo la relación que tenía con la ayudante que nos visitó en mi dormitorio antes, pero sé que es importante para mí...

La mariposa se quedó en su lugar por unos momentos y luego mojó sus patas con tinta; después voló en círculos sobre la libreta cerrada de la Santa. Nil la abrió en una página en blanco y se interesó en las acciones de aquel pequeño bicho.

ALARU---NANA

A Nil se le desencajó la boca y sostuvo por unos momentos a la mariposa. ¿Acaso realmente tenía conciencia?

Desde el principio debió resultarle extraño, una mariposa común no se quedaría a su lado. Hay de dos, podía ser una mariposa especial en aquel nuevo mundo y era sabia o algo a parecido, o era alguien disfrazado en su cuerpo.

Él recordaba tramas con personajes que obtenían ayuda de animales como conejos, aves, dragones (ya haciéndolo más obvio), y en su caso no podría ser extraño una mariposa.

Observó detenidamente a la mariposa con sospecha y esta se posó sobre su nariz, manchándolo con la tinta restante.

––Eres algo fuera de lo normal, eso es obvio ––la mariposa volvió a volar sobre la libreta––. Dime, ¿debería confiar en ti? Sé que eres alguien, ¿quién eres? ––Nil en realidad no estaba seguro, pero no iba a pasar el ridículo de todas maneras haciendo suposiciones–– Vamos, escribe algo, por favor.

GALE---IMPORTANTE

––Ya... mira, vamos a hacer esto. Por ahora te voy a creer, pero para facilitar las cosas voy a hacerte preguntas, aletea 2 veces para "no" y 1 para "sí" ––la mariposa se quedó quieta–– Pero sé sincero... Gale.

––¿Eres un espía? ––no–– ¿Eres si quiera una persona? ––sí–– Bien... Podrías venir a hablarme directamente ––no–– ¿Es complicado? ––luego de algunos segundos, sí–– Entiendo, ¿pero eres alguien fácil de encontrar? ––sí–– ¿Tienes un alto cargo en otro imperio, quizás? ––sí–– Jajaja, ya veo, eres alguien muy destacable ––la mariposa revoloteó un poco, Nil pensó que era su forma de reírse–– Entonces, dime, tu compañía no es perjudicial, ¿no? ––no.

Nil no sabía qué pensar, pero por ahora confiaría.

––Ahora que lo pienso ¿tú estás involucrado en la guerra entre Eternia y Lynuster de alguna manera? ––la mariposa parecía pensar, sí–– Eso puedo tomarlo de dos maneras, pero ¿eres de Lynuster? ––sí.

Nil sintió palidecer, eso podía ser un mal presagio, una mala señal.

––Averiguaré quién eres, Gale ––la mariposa solo aceptó–– De todos modos, sospecho si ese sea tu nombre real. Pero gracias por ayudar con el nombre mi nana.