Cambios de toda una vida

Capítulo 9: Mami

Habían regresado de su primer caso real con Jordan un par de horas antes y todavía era extraño para todos que JJ no estuviera. La rubia ruda era parte de la familia, y como cualquier otra persona, era difícil para Jordan encajar en el grupo. Emily se sentó en su silla mirando la carpeta frente a ella. No había trabajado en nada durante los últimos diez minutos, atrapada en sus pensamientos. La agente Todd era una agente fabulosa y, si tenía la oportunidad, demostraría su valía tal como lo había hecho Emily. Entendió lo difícil que era unirse al equipo. Incluso Rossi se había establecido más rápido que Emily, simplemente porque todos sabían lo que había hecho por la unidad, antes de que nadie más en el equipo hubiera pensado en unirse a la BAU. Por otra parte, lo más probable es que Rossi no llevara tantos secretos como ella, gracias a su tiempo en la Interpol.

Sus ojos vagaron hacia donde estaba sentado Derek, concentrado en el archivo que había obtenido de Jordan para cumplir su promesa. Ahí es donde comenzó su problema con Jordan. Ella lo estaba envolviendo alrededor de su dedo meñique y a Emily no le gustaba, lo que la llevó al siguiente problema. No había mucho que pudiera hacer al respecto. Sí, pasaba cada momento libre con su pareja y su hija, pero eso no la ponía en la posición de decidir a quién estaba viendo. Ni siquiera le daba permiso para estar celosa como lo estaba, especialmente cuando no había ninguna razón. Si no fuera por Avery y la inmensa cantidad de tiempo que pasaba con los dos, probablemente ni siquiera le importaría que coqueteara, porque eso era un derecho de todos.

Morgan levantó la vista, sintiendo que ella lo miraba, y sonrió al instante.

—Hola, ¿puedo pedirte un favor?

—¿Qué sería eso?

—Ve a mi casa y deja que Sophie se escape el fin de semana que le prometí que se iba.

—Parece que estás haciendo muchas promesas últimamente. —Podía ver en su rostro que su reacción había sido mucho más dura de lo que debería.

—Bueno, me gustaría terminar esto antes del fin de semana. Te prepararé la cena. —Si ella se negaba a ir a jugar con su adorable hija por cualquier razón, por lo general la conseguía con la oferta de comida. Emily hizo una mueca, sabiendo exactamente qué carta estaba jugando.

—Supongo. —Agarró su bolso y la pila de archivos en los que se suponía que debía estar trabajando. No estaría más distraída con sus pensamientos en casa que aquí, así que bien podría ir a su casa. Solo media hora después, había llegado a su casa y, después de una breve charla con Sophie, se dirigió desde el porche hasta el fondo del patio donde Avery estaba jugando.

En las últimas semanas, se había establecido que Emily pasara casi todo su tiempo libre con Morgan y su pequeña hija, especialmente cuando él todavía estaba herido y después; era parte de sus hábitos. Ni siquiera podía recordar cuándo había ido a casa un fin de semana por última vez. A Derek siempre se le ocurría algo que quería hacer con Avery y ella, o incluso solo con ella. Probablemente esta era la razón principal por la que no podía deshacerse de la sensación de celos cada vez que Jordan interactuaba con él de alguna manera que fuera más allá de una conversación profesional. Hace unos días, incluso se había sorprendido a sí misma pensando en ellos como su familia y, si era honesta consigo misma, estaba preocupada por el fuerte vínculo que tenía con la niña. Después de todo, si alguna vez tenía que mudarse por su trabajo o, peor aún, si Derek realmente comenzaba a ver a alguien, no había nada que pudiera hacer para volver a ver a la niña.

A pesar de todas las dudas, no pudo resistirse a pasar tiempo con la pequeña familia y por eso había acordado cuidar a Avery por un tiempo. Sophie ya estaba adentro terminando de hacer las maletas, ya que planeaba irse el fin de semana. Avery estaba jugando en la caja de arena que su padre había preparado para ella. Había empezado a refrescar ahora que el invierno estaba llegando, pero con su abrigo de invierno la niña estaba bien.