Franxi: Un nuevo comienzo

24: Basta de mentiras.

—¿Hola? —Maxi contestó.

—Nescesitamos que se dirija hacia el Hospital. Su hermano se encuentra en mal estado... —Un hombre de voz suave se escuchó a través del teléfono.

—¿Lyan? —Maxi dejo caer el teléfono y se dirigió hacía el auto rápidamente.

—Son las 6 AM... ¿Qué ocurre? —Franca se encontraba cansada, su voz casi no se escuchaba.

—No hay tiempo para hablar... Tengo que ir a ver a mi hermano... —Respondio con un tono agitado.

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[Hospital]

Un hombre se encontraba en la secretaria, por lo que atendió a Maxi.

—Hola, he venido porque recibí una llamada por parte de ustedes. —Le comunicó, su voz estaba cada vez más nerviosa.

—Usted es Máximo ********.... ¿No? —Le hombre empezó a escribir en el teclado.

Maxi asintió con la cabeza.

—Bueno, adelante... Su hermano ha sido trasladado a la habitación C12. —Luego, el hombre se lo comunico al doctor que se encontraba atendiendo a Lyan.

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Maxi abrió la puerta de la habitación C12 y al entrar se percató de una triste noticia.

—¿Que ocurrió? —Pregunto Maxi al ver el cuerpo inconsciente de su hermano.

—Lo siento, pero al parecer los medicamentos han sido un tanto pesados para su cuerpo... —Contestó el doctor, mientras se acercaba a Maxi.

—¿Por cuánto tiempo estará así?... —Maxi se estaba poniendo un tanto preocupado.

—No lo se con certeza... Pero quizás este así por semanas... Incluso meses. —La voz del doctor se empezó a notar un tanto nerviosa. No podía sostener tal mentira, pues este sabía cual era el verdadero motivo del desmayo.

—¿¡Qué no lo sabes con certeza!? —El joven agarró al doctor de la corbata.

—Es decir... Todo depende de que tal va su recuperación... Incluso podría ser un efecto secundario del cáncer. —El hombre se echo para atras.

—Perdón... He estado algo estresado estos últimos meses... —Maxi dejo caer una ligera lágrima.

—Lo entendemos, sabemos por la compleja situación que ha vivido con la noticia de su padre...

—Tengo cosas que hacer... Quizás vuelva mañana a ver que tal esta mi hermano... Hasta pronto. —Luego Maxi agarró un paño y empezó a secar sus ojos aguados.

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[Una semana después]

Maxi se encontraba en su habitación charlando con Franca y sus amigos a través de una llamada telefónica.

Y por cierto, Franca y Maxi habían tenido una extensa conversación, tal y como Lauri le había recomendado. A pesar de que no volvieron a ser pareja, ambos se dispusieron a tratar de volver a lo que tenían, pero de una forma más saludable.

—¿Y qué tal ha estado tú hermano? —Le preguntó Franca con preocupación.

Maxi le explico que a pesar que seguía inconsciente, él se sentía más aliviado.

—He pensado que entre todos podríamos ir a verlo. Después de todo... No creo que nos digan que no podemos pasar. —Ideo Franca.

—Tienes razón... Esperen, les enviaré la ubicación.